Kalevala
Madmaxista
Todo en su justa medida.
Aqui se dice mucho que una leche a tiempo quita muchas tonterías y previene de males mayores.
Antiguamente a los niños se les daba verdaderas palizas si se portaban mal. Y a veces de manera preventiva. Tengo un primo que cada vez que le llamaba su padre se ponía a temblar porque solía ser para pegarle con el cinturon (hablo de hace 50 años). Nunca lo hizo en público, eso si. Pero le decia: “luego hablamos” y se quedaba quietecito en un rincón.
Por supuesto, una colleja no es lo mismo que un varios azotes con una correa o directamente abrazos.
De la misma manera, drojar al niño con el móvil o la tablet cada vez que la pida, es demasiado.
Pero dejárselo un ratito de vez en cuando puede ser un descanso para ambos padres y niños.
Y en circunstancias especiales: hay visita en casa, vas a un restaurante, tienes una llamada o reunión on line importante, etc, puede ser una herramienta huevonuda.
Y en el parque o en la calle que corra y salte, sin móvil ni tablet.
Aqui se dice mucho que una leche a tiempo quita muchas tonterías y previene de males mayores.
Antiguamente a los niños se les daba verdaderas palizas si se portaban mal. Y a veces de manera preventiva. Tengo un primo que cada vez que le llamaba su padre se ponía a temblar porque solía ser para pegarle con el cinturon (hablo de hace 50 años). Nunca lo hizo en público, eso si. Pero le decia: “luego hablamos” y se quedaba quietecito en un rincón.
Por supuesto, una colleja no es lo mismo que un varios azotes con una correa o directamente abrazos.
De la misma manera, drojar al niño con el móvil o la tablet cada vez que la pida, es demasiado.
Pero dejárselo un ratito de vez en cuando puede ser un descanso para ambos padres y niños.
Y en circunstancias especiales: hay visita en casa, vas a un restaurante, tienes una llamada o reunión on line importante, etc, puede ser una herramienta huevonuda.
Y en el parque o en la calle que corra y salte, sin móvil ni tablet.