FiorenzoMagni
Himbersor
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Tras nochebuena y navidad se me ha antojado un aperitivo de membrillo con anchoa y no me he podido esperar a que me lo pongan en la mesa el próximo domingo o lunes.
Presto, he tomado la iniciativa y, yo que no soy de ir a supermercados, me he metido en un mercadona que me pillaba medianamente de paso.
Mucha gente y los trabajadores con prisas y cara de agobio. Yo, tranquilo, buscando mi membrillo pasillo a pasillo, ya me había recorrido toda la tienda (excepto zonas de carnicería y tal) me he topado de frente con un uniformado de mercadona y he improvisado un "membrillo".
No tenía pensado molestar a nadie, tenía todo el tiempo del mundo y no tenía prisa alguna pero al toparme de repente con él, me salió ese reclamo de ayuda. Membrillo, sabe dond... ni pude terminar la frase cuando me pegó un empujón que me estampó contra la estantería.
Anonadado y estupefacto, trato de levantarme rápido pero me resulta imposible, se llena el pasillo de gente y oigo a mi agresor decir que le he llamado membrillo y no se qué. Intenté dar explicaciones pero me puse a llorar con tanta presión cuando uno de seguridad me agarra de los pies y me empieza a arrastrar.
A rastras que me sacaron de allí hasta la zona de las cajas y la puerta de salida, yo pidiendo el libro de reclamaciones pero no se me entendía y ya cuando me calmé un poco me daba vergüenza volverlo a pedir.
Menudo cabreo he llevado a casa, y sin el puñetero membrillo que me iba a tomar de postre.
Presto, he tomado la iniciativa y, yo que no soy de ir a supermercados, me he metido en un mercadona que me pillaba medianamente de paso.
Mucha gente y los trabajadores con prisas y cara de agobio. Yo, tranquilo, buscando mi membrillo pasillo a pasillo, ya me había recorrido toda la tienda (excepto zonas de carnicería y tal) me he topado de frente con un uniformado de mercadona y he improvisado un "membrillo".
No tenía pensado molestar a nadie, tenía todo el tiempo del mundo y no tenía prisa alguna pero al toparme de repente con él, me salió ese reclamo de ayuda. Membrillo, sabe dond... ni pude terminar la frase cuando me pegó un empujón que me estampó contra la estantería.
Anonadado y estupefacto, trato de levantarme rápido pero me resulta imposible, se llena el pasillo de gente y oigo a mi agresor decir que le he llamado membrillo y no se qué. Intenté dar explicaciones pero me puse a llorar con tanta presión cuando uno de seguridad me agarra de los pies y me empieza a arrastrar.
A rastras que me sacaron de allí hasta la zona de las cajas y la puerta de salida, yo pidiendo el libro de reclamaciones pero no se me entendía y ya cuando me calmé un poco me daba vergüenza volverlo a pedir.
Menudo cabreo he llevado a casa, y sin el puñetero membrillo que me iba a tomar de postre.
