Lampedusa y otros 574
Madmaxista
- Desde
- 19 Ago 2008
- Mensajes
- 2.658
- Reputación
- 5.368
Son alemanes. Son muy buenos organizando un plan y ejecutándolo. Pero la improvisación no es lo suyo. Son lentos. Y tardan en actuar individualmente sin que los guíen.
Les fue bien en el plan Amarillo (Fall Gelb), en que las unidades acorazadas alemanas avanzaron por sorpresa en las Ardenas y a lo largo del valle del Somme, aislando y cercando a las unidades aliadas que habían avanzado hasta Bélgica para hacer frente a la oleada turística esperada por ese territorio. Las fuerzas británicas, belgas y francesas fueron empujadas hacia el mar por la bien organizada operación alemana.
En cambio, en Stalingrado, bombardearon la ciudad hasta reducirla a escombros antes de intentar ocuparla. Los rusos empezaron los combates callejeros casa por casa, como más de un siglo antes habían hecho los zaragozanos ante las tropas de Napoleón. Eso no estaba en el guion y le llamaron la Rattenkrieg, quizás en un intento de camuflar su inoperancia con un insulto, tal como el niño que al perder en el juego grita "¡Así no vale, tramposo!". Para ellos, que no se respetara su guion era hacer una guerra injusta, de ratas. La Wehrmacht se mostró impotente ante la inesperada resistencia. El ejército ruso, inesperadamente también, destrozó más aún los planes arrollando los flancos del ejército de Von Paulus y cercándolo por completo. En el caos, las autoridades fueron incapaces de organizar sobre la marcha el suministro de armas y municiones. Von Paulus, afortunadamente para los supervivientes fue capaz, él sí, de improvisar una rendición que les salvó de la aniquilación total a costa del cautiverio.
Les fue bien en el plan Amarillo (Fall Gelb), en que las unidades acorazadas alemanas avanzaron por sorpresa en las Ardenas y a lo largo del valle del Somme, aislando y cercando a las unidades aliadas que habían avanzado hasta Bélgica para hacer frente a la oleada turística esperada por ese territorio. Las fuerzas británicas, belgas y francesas fueron empujadas hacia el mar por la bien organizada operación alemana.
En cambio, en Stalingrado, bombardearon la ciudad hasta reducirla a escombros antes de intentar ocuparla. Los rusos empezaron los combates callejeros casa por casa, como más de un siglo antes habían hecho los zaragozanos ante las tropas de Napoleón. Eso no estaba en el guion y le llamaron la Rattenkrieg, quizás en un intento de camuflar su inoperancia con un insulto, tal como el niño que al perder en el juego grita "¡Así no vale, tramposo!". Para ellos, que no se respetara su guion era hacer una guerra injusta, de ratas. La Wehrmacht se mostró impotente ante la inesperada resistencia. El ejército ruso, inesperadamente también, destrozó más aún los planes arrollando los flancos del ejército de Von Paulus y cercándolo por completo. En el caos, las autoridades fueron incapaces de organizar sobre la marcha el suministro de armas y municiones. Von Paulus, afortunadamente para los supervivientes fue capaz, él sí, de improvisar una rendición que les salvó de la aniquilación total a costa del cautiverio.
Última edición: