Lo curioso es que durante el partido y el postpartido, todos los eventos estaban siguiendo la misma pauta que ya se habían repetido en otros partidos a lo largo del año.
El var le muestra al árbitro unas imágenes manipuladas que derivan en la expulsión de Vinicius pero que dejan sin sanción a los jugadores del Valencia.
El árbitro contrariamente a lo que le dijo a Ancelotti durante el partido, no reflejo en el acta ni los gritos de mono ni la aplicación del protocolo antiviolencia.
Los periodistas en rueda de prensa prácticamente le hicieron una encerrona a Ancelotti intentando dar la vuelta a toda la movida tratándolo de petulante manipulador y exigiendo tanto al mismo entrenador como al jugador pedir disculpas a la afición del Valencia.
Pero claro, nadie tenía ni idea de la tormenta de cosa que se estaba montando fuera de España y del tsunami que se les venía encima.
Lula desde el g7, la Fifa con Infantino y Ferdinand arrastrando detrás a un montón de jugadores poniendo el grito en el cielo y de repente que pasa?
Resulta que el acta arbitral no era el bueno, que hubo un error informático y que si hubo insultos racistas.
Los arbitros del var a la fruta calle.
La vergonzosa portada del Marca que dan ardor de estomago.
Los ultras del Athletico detenidos y paseados por las redes para que todos los vean.
Comunicado de Mediapro diciendo que yo entrego todas las imágenes en bruto y es el var el que decide que mostrar y que no.
Todo esto no habría pasado si no es por el escándalo internacional, simplemente habría sido una semana más en la liga putrefacta.
Y tiempo al tiempo, Tebas, Rubiales y el Chiringuito van a ser los siguientes en caer y la liga que viene tengo la sensación que vamos a ver muchos campos clausurados a lo largo de toda la temporada.
