Apolodoro
Cincinnātus requīritur
Como alternativa a ponderar el voto creo que podríamos optar porque todo ciudadano tenga unos conocimientos de economía y política mejores que los actuales, pero por lo que se ve en los contenidos de la ESO, tal cosa no parece interesar.
Lo ideal es que una buena educación cree ciudadanos ilustrados, o al menos, lo suficiente como para discernir entre un populista y un eficiente gestor. Es su futuro el que está en juego, cosa que no se puede dejar en manos de incompetentes. Pero hoy en día el sistema educativo español dista de ser perfecto.
Otra cosa muy recomendable, sería que se exigiesen ciertos mínimos académicos y profesionales para ejercer cargos como ministro o presidente del gobierno, tal que cualquier mindundi con labia no pudiese infiltrarse en tales puestos.
Una pueblo educado evitaría el ascenso de pedestres lenguaraces.