Tremenda pelea he presenciado entre una amaperros muuuuy Charo. La tía iba con tres perros nada menos, que iba muy chula con su Toby y los dos chuchos más, hasta que le ha tocado los huevones a una etniana.
Los chuchos de la Charo se han puesto a miccionar en la esquina del edificio donde viven los etnianos, eso es al parecer lo que he entendido, éstos viven ahí y están hartos de los perros, y la etniana ha salido como una loca (y la puedo entender) a enzarzarse con la Charo, hasta que la etniana la ha soltado dos sopapos tirándola al suelo. Las peleas de mujeres son muy divertidas.
Un rato más tarde aparece el marido de la etniana y se ha liado, porque el etniano decía que porque era una mujer, si no la amaba de palos, pero decía "yo no, pero mi mujer te va a dar una paliza que te va a apiolar". Con un puñetero palo en la mano este tío. El etniano decía "me acuerdo de vuestra fruta raza con la cosa de los perros".
Ha tenido que venir la policía para solventar el conflicto. Ocho agentes nada menos.
La cosa está muy caldeada ya con los perros. Ya hay gente paseando tres chuchos a la vez, ocupando aceras enteras, hablándoles como si fueran bebés, y diles algo que reaccionan como energúmenos.
Otros ladran hasta las mil por la noche, llenan la ciudad de meados y de cosa.
Hoy cuando a esa fruta Charo la han tumbado al suelo de una leche, me he sentido hasta en paz, aunque haya sido una etniana la que lo haya hecho.
Basta ya con los puñeteros perros.