1941-2017: tantos muertos en la España que se moría de hambre como ahora
- El número de defunciones registradas en España el año pasado fue el más elevado desde 1941, poco después de terminar la Guerra Civil.
En ese año, el primero del que se tienen datos oficiales, se registraron un total de 487.703 defunciones en territorio español. Es una cifra enterrada en el pasado, comprensible debido a las circunstancias de penuria y pobreza, pero que, pese al asombro que pueda causar, no se aleja demasiado del balance de 2017: los datos del Instituto Nacional de Estadística publicados esta semana recogen que
el año pasado fallecieron 423.643 personas residentes en España, la cifra más alta desde aquel fatídico 1941,
La hambruna y la miseria golpeaban de forma despiadada a un altísimo porcentaje de la población, especialmente a los presos hacinados en las cárceles franquistas, los perdedores de la guerra, tanto militares como civiles.
En el año 1941, la represión derivó en las cárceles a lo que algunos historiadores califican de “cuasi experimento de exterminio”. Una dieta hipocalórica —caldo de nabos podridos y similares— suministrada por la Dirección General de Prisiones provocó una catástrofe de hambre que mató al 15% de la población penal. En algunas capitales de provincia como Córdoba se registraron durante la posguerra más muertos dentro de la prisión que en los paredones: hubo 584 fusilados por 756 fallecidos en la prisión provincial (de 3.500 reclusos), la mayoría de ellos (502) muertos en 1941.