A los políticos europeos les han chutado las famosas "banderillas" coronavíricas. Si de verdad esas banderillas tienen nanotecnología controlable por vía inalámbrica, entonces los políticos europeos están en las manos de los poderes angloamericanos: pueden hacer que enfermen y mueran a discreción.
No sólo tienen todas las contraseñas y los datos que maneja la élite europea por el internet que, no olvidemos, se controla desde EEUU que tiene su proyecto Echelon para espiar todo lo espiable por las redes. También tienen nanochips en el interior de las personas claves de la política en Europa.