Creo que es un error juzgar éticamente bajo tu prisma personal cuando hablamos de algo relacionado con la justicia.
Porque acostumbrarnos a hacer eso incita a la gente a considerar o no culpable a la persona que se le acusa simplemente por compartir ideas o gustos. De hecho, gran parte de la manipulación brutal mediática y política que se hizo con la manada se basó en que los padres proyectasen la imagen de su niñita teniendo sesso guarro con varios tíos. Y como no querían tener esa imagen en su cabeza, ni considerar que eso pudiera suceder, como consecuencia lógica y por proyección, tenía que haber sido violación.
Tener sesso consentido entre mayores de edad no es delito, independientemente de lo que nos parezca a los demás. En casos como este, es el único punto de partida. Porque si no, rápidamente en vez de ir a lo importante y central (si es delito o no...), nos desviamos por ética personal.
Que es como se consigue tantísimo apoyo popular....
A ver, que quien se quiera pegar una bacanal, que se pegue una bacanal; yo también me he pegado mis buenas fiestas, pero siempre con seguridad, usando preservativo; son cosas que a estas alturas, no deberíamos explicar... si nos lavamos las manos antes de comer, y usamos cubiertos y servilleta, por algo será.
Además, he expuesto el caso de la novela de "La vida privada de Melissa P.", y también podría poner "50 Sombras de Grey", para exponer que para muchas mujeres, la fantasía sensual de tener sesso en grupo. y sesso duro y zafio, es algo normal, he dicho que a mi particularmente no me gusta, pero no he dicho en ningún momento que mi gusto personal, mas allá del tema de la seguridad e higiene, sea ningún tipo de "faro jovenlandesal"..... pero coincidirás conmigo en que los incrementos de enfermedades de tras*misión sensual, embarazos no deseados y consecuentemente abortos, es un drama, que con un poco de precuacion al tener una relación sensual, se podrían perfectamente evitar.
Si quieres tener un estilo de vida promiscuo, como el que yo he vivido, te guste o no, este es el precio que tienes que pagar, el limpiarte las partes antes y después, y el ponerte el preservativo a la hora de ir a amar.