Opino como muchos foreros en este hilo. Esto ya no tiene remedio, porque no va a ocurrir ningún milagro ni lo esperéis. España está ya sentenciada, porque hemos pasado el punto de no retorno. Pronto será un país latinoamericano más, con la diferencia de que habrá comunidades fiel a la religión del amoras y africanas con sus propias leyes, entre las que sobrevivirán algunos reductos de "guiris" forrados de pasta y palilleros españoles (hijos del cayetanismo más cayetano) convertidos en fortalezas. La inmensísima mayoría de los españoles vivirá entre esta masa latinoamericana y las otras "minorías" tercermundistas alóctonas. Eso sí, los antiguos españoles estarán muy latinoamericanizados cultural y socialmente y sufrirán en sus consecuencias la delincuencia y la decadencia de todos los servicios públicos, que estarán mucho peor que actualmente, llegando a un nivel ínfimo (al estilo yanki), mientras que a los que queden cobrando nómina o tengan un pequeño negocio los van a exprimir a impuestos. No sé cuánto durará este proceso de decadencia demográfica. Quizás 20 ó 30 años, quizás menos, pero está claro que ese es el destino que le espera a España.
Por eso, eso que llaman "hispanismo" me parece otro caballo de Troya para que traguemos con la oleada turística migratoria latinoamericana sin ningún tipo de reacción. Nuestros hermanos del otro lado del Atlántico, dicen estos de Vox, el coronel Baños, el Frente Obrero, el Santiago Armesilla y otros de este tipo. No sé si a estos les paga el CNI, el Yunque o sencillamente que son "orates útiles" que se han creído ese rollo del "hispanismo" y siguen viviendo de las glorias pasadas. No se habla de que los españoles nos vayamos a América, sino de que toda Latinoamérica (lo de Hispanoamérica es ya una entelequia) se venga aquí y abramos las puertas.
Madrid ya no es Madrid y muchas ciudades y pueblos del área metropolitana, parecen Guayaquil, Ciudad Bolívar o Cartagena de Indias. Lo del metro de Madrid es brutal, hay trayectos en los que puedes ser el único español de origen bastante rato y solo ves rostros andinos o caribeños, combinados con algún moreno o algunos que tienen pinta de mirar a La Meca cinco veces al día. Es un panorama muy similar al que ves en zonas de Valencia y Murcia (en esta última con más predominio morube), e incluso pueblos más o menos importantes de Castilla y León o de Castilla la Mancha. Lo de Zaragoza es verdaderamente dantesco. Vamos a superar a Francia por goleada y encima en solo 25 años. De momento, parece que se salva un poco Extremadura y Andalucía, excepto Málaga donde se ven bastantes cabezas femeninas con velo y chilabas y mucho tío pelopisha y con cara de mala ostra (mena y no mena) que solo puede venir del Rif o del Atlas, y Almería (donde hay abundantes elementos procedentes de todos los basureros del orbe. Ese es el "milagro almeriense" para que los cuatro ceporros de siempre se haya forrado. Lo siento por las buenas gentes de Almería que tienen que soportar esta lacra). De Galicia y la franja cantábrica no hablo, aunque hace tiempo que no voy por esas zonas, al igual que el País Vasco y Cataluña, aunque parece que allí ya se ha salido este tema completamente de progenitora.
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