Voy a contar una historía ... Mi hermana se graduo en derecho con más matrículas de honor que sobresalientes y un sólo notable como nota más baja en toda la carrera (menudo disgusto se llevo) ... Después de diez años de trabajo en un despacho con sueldo bastante perversos se muere uno de los propietarios (un Opusino muy conocido del regimen de Franco) y el que queda (no tan conocido) decide llenar el despacho que funcionaba bastante bien con niños pijos de universidad privada y católica de las de verdad y de las que pobres no pueden pagar (para que quede claro que no es el CEU)...
En tres meses, sin enchufe lo juro, saca la oposiciones del grupo 1 para un ayuntamiento (debían necesitar un abogado bueno por pura casualidad y el CV de mi hermana era brutal con publicaciones, sentencias elogiadas en tribunales superiores y mas..). Es final de legislatura y el partido de la oposición ha recurrido en los tribunales el plan urbanismo recientemente aprobado. Mi hermana defiende al ayuntamiento y gana el caso pero al año siguiente el partido que estaba pierde las elecciones ... Mi hermana acaba literalmente en el sotano del ayuntamiento, sin trabajo, sin funciones y casí sin sitio donde ir a "trabajar". Se le da lo justo para que no se pueda alegar o denunciar mobbing y por supuesto temas sin importancia.
Fin del cuento. No hay final feliz. Lo último que me contó mi hermana del ayuntamiento en cuestión es que todos los técnicos han agotado sus vacaciones de verano para no tener que firmar y dar el visto bueno a unos cuantos latrocinios que había que cerrar antes de Mayo y no tener que verse implicado porque con las prisas estas cosas las hacen peor y se preocupan menos de darle visos de legalidad ...
Con esto quiero decir dos cosas. No voy a decir que se necesiten más funcionarios pero si voy a decir que se necesita dotarles de más autoridad y seguridad. No debe ser posible que en el caso de los ERE se hagan tropecientos informes de irregularidades y eso se quede sin investigar sin una consejería dominada por un consejero y sus secuaces decide no hacer nada. Lo otro que quiero decir es que me ha gustado el artículo, sobre todo la parte final. El coste directo del funcionamiento tipo mafia en los ayuntamiento ya es de por si considerable pero el coste de oportunidad es superior. Efectivamente, todo aquel que quiera prosperar en un nivel local o pasa por el aro o se joroba de por vida porque aunque vaya a otro ayuntamiento allí pasará lo mismo ... El político decide en que se gasta el dinero pero debe ser el funcionario el que decida donde va el dinero al final. Es lo que se llama romper la relación entre el poder económico y el político para que pueda haber POLITICA y no lo que hay ahora.