AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH!!!!
✟ Católico converso ✟
- Desde
- 1 Mar 2021
- Mensajes
- 12.439
- Reputación
- 15.675
Propaganda elecciones municipales 1991:
Unas semanas después, resultados:
Marbella - 27 MAY 1991 - 00:00 CEST
La sorpresa electoral en Andalucía saltó en la capital de la Costa del Sol. El candidato del Grupo Independiente Liberal (GIL) y presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, ha logrado la mayoría absoluta en la alcaldía marbellí superando al PSOE y barriendo del mapa político municipal a Izquierda Unida y al Partido Popular. Ambos grupos se quedan sin representación municipal. Gil ha logrado la mayoría absoluta con 19 concejales, por cuatro del PSOE y dos de la candidatura de los Independentistas.
Declaraciones de habitantes de Marbella décadas después:
"Mire usted, Gil fue lo mejor que nos podía haber pasado. Marbella estaba completamente hundida a finales de los años 80, por una gestión nefasta del equipo anterior, un alcalde socialista seguramente honrado pero desastroso. Gil veía amenazados los intereses de sus negocios y entendió que la ciudad necesitaba un cambio, positivo para sus propios temas".
"Cada 500 metros había una cortesana que ofrecía sus servicios públicamente en pleno día. La gente de las tiendas las tenía cerradas con llave con ellos dentro, para que no les asaltaran. Ese final de los 80 fue en Marbella como en Chicago en sus peores años".
"Lo que hacía Gil sería inimaginable en un político actual. Por ejemplo, había una casa ruinosa a la entrada de Marbella ocupada por la viuda de un alcalde anterior. Ella pleiteaba para no irse y la casa estorbaba. Gil fue a verla y algo pasó que a las tres de la mañana ya se estaban demoliendo el edifico. Algo tuvo que darle, sin duda. Y además, él se saltaba los permisos, las normas, los trámites y las leyes ordenanzas. Siempre se dijo que tenía a unos cuantos jueces pillados".
"Cuando repartió las casas que había prometido a gente trabajadora y necesitada, Gil estaba allí, sentado en una mesa repartiendo las llaves: "Jesús, que he nacido aquí y necesito una casa aunque no esté apuntada en la lista", le decía una señora acercándose a la mesa. Y Gil ordenaba: "Julián, toma nota y dale una llave".
"El yerno del embajador norteamericano Lodge organizó un almuerzo en su honor, en su estupenda casa de Marbella, con gente muy importante que quería conocer al exitoso alcalde. Gil se retrasó tres cuartos de hora, todo el mundo le estaba esperando, bien vestidos, de sport pero elegantes. Cuando apareció, iba en bañador y chanclas. Y así se sentó en la mesa. Pero cuando empezó a hablar, aunque era vulgar y decía unas palabrotas tremendas, les convenció del bien de sus proyectos. Era muy primitivo y muy listo. Tenía carisma y personalidad. No hay duda".
"Marbella estaba fatal, había muchas pilinguis, todo muy sucio. Y él hizo limpieza de todo y se lo agradecimos mucho. Tenía simpatía y algo que atraía a la gente. Pero demasiado poder le desbordó y desde Madrid dijeron basta".
Unas semanas después, resultados:
Marbella - 27 MAY 1991 - 00:00 CEST
La sorpresa electoral en Andalucía saltó en la capital de la Costa del Sol. El candidato del Grupo Independiente Liberal (GIL) y presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, ha logrado la mayoría absoluta en la alcaldía marbellí superando al PSOE y barriendo del mapa político municipal a Izquierda Unida y al Partido Popular. Ambos grupos se quedan sin representación municipal. Gil ha logrado la mayoría absoluta con 19 concejales, por cuatro del PSOE y dos de la candidatura de los Independentistas.
Declaraciones de habitantes de Marbella décadas después:
"Mire usted, Gil fue lo mejor que nos podía haber pasado. Marbella estaba completamente hundida a finales de los años 80, por una gestión nefasta del equipo anterior, un alcalde socialista seguramente honrado pero desastroso. Gil veía amenazados los intereses de sus negocios y entendió que la ciudad necesitaba un cambio, positivo para sus propios temas".
"Cada 500 metros había una cortesana que ofrecía sus servicios públicamente en pleno día. La gente de las tiendas las tenía cerradas con llave con ellos dentro, para que no les asaltaran. Ese final de los 80 fue en Marbella como en Chicago en sus peores años".
"Lo que hacía Gil sería inimaginable en un político actual. Por ejemplo, había una casa ruinosa a la entrada de Marbella ocupada por la viuda de un alcalde anterior. Ella pleiteaba para no irse y la casa estorbaba. Gil fue a verla y algo pasó que a las tres de la mañana ya se estaban demoliendo el edifico. Algo tuvo que darle, sin duda. Y además, él se saltaba los permisos, las normas, los trámites y las leyes ordenanzas. Siempre se dijo que tenía a unos cuantos jueces pillados".
"Cuando repartió las casas que había prometido a gente trabajadora y necesitada, Gil estaba allí, sentado en una mesa repartiendo las llaves: "Jesús, que he nacido aquí y necesito una casa aunque no esté apuntada en la lista", le decía una señora acercándose a la mesa. Y Gil ordenaba: "Julián, toma nota y dale una llave".
"El yerno del embajador norteamericano Lodge organizó un almuerzo en su honor, en su estupenda casa de Marbella, con gente muy importante que quería conocer al exitoso alcalde. Gil se retrasó tres cuartos de hora, todo el mundo le estaba esperando, bien vestidos, de sport pero elegantes. Cuando apareció, iba en bañador y chanclas. Y así se sentó en la mesa. Pero cuando empezó a hablar, aunque era vulgar y decía unas palabrotas tremendas, les convenció del bien de sus proyectos. Era muy primitivo y muy listo. Tenía carisma y personalidad. No hay duda".
"Marbella estaba fatal, había muchas pilinguis, todo muy sucio. Y él hizo limpieza de todo y se lo agradecimos mucho. Tenía simpatía y algo que atraía a la gente. Pero demasiado poder le desbordó y desde Madrid dijeron basta".