No es un problema del mesetario, es un problema de la falta de sentido estético del español.
No es un problema de falta de arboles, un desierto o una tierra completamente yerma puede impresionar por lo que es, el problema es cuando la humanización del territorio empeora el territorio y crea disarmonías.
Abortos arquitectónicos, casas con estilos variopintos, verjas hechas con somieres de camas, chabolas de trastos a los lados de la carretera, ambientes desangelados y demás crímenes contra la estética yo los he visto en todos los rincones de España. Es que incluso en zonas con dinero, ves que lo mismo hay un palacete bonito y al lado la mansión racionalista del nuevo rico pretencioso que te joroba el conjunto del paisaje.
La falta de sentido estético no solo se predica del paisajismo, sino que se da en todos los ámbitos de la vida del español. Desde la uniformidad de los cuerpos de seguridad, hasta en el despacho del presidente del gobierno.
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