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Será en Octubre
RTVE concedió por contrato a Silvia Intxaurrondo "total autonomía" para verter sus opiniones y manifestaciones en La Hora de La 1: "Es un hecho inaudito"
Según el contrato que Silvia Intxaurrondo firmó con RTVE el pasado 16 de agosto, la periodista tiene total libertad para manifestar las opiniones que considere. Una cláusula que, según fuentes directivas, "no es ni mucho menos lo habitual" y menos "en un programa de carácter informativo"
Esther Mucientes Madrid
Madrid
PREMIUM
Actualizado Viernes,24mayo2024-22:51
- TV Tensión máxima entre Silvia Intxaurrondo y la embajadora de Israel: "¿Se puede justificar el asesinato de 14.000 niños inocentes en seis meses?"
- Polémica RTVE corrige el salario de Silvia Intxaurrondo tras su nueva contratación en 2023 y añade 10.000 euros más: 547.514 euros por dos años
El contrato, firmado por la ex presidenta interina Elena Sánchez como representante del ente público y la sociedad Sukun Comunicación. constituida el 26 de julio de 2023 y de la que Silvia Intxaurrondo es Administradora Solidaria única, no solo establece esta cláusula sino que confirma las informaciones publicadas por EL MUNDO sobre el número de programas por los que se contrató a Silvia Intxaurrondo, el tiempo -dos años- y el sueldo a percibir.
Intxaurrondo fue contratada como codirectora y presentadora/conductora de La Hora de La 1 por "aproximadamente 520 capítulos" del programa, "de edición diaria (de lunes a viernes), en directo" durante el período comprendido entre el 11 de septiembre de 2023 y el 10 de septiembre de 2025 "(ambos inclusive)". El programa, según recoge el apartado de Estipulaciones de dicho contrato, "tendrá una duración aproximada de 180 minutos". Se estima "un total máximo de 260 capítulos por año".
"La empresa contratada (Sukun Comunicación) percibirá por las prestaciones de codirección la cantidad íntegra total 7.887 euros mensuales más IVA, con un máximo de 86.757 más IVA que equivalen a 11 mensualidades por cada año" y que se pagarán cada mes. Así mismo, Sukun percibirá "por las prestaciones de la presentadora/conductora y la cesión de los derechos de imagen la cantidad íntegra total de 700 euros más IVA por cada programa que intervenga, con un máximo de 182.000 euros más IVA por los 260 programas de cada año de contrato". Por tanto, la cantidad máxima de sueldo por los dos años de contrato es de 547.514 euros.
En el acuerdo firmado por ambas partes, RTVE se compromete, además, a que facilitará el transporte de ida y vuelta desde el domicilio de Intxaurrondo hasta Prado del Rey. "Así mismo, RTVE reembolsará los gastos que se ocasionen como consecuencia de los desplazamientos y alojamiento de la presentadora en el lugar que se efectúen las grabaciones de los programas que se realicen fuera de Madrid, así como los gastos para cualquier acción promocional aunque sea dentro de Madrid".
Todos estos datos ya fueron publicados por este periódico. Sin embargo, lo más sorprendente del contrato se encuentra en el apartado 3.1 -Condiciones de Ejecución del Contrato-. En este se establece el siguiente acuerdo: "El contenido de las intervenciones de la codirectora y presentadora/conductora dentro del programa contratado será establecido por la misma, con total autonomía y, en consecuencia, asumiendo la empresa contratada (Sukun Comunicación) todas las responsabilidades que se puedan derivar de sus opiniones y manifestaciones libremente expresadas". Es decir, RTVE no puede controlar las opiniones vertidas por Silvia Intxaurrondo en La Hora de La 1. De hecho, Intxaurrondo ha sido protagonista de muchos titulares y polémicas precisamente por esta "total autonomía".
No hay que irse muy lejos para recordar la entrevista que realizó a la embajadora israelí en España hace unas semanas y que provocó un momento de gran tensión durante el programa. Intxaurrondo le preguntó si "¿se puede justificar el asesinato de 14.000 niños inocentes en seis meses?". Una pregunta que tensó a la embajadora y que se pudo ver en el cambio en su rostro. "Rechazo con toda la fuerza la palabra asesinato", expresó la diplomática. "No es asesinato", repitió de nuevo. Aquella entrevista produjo cientos de reacciones en contra y en favor, muchas de ellas significando que Intxaurrondo representa a una televisión pública y que no eran las formas. De hecho, fuentes de RTVE aseguran que en aquella entrevista Intxaurrondo "introdujo una opinión en contra del reconocimiento del Estado de Israel sin citar fuentes", que se fue repitiendo en días posteriores.
La periodista Silvia Intxaurrondo.RTVE
Este caso no ha sido el único, Intxaurrondo no tiene ningún reparo a la hora de lanzar sus comentarios editorialistas como en el aniversario del 11-M retratando a los medios conspiradores. O cuando Laura Arroyo, que es parte del equipo de Canal Red, el canal de Pablo Iglesias, y que es colaboradora en La Hora de La 1, instó a Sánchez a "tocar el poder judicial" e "intervenir de forma directa los medios que no son medios y los periodistas que no son periodistas", sin que la presentadora dijera nada sobre un comentario de este tipo.
Tanto es así que fuentes de RTVE aseguran que este es el problema de una cláusula como esta, pues no es solo lo que pueda decir Intxaurrondo, pues la responsabilidad recae sobre ella y su empresa, sino que la periodista es uno de los rostros más representativos de RTVE, por mucho personal externo que sea.
Aún así, fuentes de la dirección aseguran que, aunque en el contrato se establece otra cláusula en la que se especifica que Sukun responderá en exclusiva frente a RTVE contra cualquier reivindicación o reclamación judicial o extrajudicial que pudiera presentarse cuando deriven de decisiones, comentarios o actuaciones realizadas por Intxaurrondo motu proprio sin el permiso de la cadena, RTVE es la responsable final de los contenidos por lo que "si hay una multa o una sanción es el juez el que decide quién es el responsable y, habitualmente, pese a esta cláusula de salvaguarda, recae en la Corporación Pública".
Es decir, RTVE acordó por contrato dar libertad absoluta a Silvia Intxaurrondo manifieste libremente las opiniones que la presentadora considere, pese a que el responsable último de esos comentarios es la propia Corporación Pública. "RTVE se puede ver implicada en demandas si un juez lo considera oportuno", aseguran.
De momento, las opiniones o manifestaciones de Intxaurrondo no han recibido ninguna reclamación, pero sí han generado innumerables polémicas. Muchos se preguntaban por qué RTVE no actuaba, teniendo en cuenta que La Hora de La 1 es un programa de producción propia del ente, la explicación no es otra que la cláusula 3.1.
"Es completamente irregular que se firme una cláusula de este tipo, no solo por la responsabilidad que supone para RTVE, sino también porque Intxaurrondo no es personal de la casa, es personal externo. Además, permitiendo que pueda verter las opiniones que le parezcan sin ningún tipo de control pone en una situación muy complicada la imagen de la televisión pública", aseguran. "Ahora se entiende que el Consejo de Informativos -La Hora de La 1 pertenece a info-entretenimiento- no haya dicho nada en ninguna de las manifestaciones fuera de tono de Silvia Intxaurrondo. No pueden", sentencian.
