Sir Connor
Excelentisimo Sir
Mucho antes de ‘Charlie Hebdo’, la celebérrima revista satírica gabacha chafada por un atentado islamista, que desencadenó un debate sobre los límites del humor y la moda aquella absurda de “Yo soy Charlie Hebdo”, existió ‘Hara-Kiri’, una publicación nacida en 1960 que fue su antecedente extremo, libertino y amoral. Por algo se calificaba a sí misma como “una revista sencilla y mala”.
Creada por el artista Georges Bernier, alias Professeur Choron, el escritor François Cavanna y el dibujante Fred, la revista ‘Hara-Kiri’ albergó a dibujantes tan kamikazes como Vuillemin, Kamagurka o Roland Topor, cuyos chistes eran demasiado fuertes incluso para unas décadas tan loca como las de los sesenta y setenta. No en vano, fue prohibida varias veces, entre ellas su coprófilo “Especial cosa” o su portada mofándose del atentado a una discoteca y del expresidente Charles de Gaulle poco después de su fin.
“No al aborto. ¡Dejalos vivir!”, reza esta portada.
La publicación empezó como un pasquín clandestino que se vendía de mano en mano por las calles, pero pronto llegó a los quioscos, donde mantuvo el precio de un franco y se despachó como churros… hasta que las sucesivas multas y prohibiciones acabaron con ella. Es significativo que ‘Hara-Kiri’ fuera atacada tanto por gobiernos conservadores como por los socialistas.
“Tras la violación… beba Perrier”: un falso anuncio de contraportada que hoy sería impublicable.
En España tuvo una versión más orientada hacia el chiste verde barraganesco, titulada ‘Harakiri: Humor bestia y sangriento’, donde destacaba la aportación de Já, Serafín, Pirró, Ivá y, sobre todo, de Sappo, seudónimo del genial historietista Manuel Vázquez, creador de Anacleto y las Hermanas Gilda. Como era humor lechón, no tuvo mayores problemas con la censura, a pesar de tocar alegremente tabúes como la pedofilia o la zoofilia.
Sí tuvo muchos problemas, a principios de los 90, ‘Hitler=SS’, un cómic de Vuillemin y Gourio editado originalmente en ‘Hara-Kiri’. Fue prohibido tanto en Francia como en España por “convertir una tragedia histórica en una farsa burlesca”, humillar a los judíos en general y a las víctimas del nazismo en particular.
Una de las portadas ‘nazis’ de ‘Hara-Kiri: “Junio del 40: ¡Eran buenos tiempos”
Sea como sea, hoy que el humor está tan limitado por la corrección política y las reacciones de tuiteros y tuiteras (¿o era al revés?) y de todo tipo de minorías vocingleras, merece la pena recordar tiempos más libérrimos repasando un puñado de portadas que, aún hoy, hacen pupa a la vista y cosquillas a la rabadilla.
“Revelación: ¡La Santa Virgen era un tras*!”
“Violación: aprenda a defenderse”
“Motosierra: por una pena de fin más humana”.
“El escándalo de las palos y las hormonas: Ella cambió de sesso el día de su Primera Comunión”.
“Travolta: ¿Qué tiene él que no tengamos nosotros?”
“¿Intestino fatigado? Tome Dios”: falso y polémico anuncio de palos Heudebert.
“Septiembre: las diarreas están de vuelta”.
“Un cigarrito para dos”: una de las escatológicas portadas de Vuillemin.
“Los discapacitados son tan hombres como los demás”.