Alfonso Guerra admite darse cuenta que el PSOE está dirigido autoritariamente por Pedro Sánchez y que el país está en peligro.
Alfonso Guerra ha criticado la "tendencia al cesarismo evidente" en el PSOE al ser el secretario general quien elige a las personas que componen la dirección del partido o las que conforman las listas para los congresos.
Cuando se renovó la dirección del partido, el líder dijo: «Esto es el nuevo PSOE». Y yo dije: «No, es otro PSOE».
Yo creo que aquí ha habido dos presidentes importantes de verdad, Adolfo Suárez y Felipe González. Sobre los demás, mejor no entrar en detalles.
No se puede entender que Nicolás Redondo Terreros haya sido expulsado del PSOE por discrepar de Sánchez.
En democracia el delito de opinión no existe.
La amnistía no está en la Constitución porque no se quiso que estuviera. ¡Cómo vamos a amnistiar a quien está diciendo que lo va a hacer otra vez!.
El derecho de opinar y el derecho de manifestarse son derechos constitucionales que nadie puede negar.
Sobre las lenguas cooficiales en el Parlamento: ¿A qué viene eso de ponerse el pinganillo para escuchar cuando todos ellos se entienden perfectamente? Además, cuando salgan al pasillo seguirán hablando en castellano. A mí me parece ridículo. Es todo teatro.
Si logran la amnistía después vendrá la independencia, hay que ser conscientes de que si el nacionalismo catalán lograra, hipótesis que yo en principio no contemplo, separar Cataluña de España ¿cuánto tardaríamos en que pasase lo mismo en el País Vasco? ¿Y en Baleares? ¿Y en Valencia? ¿Y en Canarias? ¡En Canarias su presidente ha dicho que le gusta lo del Estado Libre Asociado del Plan Ibarretxe!
El 6% del Congreso (independentistas y vascos) manda hoy más que el 94%. Esa es la verdad. Y yo no sé cómo llamar a ese sistema. Un sistema en el que el 6% manda sobre el 94%, que cada uno le ponga el nombre que quiera, pero el nombre nunca será bonito.
Se han sustituido las grandes pasiones, los grandes principios, por la identidad de sesso, de territorio, de cultura. Y eso fragmenta mucho la sociedad. Cada uno tiene derecho a cultivar su propia identidad, pero los que gobiernan tienen que tener un discurso globalizador dirigido a toda la población.
Los partidos tienen secretarías de igualdad, pero sólo se dedican a la igualdad entre un hombre y una mujer. Todo lo demás se ha ido abandonando y entonces penetran las malas hierbas.
Alfonso Guerra es una de las voces más respetadas de la política española, por eso cualquier frase suya siempre es examinada con lupa y, si es una
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