Menuda panda de viejos cascarrabias.
Es gente joven de fuera de Madrid que prefiere pagar más pero a cambio tener unos servicios y gente de su cuerda alrededor para lo que ha venido a hacer.
Exactamente igual que las residencias de estudiantes en la ciudad universitaria, llenas de estudiantes pijos de provincias que pagan mucho más que en un piso compartido pero les dan servicios.
Lo peor de esa idea es el nombre coliving, que lo convierte en odioso, pero la idea es muy buena y por eso funciona y por eso lo pagan, no por ser modernos sino por tener amigos, compañeros, entorno, servicios.
Pobres estos precisamente no son ninguno, sus padres son farmacéuticos y médicos de provincias. Y puesto que tener novia y vivir con ella o casarse se ha puesto imposible, prefieren esto a estar solos pagando mucho más por un zulo. Hasta los 30 aún son jóvenes hoy en día, qué remedio les queda si no pueden casarse y tener hijos como desearían la mayoría.