SrPurpuron
Gñé
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A mi lo que me joroba es que Feijoo no de la cara por los suyos en su partido.
Una dimisión no se pide, se acepta o no. Lo que no se puede hacer es montar un teatro como hizo el Psoe con Abalos, solo para que se vaya al grupo mixto a seguir votando con ellos y ejerciendo de extradiputado. Eso es una vergüenza y nadie dice nada. Feijoo podría comerse a Sánchez, es más, cualquiera con un poco de sangre en las venas y que estuviera verdaderamente harto de Sánchez se lo podría zampar de un bocado y dejarlo en evidencia.
La paciencia tiene un límite, pero el hartazgo en la oposición no se ve, solo se ven salidas de tiesto, como las manifestaciones contra la amnistía, la cual se va a quedar en nada porque es flagrante mente anticonstitucional y el Psoe lo sabe, pero solo la blande para tratar de tras*mitir repruebo hacia los partidos soberanistas, un papel poco conciliador por parte de un partido que presume de Co ciliador. Al final el repruebo se lo lleva el Psoe y quien se acerca al Psoe termina como un apestado, porque así es como trata el Psoe a sus socios y de paso a sus votantes.
Una dimisión no se pide, se acepta o no. Lo que no se puede hacer es montar un teatro como hizo el Psoe con Abalos, solo para que se vaya al grupo mixto a seguir votando con ellos y ejerciendo de extradiputado. Eso es una vergüenza y nadie dice nada. Feijoo podría comerse a Sánchez, es más, cualquiera con un poco de sangre en las venas y que estuviera verdaderamente harto de Sánchez se lo podría zampar de un bocado y dejarlo en evidencia.
La paciencia tiene un límite, pero el hartazgo en la oposición no se ve, solo se ven salidas de tiesto, como las manifestaciones contra la amnistía, la cual se va a quedar en nada porque es flagrante mente anticonstitucional y el Psoe lo sabe, pero solo la blande para tratar de tras*mitir repruebo hacia los partidos soberanistas, un papel poco conciliador por parte de un partido que presume de Co ciliador. Al final el repruebo se lo lleva el Psoe y quien se acerca al Psoe termina como un apestado, porque así es como trata el Psoe a sus socios y de paso a sus votantes.
