¿De donde cosa sacan que amadeo de saboya era un rey impopular?

Fue impopular porque tenia a todos los rojazos y ñarigudos tratando de echarlo a ostras para montar la republiqueta antiespañola. No porque la gente no lo quisiera ni dejara de querer, ya que la gente no se enteraba de una cosa igual que ahora. Lo que importaban eran los politicastros, los lobis, y los hijos de la gran fruta juntaletras. Todos ellos al unisono boicoteando su reinado para que nada funcionara ni avanzara y acabaran echandolo por hartazgo, que es justo lo que ocurrio, y lo que el mismo explica en su carta

No se si hubiera sido buen rey o no porque no tuvo tiempo de demostrar nada. Pero era sin duda un buen hombre
 
Cuentan que en uno de los desquites decla corte, su señora , de rarisimo apellido, de la Poza , se dedicó a pasear las PVTAS mas BIEGAS y sarnosas de todo Madrid en rica casela por todo el jardín ante las damas nobiliarias.
 
España tenía remedio, pero hubiera implicado que Espartero ora hubiera aceptado la corona de España, ora hubiera ocupado una regencia hasta la mayoría de edad de Alfonso XII.
Espartero no era un hombre de paz.
Los catalanes no lo hubieran aceptado nunca.
 
Amadeo no fue masón aunque seguramente muchos de sus detractores a izquierda y derecha y también de sus partidarios lo eran.

Los republicanos eran masonazos todos:


En aquella época excepto los carlistas y algún integrista partidario de Isabel II el resto todos eran susceptibles de ser masones.

Claro que no y Prim tampoco.

Además se llamaba AMEDEO

MI MONO AMEDEO Y YO.......

 
Espartero no era un hombre de paz.
Los catalanes no lo hubieran aceptado nunca.

Precisamente su apodo era "El Pacificador".

Estatua_de_Espartero_%28Madrid%29_8.jpg


Si a "los catalanes" (fueran quienes fueran esos "catalanes" a los que te refieres) no les gustaba, él se hubiera encargado de Pacificarlos.
 
Pues eso, que pacíficaba a cañonazos...

Que va, que va. Lo que hacía cuando veía una bulla era acercarse y gritar: "eh, eeeh, eeeeeh". Y así pacificaba.

A veces también se pintaba las manos de blanco y las levantaba diciendo: "bas-ta yaa, bas-ta yaaa".

Pues claro que pacificaba a cañonazos.

Contra él no hubiera habido huevones de montar la revuelta cantonal.
 
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