Comprar un buen producto electrónico o eléctrico en Europa, y más concretamente en España, es prácticamente imposible. Prácticamente todo lo que se vende en España es sarama china, además, de la peor calidad.
Tengo una máquina de cortar pelo de Philips que compré en El Corte Inglés en 2014 y, cómo no, se rompió al cabo de un año. Hecha en Asia. Se puede utilizar, pero teniendo mucha paciencia (la batería se murió y sólo funciona 20 segundos esperando de 2 a 5 minutos; si la cargo más de 5 minutos, tengo que repetir el proceso).
A ver cuando nos hacemos a la idea de que ya no se fabrican productos electrónicos (componentes) en Europa, esto es así desde hace ya muchísimos años. Hasta a Japón, Korea y Taiwán les ha usurpado gran parte del mercado China.
Jata es una empresa muy antigua que comenzó fabricando planchas (de planchar la ropa) si no recuerdo mal. Evidentemente, en sus orígenes fabricaba en España (todavía gobernaba Franco), pero a medida que sus productos se fueron haciendo más sofisticados (incluyendo electrónica) y el mercado se abrió, lógicamente externalizó parte de su producción. Todas las fábricas de electrodomésticos y electrónica de consumo de origen español lo tuvieron que hacer, y las demás desaparecieron. Si hasta Philips, de origen holandés, fabrica actualmente en China, en Holanda solo tiene oficinas y almacenes.
También hay que decir que en China se puede fabricar con muy buenos niveles de calidad, pero con malos también. Todo depende del nivel de calidad que le exija la marca al fabricante chino. Un equipo Philips fabricado en China puede tener una calidad equivalente a cuando Philips fabricaba en Europa, y lo mismo se puede decir de Sony cuando fabricaba en Japón (actualmente también lo hace en China). Si el fabricante lo exige, puede obtener calidad de China.
Otra cosa es el tema de las carcasas de los equipos, éstas se han vuelto todas muy plasticosas en todas las marcas, prescindiendo de tornillos y chasis metálicos, disminuyendo en general bastante la robustez con respecto a los equipos fabricados hace 40-50 años (recordaréis aquellos televisores con la caja de madera y que al abrirlos tenían todo un bastidor metálico donde de ensamblaban las placas electrónicas y que pesaban un huevo). Esa forma de fabricar ya no volverá.
Por último, decir que yo en casa generalmente nunca utilizo los aparatos alimentados con su batería (salvo el móvil), sino enchufados a la red eléctrica. repruebo las baterías y el tener que estar pendiente continuamente de su nivel de carga y de su rendimiento. Yo me afeito con la maquinilla enchufada al enchufe que tengo junto al espejo y paso de la batería. El afeitado lleva poco tiempo y el consumo es casi el mismo que si tienes que recargar una batería que luego no te va a rendir bien. Y de hecho, ahora que lo pienso, nunca tuve una maquinilla de afeitar con batería recargable cuya batería diese un buen rendimiento.