Y te lo vuelvo a repetir, sudas de los datos porque te da igual. Entre 1984 y 1993 la renta per cápita aumentó un 285%, siguiendo tanto a la inflación como a la burbuja inmobiliaria, que empezó en 1985 y que, salvo en Sevilla o Barcelona, significó que aquellos que podían ahorrar tenían más papeletas para poder comprarse un piso. Ahí están las cifras, entre 2010 y 2022, la rpc (en dólares) apenas ha aumentado un mísero 2%, y en euros no ha logrado alcanzar a la inflación, dando como resultado que somos entre un 10 y un 15% más pobres que hace década y media.
Y por cierto, ¿nos podrías decir si hace 25 o 40 años era lo mismo irse a un barrio humilde que ahora? lo digo por ver si disfrutábais de esa experiencia multicultural enriquecedora que supone pagar 100 o 200mil euros por un piso en medio de paisanos Senegal o Cali, con sus respectivas costumbres.