M. Priede
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Y Brasil:
Esto último de Brasil recuerda la deuda de la reunificación alemana que nos endosaron, con el visto bueno de los patriotas del PP, gente de bien y de buena familia, más el mamarrachuelo masón y su corte que vino después.
Interesante escrito, como siempre, de Julio C. González:
Actos de guerra británicos para separar a Hispanoamérica | Hispanoamérica Unida
"A su vez con el Tratado del 2 de febrero de 1825, que en cuatro meses se impone a Chile, Perú, Gran Colombia (Colombia y Venezuela), a Guatemala y a México, el tras*porte naval con Hispanoamérica y los mercados de América del Sur (Brasil inclusive) quedan reservados a Gran Bretaña, con exclusión de toda otra potencia. [La cosa liberal anglómana-hispanistaní nos hablará de Su Graciosa Majestad como adalid del libre mercado] A Francia se le impone una prolongada ocupación de sus fronteras y el pago de una indemnización de setecientos millones (Historama, 1965:176)."
"Lord Thomas A. Cochrane
(Viajes de Cochrane en toda la extensión de Hispanoamérica para apoyar los movimientos de secesión, de acuerdo con los planes de Gran Bretaña)
"Para estudiar los actos de guerra británicos para separar a Hispanoamérica de España es conveniente comenzar por el análisis de una figura paradigmática de dicho accionar.
Lord Thomas A. Cochrane, Conde de Dundonal, Gran Cruz de la Orden del Baño de la Imperial Brasileña del Crucero Real de San Salvador de Grecia, Almirante de la Escuadra Roja, Contralmirante de la Gran Bretaña, etcétera. Estos eran los títulos nobiliarios y militares del marino inglés que, en cumplimiento de los planes británicos de 1711 y el plan operativo de Maitland-Pitt de 1804, tuvo a su cargo la expedición marítima al Perú que en 1820 consumó la secesión de Hispanoamérica de la España Ibérica.
Es necesario por lo tanto esbozar una sinóptica reseña biográfica de quien consumó para beneficio de Gran Bretaña la conquista económica y financiera de Hispanoamérica, conquista que quedó encubierta con gobiernos nativos ostensibles, cuyo único poder estaba y está limitado a actos protocolares y formas extrínsecas de una “independencia política”, solamente estética, formal. No jurídica-económica, sustancial.
El personaje en cuestión nació en 1775 y murió en 1860. Entre 1818 y 1821 realizó la campaña naval para conquistar Chile (Valdivia) y Perú (Callao). Actuó luego al servicio de Brasil y separó a este país de Portugal. La separación e independencia del Brasil del Reino de Portugal, consumada el 7 de septiembre de 1822, tuvo similitudes económicas y financieras con la “independencia” de Hispanoamérica. Brasil adoptó la forma monárquica de gobierno bajo el ampuloso nombre de Imperio del Brasil y coronó emperador a Pedro I. este era hijo del príncipe regente Juan de Portugal que se trasladó con la Corte Lusitana a Brasil en 1808 con motivo de la oleada turística de Portugal por Napoleón y gobernó en Río de Janeiro hasta 1821.
El primer acto de dependencia y subordinación económica financiera del Brasil fue hacia Gran Bretaña. “El naciente Imperio del Brasil se comprometió a entregar a su metrópoli, Portugal, una suma millonaria en libras, las cuales debía tomar prestadas a un conjunto de bancos británicos que eran acreedores de Portugal por la misma cantidad”. La “independencia” de Brasil, fue, por ende, comprada a Portugal (3). El autor de quien tomamos estos importantísimos datos sintetiza así las conclusiones de su análisis de inicio de la independencia del Brasil: “Brasil inició así su vida autónoma cargando con una deuda agobiante cuyos beneficios no había recibido”.
La conquista económico-financiera de todo el continente Sur Americano para las bancas anglosajona fue, por lo tanto, integral.
"Lord Thomas A. Cochrane
(Viajes de Cochrane en toda la extensión de Hispanoamérica para apoyar los movimientos de secesión, de acuerdo con los planes de Gran Bretaña)
"Para estudiar los actos de guerra británicos para separar a Hispanoamérica de España es conveniente comenzar por el análisis de una figura paradigmática de dicho accionar.
Lord Thomas A. Cochrane, Conde de Dundonal, Gran Cruz de la Orden del Baño de la Imperial Brasileña del Crucero Real de San Salvador de Grecia, Almirante de la Escuadra Roja, Contralmirante de la Gran Bretaña, etcétera. Estos eran los títulos nobiliarios y militares del marino inglés que, en cumplimiento de los planes británicos de 1711 y el plan operativo de Maitland-Pitt de 1804, tuvo a su cargo la expedición marítima al Perú que en 1820 consumó la secesión de Hispanoamérica de la España Ibérica.
Es necesario por lo tanto esbozar una sinóptica reseña biográfica de quien consumó para beneficio de Gran Bretaña la conquista económica y financiera de Hispanoamérica, conquista que quedó encubierta con gobiernos nativos ostensibles, cuyo único poder estaba y está limitado a actos protocolares y formas extrínsecas de una “independencia política”, solamente estética, formal. No jurídica-económica, sustancial.
El personaje en cuestión nació en 1775 y murió en 1860. Entre 1818 y 1821 realizó la campaña naval para conquistar Chile (Valdivia) y Perú (Callao). Actuó luego al servicio de Brasil y separó a este país de Portugal. La separación e independencia del Brasil del Reino de Portugal, consumada el 7 de septiembre de 1822, tuvo similitudes económicas y financieras con la “independencia” de Hispanoamérica. Brasil adoptó la forma monárquica de gobierno bajo el ampuloso nombre de Imperio del Brasil y coronó emperador a Pedro I. este era hijo del príncipe regente Juan de Portugal que se trasladó con la Corte Lusitana a Brasil en 1808 con motivo de la oleada turística de Portugal por Napoleón y gobernó en Río de Janeiro hasta 1821.
El primer acto de dependencia y subordinación económica financiera del Brasil fue hacia Gran Bretaña. “El naciente Imperio del Brasil se comprometió a entregar a su metrópoli, Portugal, una suma millonaria en libras, las cuales debía tomar prestadas a un conjunto de bancos británicos que eran acreedores de Portugal por la misma cantidad”. La “independencia” de Brasil, fue, por ende, comprada a Portugal (3). El autor de quien tomamos estos importantísimos datos sintetiza así las conclusiones de su análisis de inicio de la independencia del Brasil: “Brasil inició así su vida autónoma cargando con una deuda agobiante cuyos beneficios no había recibido”.
La conquista económico-financiera de todo el continente Sur Americano para las bancas anglosajona fue, por lo tanto, integral.
Esto último de Brasil recuerda la deuda de la reunificación alemana que nos endosaron, con el visto bueno de los patriotas del PP, gente de bien y de buena familia, más el mamarrachuelo masón y su corte que vino después.
Interesante escrito, como siempre, de Julio C. González:
Actos de guerra británicos para separar a Hispanoamérica | Hispanoamérica Unida