Ninguna, lo más parecido es EEUU, pero tiene defectos graves.
-El poder de veto del presidente (limita la separación de poderes)
- Que el presidente no sea elegido a doble vuelta y mediante elección directa, el asunto de los compromisarios estaba bien en el siglo xviii, alguien tenía que ir a caballo a presentar los resultados, hoy en día no tiene sentido.
- La financiación privada de las campañas de los candidatos aunque sean tras*parentes, eso genera dependencias y devolución de favores, influencia del poder económico en las decisiones políticas.
Dicho ésto, en EEUU es fácil arreglar esos problemas con el sistema vigente.
Luego está Francia, que sobre el papel lo tiene todo para serlo, elección uninominal de los parlamentarios y elección directa de los presidentes a doble vuelta.
Pero Francia tiene dos defectos, uno es que el parlamento debe aprobar la elección de los "ministros" que hace el presidente (limita la separación de poderes).
Y el más grave de todos que impide la democracia. Los partidos tienen demasiado poder y eligen a los candidatos, no el pueblo, por lo tanto tienen control sobre ellos. En la práctica Francia funciona como la partidocracia española, con niveles de sectarismo y voto cautivo aberrantes.
Así de delicada es la democracia, tienen que estar todos los factores o no funciona.