Markkus
Madmaxista
Estoy hasta los huevones de tanto comemierda con la fruta banderita borbona (Cruz de Borgoña es la nuestra) de los huevones alardeando de algo que le viene grande. Porque luego estos "españoles" son los que toleran que haya gobiernos de me gusta la fruta saqueando el país, empobreciendo a la gente y vendiendo soberanía al FMI, Bruselas y Alemania. Son los desgraciados que con su complicidad han arruinado España al punto de que en un momento histórico incluso se apropiaron de ella para negársela a nosotros, sus MEJORES HIJOS, aquellos que sí la habremos de ENGRANDECER restaurándole su GLORIA y HONRA.
El que no tenga hoy día una buena MAZADURA TATUADA con capacidad para imponer la ley de la primera voz, inspiración filosófica ejercida por la violencia de un pensamiento de corte nietzscheano en consonancia con unos instintos de infanzón castellano NO ES ESPAÑOL ni puede serlo.
La poderosidad del español clásico (esta virtud nuestra se mantiene atemporal) reside en sus huevonES, su grandeza de espíritu, su fuerte y determinado carácter así como su temperamento bravucón y arrogante que le sitúa en primera línea de fuego sabiendo que como ESPAÑOL es donde te toca estar. Nuestra viril raza siempre destacó por la predisposición a abrazar la fin antes de capitular. Esta dureza y exigencia para con uno mismo sumadas a las características ya reseñadas es lo que te hace devenir en un moderno Quijote tirando de barra de acero a la mínima buscando exaltar un espíritu español que infunde extraordinario valor y épica; un moderno Don Juan Alatriste Casanova paseando firme el empaque sin que le sostenga la mirada ni la fruta que te parió al tiempo que va seduciendo mujeres con chulería, picardía, bravura y casta.
Eso es ser ESPAÑOL. Allá donde nuestros ancestros demostraron ante la Historia dónde estaba la firmeza de un contingente español lo vemos una y otra vez: Pizarro conquistado una civilización marchando con 11 bravos como él por selvas inhóspitas; soldados-literatos del Siglo de Oro que dejaron el pabellón de las ARMAS y las LETRAS en el TOP mundial demostrando porqué nuestra viril raza dominó medio mundo batiéndose con la otra mitad; el Empecinado y sus aguerridos guerrilleros combatiendo al invasor y aún por las libertades de la Patria; Durruti acojonando banqueros imponiendo la justicia proletaria a leche limpia, Durruti liderando columnas de obreros revolucionarios armados, Durruti muriendo en primera línea.
Tomad nota ratas betas que os extermino de la primera mirada que sois unos gaies de cosa.
VIVA LA fin
El que no tenga hoy día una buena MAZADURA TATUADA con capacidad para imponer la ley de la primera voz, inspiración filosófica ejercida por la violencia de un pensamiento de corte nietzscheano en consonancia con unos instintos de infanzón castellano NO ES ESPAÑOL ni puede serlo.
La poderosidad del español clásico (esta virtud nuestra se mantiene atemporal) reside en sus huevonES, su grandeza de espíritu, su fuerte y determinado carácter así como su temperamento bravucón y arrogante que le sitúa en primera línea de fuego sabiendo que como ESPAÑOL es donde te toca estar. Nuestra viril raza siempre destacó por la predisposición a abrazar la fin antes de capitular. Esta dureza y exigencia para con uno mismo sumadas a las características ya reseñadas es lo que te hace devenir en un moderno Quijote tirando de barra de acero a la mínima buscando exaltar un espíritu español que infunde extraordinario valor y épica; un moderno Don Juan Alatriste Casanova paseando firme el empaque sin que le sostenga la mirada ni la fruta que te parió al tiempo que va seduciendo mujeres con chulería, picardía, bravura y casta.
Eso es ser ESPAÑOL. Allá donde nuestros ancestros demostraron ante la Historia dónde estaba la firmeza de un contingente español lo vemos una y otra vez: Pizarro conquistado una civilización marchando con 11 bravos como él por selvas inhóspitas; soldados-literatos del Siglo de Oro que dejaron el pabellón de las ARMAS y las LETRAS en el TOP mundial demostrando porqué nuestra viril raza dominó medio mundo batiéndose con la otra mitad; el Empecinado y sus aguerridos guerrilleros combatiendo al invasor y aún por las libertades de la Patria; Durruti acojonando banqueros imponiendo la justicia proletaria a leche limpia, Durruti liderando columnas de obreros revolucionarios armados, Durruti muriendo en primera línea.
Tomad nota ratas betas que os extermino de la primera mirada que sois unos gaies de cosa.
VIVA LA fin