castguer
Madmaxista
La Monarquía española sigue representando a la monacal y reprimida sociedad burguesa conformada en la sociedad franquista. Sociedad burguesa que se sitúa hoy en la superior escala del sistema de poder de la nación y en el papel de representantes en lo político en lo social y también financiero. Con estos mimbres, los reprimidos súbditos desde 1975 habrán de bregar lo suyo en el hipotético caso de que se les ocurra querer liberarse de semejante virtuosos. Leyendo un curioso, claro y expresivo libro de Felipe Trigo se aclaran algunas lagunas sobre el por qué la sociedad española ha derivado en reprimida y cicatera.
Trigo nos habla de la “ la íntima ligazón entre la miseria sensual, la miseria filosófica y la miseria social.” Y dice al respecto que: “La Miseria sensual del país era el resultado, agobiante para todos, de la ideología y de las costumbres de la clase dominante, que no era la aristocracia sino la burguesía. Productora de miseria y torpeza que generaba neurosis en serie, caracterizándose así su vida y costumbres sensuales, envenenando con ellos a todo el país. El triunfo de Franco en la guerra civil española significó la imposición por la fuerza de esas taras y miserias. Es decir, supuso “la alienación completa de la mujer española”. El reinado del dictador, de tiránica imposición de esa jovenlandesal oficial hecha de opresión y explotación y de neurosis represivas producto de la miseria sensual de la clase dominante, no se borrara así como así.
Aquellos preceptos de indumentaria playera que nos ridiculizaron ante el mundo durante años iban unidos a una extensión de la prespitación en todas las ciudades de España que alcanzó proporciones desconocidas hasta entonces. Los mismos jovenlandesalistas -policías y curas estrechamente unidos- que perseguían no ya con sermones o advertencias sino llevando real y físicamente a la comisaría a las parejas de novios que se daban el brazo, toleraban y fomentaban el más desgarrado lenocinio a escala de barrios enteros en todas las ciudades de España. Era si por que había materia prima. Había mucha hambre y poco trabajo, como ahora............
Demos
Trigo nos habla de la “ la íntima ligazón entre la miseria sensual, la miseria filosófica y la miseria social.” Y dice al respecto que: “La Miseria sensual del país era el resultado, agobiante para todos, de la ideología y de las costumbres de la clase dominante, que no era la aristocracia sino la burguesía. Productora de miseria y torpeza que generaba neurosis en serie, caracterizándose así su vida y costumbres sensuales, envenenando con ellos a todo el país. El triunfo de Franco en la guerra civil española significó la imposición por la fuerza de esas taras y miserias. Es decir, supuso “la alienación completa de la mujer española”. El reinado del dictador, de tiránica imposición de esa jovenlandesal oficial hecha de opresión y explotación y de neurosis represivas producto de la miseria sensual de la clase dominante, no se borrara así como así.
Aquellos preceptos de indumentaria playera que nos ridiculizaron ante el mundo durante años iban unidos a una extensión de la prespitación en todas las ciudades de España que alcanzó proporciones desconocidas hasta entonces. Los mismos jovenlandesalistas -policías y curas estrechamente unidos- que perseguían no ya con sermones o advertencias sino llevando real y físicamente a la comisaría a las parejas de novios que se daban el brazo, toleraban y fomentaban el más desgarrado lenocinio a escala de barrios enteros en todas las ciudades de España. Era si por que había materia prima. Había mucha hambre y poco trabajo, como ahora............
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