Klaus María
Fiat iustitia et pirias mundus
Que el cine español está incluso mal visto por un sector creciente de la población es obvio. Que el mundillo del cine despierta cada vez más animadversión también. Pero, ¿cuándo se torció la cosa y porqué?.
La Ley Miró estableció un sistema de financiación a partir de "un régimen de subvención anticipada a los rendimientos de taquilla a partir de la presentación del proyecto del filme, incluyendo el guión, el equipo técnico y artístico". El objetivo clasista y cultureta de la seca de la Miró era acabar con las comedias costumbristas y machistas, el cine de pipas y programa doble como las de aventuras de Piquer Simón o las pelis de terror de Paul Naschy, el cine S (curiosamente un cine mucho más reconocido fuera en círculos de culto que en España).
El funcionamiento de la ley era dar dinero "a cuenta" de la futura taquilla a películas por sus méritos artísticos... el problema es que la industria del cine español se reorientó completamente basándose en esta política. Los costes de producción se multiplicaron, los sueldos se duplicaron o más y como la ley no impide que se reciban subvenciones de distinto origen las películas desde entonces se diseñan para que las subvenciones cubran el total del coste de producción (con todos sus participantes muy bien pagados) y al final, salvo a cuatro gatos, les da completamente igual la taquilla.
El modelo Miró está completamente agotado y debería ser eliminado o replanteado. Pero el problema es que el millar de espabilaos que había en la Gala de los Goya dependen todos del dinerito público y lo defenderán con uñas y dientes. No existe una industria del cine español, sólo hay un negocio subvencionado al 150% La taquilla del cine español no cubre ni el 50% de las ayudas que reciben... y eso incluye a las 3 o 4 películas españolas que sí hacen taquilla (como Bayona o como las comedias familiares de Santiago Segura... justo el tipo de cine que la Miró quería erradicar).
Y mientras tanto tienes a gente como Bayona (que sí, que ha ganado muchos Goya... con una producción norteamericana) que se van a los USA para hacer cine (su película anterior fue Jurassic World), pero pasa lo mismo con Nacho Vigalondo, Juan Carlos Fresnadillo, o Jaume Collet-Serra. El talento simplemente se va.
La ley Miró y el inicio del desapego de los españoles por el cine español
Pilar Miró con una ley en 1984 sentó las bases para erradicar un cine que consideraba de dudosa calidad y premiar al que pudiera dar visibilidad al país en el exterior
valenciaplaza.com
La Ley Miró estableció un sistema de financiación a partir de "un régimen de subvención anticipada a los rendimientos de taquilla a partir de la presentación del proyecto del filme, incluyendo el guión, el equipo técnico y artístico". El objetivo clasista y cultureta de la seca de la Miró era acabar con las comedias costumbristas y machistas, el cine de pipas y programa doble como las de aventuras de Piquer Simón o las pelis de terror de Paul Naschy, el cine S (curiosamente un cine mucho más reconocido fuera en círculos de culto que en España).
El funcionamiento de la ley era dar dinero "a cuenta" de la futura taquilla a películas por sus méritos artísticos... el problema es que la industria del cine español se reorientó completamente basándose en esta política. Los costes de producción se multiplicaron, los sueldos se duplicaron o más y como la ley no impide que se reciban subvenciones de distinto origen las películas desde entonces se diseñan para que las subvenciones cubran el total del coste de producción (con todos sus participantes muy bien pagados) y al final, salvo a cuatro gatos, les da completamente igual la taquilla.
El modelo Miró está completamente agotado y debería ser eliminado o replanteado. Pero el problema es que el millar de espabilaos que había en la Gala de los Goya dependen todos del dinerito público y lo defenderán con uñas y dientes. No existe una industria del cine español, sólo hay un negocio subvencionado al 150% La taquilla del cine español no cubre ni el 50% de las ayudas que reciben... y eso incluye a las 3 o 4 películas españolas que sí hacen taquilla (como Bayona o como las comedias familiares de Santiago Segura... justo el tipo de cine que la Miró quería erradicar).
Y mientras tanto tienes a gente como Bayona (que sí, que ha ganado muchos Goya... con una producción norteamericana) que se van a los USA para hacer cine (su película anterior fue Jurassic World), pero pasa lo mismo con Nacho Vigalondo, Juan Carlos Fresnadillo, o Jaume Collet-Serra. El talento simplemente se va.
Directores españoles en Hollywood: terror y secuelas
Luis Sanz. Madrid, 6 jun (EFE).- Más allá de Alejandro Amenábar y Juan Antonio Bayona, un grupo de directores españoles se mueve desde hace unos años con naturalidad
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