a los rojelios sus joroba mucho la celebracion de estas cosas
A los carpetas en cambio les chifla celebrar que eran los chicos de los recados del señor marqués y el cura obispo...
---------- Post added 09-dic-2016 at 17:11 ----------
No obstante, convendrá conmigo que "unos yayos pobres pelearon contra otros yayos pobres, desmoralizados y prácticamente harapientos para no conseguir más que la mitad de una ciudad".
Por no entrar muy a fondo en el simil, que no me podría parecer más equivocado, sólo señalar dos detalles:
1.- Los de Empel eran todos voluntarios. Los de Stalingrado, pocos, aunque los había y muy motivados por sus respectivas ideologías.
2.- En Stalingrado al menos uno de los bandos, o los dos dependiendo de sus gustos políticos, estaban dirimiendo su existencia física como pueblo. En Empel lo que se ventilaba eran los derechos dinásticos y prerrogaticas regias de un señor hijo de un belga y una portuguesa, además del dogmatismo católico. O el derecho de autodeterminación de los pueblos, la libertad religiosa y los privilegios de las oligarquías holandesas si le tira más el otro lado.
Pero vamos, que huevonacos y apiolar que te cagas, es algo que lamentablemente no ha faltado nunca en los cuatro confines del globo.
Mi problema con Empel (o Blas de Lezo o Krasny Bor que es la nueva terna del "casi ganamos pero no por la mala suerte" de los del "lo que os pasa es que os puede el auto-repruebo" para masajearse los complejos y olvidarse de las realidades) es que ni me dice nada de utilidad para los españoles de hoy, ni habla de ninguna virtud que realmente crea necesario exaltar o recordar. Numancia, por ejemplo, siempre me ha parecido una gesta mucho más fértil e interesante. O Viriato, aunque fuera portugués. Y las dos son mucho más vigentes, a pesar de haber pasado dosmil años.
Si eso se lo indica a un ciudadano ruso durante el "Día de la Victoria" posiblemente tenga una reacción ciertamente violenta por parte de éste...
¿Y? Fanáticos simples con el sentido crítico permanentemente apagado hay en todas partes... Eso no altera la historia, ni sus circunstancias. Ni que el poder haya siempre tratado de vender envuelto en oropeles la obediencia ciega de la masa necesaria para imponerle sus metas.
Podrían haber aprovechado para escapar. No lo hicieron.
En la mayoría de ejércitos organizados lo de "escapar" está mal visto, y muy penado además. No te engañes. Allí se hizo lo que dijo el maestre de campo. Los demás, de tripas corazón y con los dedos cruzados detrás de la espalda. Eran sabañones y degollina, o directamente degollina, contigo de sujeto paciente.