En mi oficina les han dado puerta a los interinos. la más depre: la chica.

fachacine

Del facherío me fío
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25 Nov 2014
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Junto al mar
Como ha ocurrido en muchas oficinas de la Administración del Estado entraron en mi oficina hace unos meses un grupo de 7 interinos, 6 chavales y una chica. Es la segunda tanda de interinos que tenemos, lo cual es absurdo porque va en contra de cualquier criterio de eficacia y eficiencia, a los anteriores interinos después de haber perdido el tiempo en formarlos los echan a la calle a los 9 meses para meter otra tanda de interinos a los que tienes que perder el tiempo en volver a formar cuando los recién salidos estaban ya formados, acoplados y rindiendo bien. En fin, una pérdida de tiempo, absurdos de la Administración.

Pero a lo que iba, esta última tanda eran 6 chavales y una chavala, durante 9 meses que los hemos tenido han probado la experiencia de cómo se vive y cómo se trabaja siendo funcionario. Han conocido los horarios, los almuerzos, el teletrabajo, las facilidades en cuanto a conciliación familiar, etc. Bueno pues ha sido comunicarles que los van a cesar después de 9 meses y os aseguro que la más depre, la más triste de los 7 es la chica, de hecho en los almuerzos salíamos varios juntos a tomar un café y en los últimos dias la chica estaba plof, hundida, se había acostumbrado a la vida de funcionaria y se le hacía muy cuesta arriba tener que dejarlo.

Digo esto porque contrastaba mucho con la actitud de los otros 6 interinos masculinos, por supuesto que también les daba pena marcharse pero ya tenían todos proyectos para el dia después, uno tenía una oferta de una empresa, otro estaba preparando unas oposiciones, otro entraba en otra bolsa etc, pero la chica estaba hundida, supongo que por algún momento fantaseó con la idea de ser interina eternamente y el anuncio de que les cesaban le supuso un hostión de realidad. Esto me hizo recordar lo que hablamos tantas veces en Burbuja sobre que la Administración es una Charocracia, hay algo en el trabajo de oficina que les hace mojar ropa interior y una vez acostumbradas no saben vivir una vida nueva fuera de la Administración, se les cae el mundo encima.
 
Una vez pruebas la vida en la administración, no hay vuelta atrás, doy fé. Te das cuenta cuenta de como explotan a la borregada en la privada.
 
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