Teuro
Será en Octubre
- Desde
- 26 Ago 2006
- Mensajes
- 28.804
- Reputación
- 65.873
Como en Rusia tienen petróleo y gas, allí no hay epidemia. A esta segunda ola han dicho que no. pilinguin fue muy criticado en Rusia por aceptar la primera. Tampoco en Bielorrusia ni en ningún país fuera de la órbita en la que nosotros estamos.
No pueden robar en Rusia y China, así que nos atracan a nosotros. Empiezan por los más débiles y acabarán comiéndose a sí mismos. El capital financiero tiene que seguir engordando, y si no producimos lo suficiente, se depreda lo que vaya quedando.
Antonio Turiel:
De lo que va esto es de tras*ición energética. De lo que va esto es de la adaptación económica para hacer sobrevivir el actual sistema industrial y social en una situación en la que la energía no va a ser abundante.
Un año antes de la llegada de la el bichito la Agencia Internacional de la Energía nos avisaba de que antes de 2025 tendríamos graves problemas con el acceso a la principal fuente energética del mundo, el petróleo.
¿La razón de este descenso anunciado de la producción de petróleo? La fuerte desinversión de las compañías petroleras desde 2014. ¿Dejaban de invertir las petroleras por compromisos en la lucha contra el cambio climático? No; dejaban de hacerlo porque se estaban arruinando buscando más petróleo, porque no queda petróleo rentable.
La llegada de la el bichito ha acelerado lo inevitable: el fracking se ha ido definitivamente al garete, y en el último informe anual la AIE nos enseñaba cuatro posibles escenarios para la producción de petróleo en función de cuánto dinero se invirtiese en nueva producción. ¿Adivinan cuál de los cuatro estamos siguiendo? Efectivamente: el peor, el que anticipa un caída de la producción de petróleo de hasta el 50% solo de aquí a 2025, si los Gobiernos no reaccionan para impedirlo (cosa que probablemente harán).
La partida está acabando y estamos llegando a las últimas bazas. En septiembre de 2020 BP reconocía que la producción de petróleo ya no volverá a remontar, aunque lo disfrazaba de un fantasmagórico "pico de demanda", es decir, que la gente querría consumir menos petróleo porque sí. Poco después, Exxon se veía obligada a moderar sus optimistas previsiones sobre la producción futura. Hace unos días, Shell reconocía que su producción ha llegado a su máximo y que a partir de ahora solo decrecerá. Y hace una semana, Total avisaba que, debido a la desinversión petrolera, en 2025 faltará al menos el 10% de la demanda. Las grandes petroleras lo saben y ya lo van anunciando, aunque lo disfracen más o menos convenientemente.
Esto se acaba. Peor, esto se acelera: el precio del petróleo no para de subir y el pico de precios que esperábamos para finales de 2021 o principios de 2022 podría adelantarse unos cuantos meses.
A ambos lados del Atlántico, tanto a los EE.UU. como en Europa, se están lanzando ambiciosos programas de financiación pública de la actividad. Se pone un especial acento e interés en la tras*ición energética. Hay prisa. Los problemas se nos están tirando encima.
Sabíamos que esto iba a pasar por lo menos desde 1970. Teníamos 50 años por delante y no hicimos nada. Nos volvieron a avisar en 1998. Teníamos 20 años por delante y no hicimos nada. En 2008 recibimos el primer susto, y cualquiera que estuviera atento habría percibido la importancia de la escasez de petróleo en la grave crisis económica que se desencadenó. Pero teníamos más de 10 años por delante, y no hicimos nada. Ahora ya está. Ya nos está explotando en las narices. Y ahora queremos una solución, basada en renovables a tutiplén y quimérico hidrógeno verde; y los mil problemas que la escasez de petróleo va a generar, queremos solucionarlos en unos pocos años, mejor incluso si son meses. Y siguiendo la lógica del economista, si pongo el doble de millones reduciré el tiempo de desarrollo a la mitad.
En ésas estamos. Los responsables públicos pidiéndonos milagros, y los científicos gestionando el legado de Santa Bárbara; ya saben, aquélla de la que nos acordamos solo en determinadas situaciones.
Salu2.
AMT
El legado de Santa Bárbara
Teletrabajo y fin del consumo recreativo del petróleo, así hasta que el coche eléctrico esté maduro para mediados de la década del 2030. Todos ganan: petroleras viendo como en el canto del cisne de su negocio cada vez ganarán más por la revalorización del petróleo, el gobierno con impuestos, los fabricantes de coches cambiando el parque automovilístico, las eléctricas instalando campos de renovables, etc. El fin del petróleo no será el declive de la civilización, sino que lo vas a pagar de tu bolsillo. ¿Acaso alguien creía que iba a ser de otra forma?