Qué es el dióxido de azufre: efectos nocivos de las nubes que llegarán a la península desde La Palma
El dióxido de azufre tiene efectos negativos sobre la salud, los ecosistemas y las edificaciones
22.09.2021
La
erupción volcánica de la isla de La Palma ha emitido entre 7.997 y 10.665 toneladas diarias de dióxido de azufre (SO2) a la atmósfera, según los datos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan),
una cantidad de gas que se está desplazando y que llegará a la Península en los próximos días.
Concretamente, en tan solo dos días
la nube de dióxido de azufre podría llegar a la Región de Murcia, afectando a otros territorios de esa zona de nuestro país para, después,
pasar a cubrir todo el territorio español durante la jornada del viernes.
¿Qué es el dióxido de azufre? ¿Es perjudicial para la salud?
El dióxido de azufre (SO2) es un gas que se origina debido a
la combustión de carburantes fósiles que contienen azufre, como el petróleo y los combustibles sólidos, según indican desde el
Ministerio para la tras*ición Ecológica y Reto Demográfico.
Esta combustión es la que
se ha producido en el volcán de La Palma de forma natural por la erupción que se ha producido recientemente y que sigue activa, aunque lo más común respecto a este gas es que se produzca debido a los
procesos industriales a altas temperaturas y de generación eléctrica.
El dióxido de azufre está regulado y tiene una normativa específica, ya que tiene un potencial efecto negativo sobre la salud de las personas y supone, por tanto,
una gran fuente de contaminación para la atmósfera y los ecosistemas.
Aunque según los expertos la nube de dióxido de azufre que llegará a la Península procedente de La Palma no supondrá un riesgo para la salud, cuando este gas se encuentra en proporciones mayores,
sí que supone un gran perjuicio.
"Este contaminante puede producir, incluso a grandes distancias del foco emisor, efectos adversos sobre la salud", explican desde el mencionado ministerio.
Entre estos peligros para la salud se encuentran los siguientes:
- Irritación e inflamación del sistema respiratorio
- Afecciones e insuficiencias pulmonares
- Alteración del metabolismo de las proteínas
- Dolor de cabeza
- Ansiedad
Igualmente, se produce un grave perjuicio
sobre la biodiversidad, los suelos y los ecosistemas acuáticos y forestales, ya que puede ocasionar:
- Daños a la vegetación
- Degradación de la clorofila
- Reducción de la fotosíntesis
- Pérdida de especies
Por otro lado, también afecta negativamente a las edificaciones, ya que el ácido presente en este gas, una vez emitido, reacciona con el vapor de agua y otros elementos de la atmósfera,
produciendo la oxidación y, por tanto, a la formación de ácido sulfúrico.
"Además, también actúa como precursor de la formación de sulfato amónico, lo que incrementa los niveles de PM10 y PM2,5, con graves consecuencias igualmente sobre la salud", añaden.
La erupción volcánica de la isla de La Palma ha emitido entre 7.997 y 10.665 toneladas diarias de dióxido de azufre (SO2) a la atmósfera, según los datos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), una cantidad de gas que se está desplazando y que llegará a la Península en los próximos días.
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