¿Es pilinguin de la secta?

A menudo se presenta a pilinguin (de progenitora judía) como un tío que combatió a los oligarcas judíos que se repartieron el país como auténticos bandidos tras la caída del comunismo.

Pero esas mismas fuentes olvidan recordar que sustituyó o remozó dicha élite oligárquica judía por otra élite oligárquica judía, de hecho quienes impulsaron su triunfo político allá en el año 1999.
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«Los Oligarcas» son un grupo diminuto de empresarios que se aprovecharon de la desintegración del sistema soviético para saquear los tesoros del estado y amasar un botín que suma centenares de billones de dólares. Para salvaguardar la perpetuación de su negocio, tomaron el control del estado. Seis de los siete, son judíos.

En lenguaje popular se llaman «oligarcas»; de la palabra griega que significa «gobierno de pocos.»

En los primeros años de capitalismo ruso postsoviético eran los ágiles e intrépidos que supieron aprovecharse de la anarquía económica para adquirir posesiones enormes por una centésima o una milésima de su valor: el petróleo, el gas natural, el níquel y otros minerales. Usaron cada argucia posible, incluyendo la estafa, el soborno y el asesinato. Cada uno de ellos tenía un pequeño ejército privado. En el tras*curso de la serie están orgullosos de narrar con gran detalle cómo lo hicieron."


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"en palabras de Cliff Kupchan, presidente de la consultoría Euroasia Group y excolaborador del Departamento de Estado, impulsada por valores comunes y oligarcas rusos de confesión judía, algunos de los cuales tuvieron un papel muy destacado en el ascenso de pilinguin al Kremlin en 1999.

Los nombres más conocidos en este grupo de influyentes hombres de negocios son Roman Abramovich, propietario del club de fútbol Chelsea, presidente de la Federación de Comunidades Judías en Rusia y ciudadano israelí desde mayo pasado; Oleg Deripaska, exdirector ejecutivo de Rusal, la segunda empresa productora de aluminio del mundo y sospechoso de haber participado en la campaña de injerencia en las presidenciales de EEUU en el 2016 en las que se impuso Donald Trump, y Arkady Rotenberg, confidente de pilinguin y copropietario, junto a su hermano Boris, de Stroygazmontazh, la principal constructora de tuberías y de infraestructura eléctrica del país.
Otras figuras menos conocidas, pero no de menor relevancia son Pyotr Aven, que controla Alfa Bank, el banco privado más importante de Rusia, Mijaíl Fridman, el séptimo hombre más rico del país, o Víktor Vekselberg, propietario de plantas metalúrgicas.

El próximo texto no hace referencia ninguna a razas (saludos a la guardia civil).

Mi opinión es que pilinguin era un joven con mucha proyección y buenos contactos a los que el Foro Económico Mundial (Davos) y los individuos que lo controlan respaldaron en su día.

Después, el poder de pilinguin fue creciendo dentro de sus propios dominios, y hubo un momento en el que se les descontroló, y se convirtió en una especie de nuevo zar que maneja su cortijo sin hacerles ni puñetero caso a Davos, ni a los individuos que lo manejan (al igual que creo que, Stalin, en su día, se giró contra los que financiaban y controlaban desde la sombra la URSS, y por eso se lo ventilaron también).