M. Priede
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El agente retirado de la CIA de 79 años de edad, Malcom Howard, ha hecho una serie de afirmaciones asombrosas desde que fue dado de alta del hospital de Nueva Jersey el viernes y le dijo que le quedan semanas de vida. El Sr. Howard afirma que estuvo involucrado en la "demolición controlada" del World Trade Center 7, el tercer edificio que fue destruido el 11 de septiembre.
El Sr. Howard, que trabajó para la CIA durante 36 años como operativo, afirma que fue contratado por altos agentes de la CIA para trabajar en el proyecto debido a su formación en ingeniería y a su temprana carrera en el negocio de la demolición.
Formado como ingeniero civil, el Sr. Howard se convirtió en un experto en explosivos después de haber sido cazado por la CIA a principios de la década de 1980. El Sr. Howard dice que tenía amplia experiencia en la plantación de explosivos en objetos tan pequeños como encendedores de cigarrillos y tan grandes como edificios de 80 pisos.
El nativo de Nueva Jersey, de 79 años de edad, dice que trabajó en la operación de la CIA que llamaron "Nuevo Siglo" entre mayo de 1997 y septiembre de 2001, durante un tiempo en el que dijo que la CIA "seguía recibiendo órdenes de la cúpula". El Sr. Howard dice que era parte de una célula de 4 agentes encargados de asegurar el éxito de la demolición.
El Sr. Howard dice que la operación del World Trade Center 7 es única entre sus demoliciones, ya que es la única demolición que "tuvimos que fingir que no era un trabajo de demolición". Afirma que no tuvo ningún problema en seguir adelante con el engaño en ese momento, porque "cuando eres un patriota, no cuestionas la motivación de la CIA o de la Casa Blanca. Asumes que el propósito principal es para un bien mayor. Escogen a gente buena y leal como yo, y me rompe el corazón oír la cosa."
Pero incluso él admite que ahora, mirando hacia atrás, "Algo no estaba bien."
"Nada bueno ha salido de esto. Esta no es la América que imaginábamos".
Explicando cómo se compró el edificio, el Sr. Howard dice: "Fue una demolición clásica controlada con explosivos. Usamos como explosivos materiales compuestos de nanotermita súper finos de tipo militar. Lo difícil fue meter miles de libras de explosivos, mechas y mecanismos de ignición en el edificio sin causar demasiada preocupación. Pero casi todas las oficinas del Edificio 7 fueron alquiladas por la CIA, el Servicio Secreto o los militares, lo que lo hizo más fácil".
30-Second Reel of Building 7 Collapse Footage - YouTube
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El Sr. Howard explica que el WTC 7 fue "cargado con explosivos en lugares estratégicos" en el mes previo al día que cambió el curso de la historia estadounidense. El 11 de septiembre, mientras las torres Norte y Sur ardían, se encendieron mechas en el World Trade Center 7, y explosiones de nanotermitas ahuecaron el edificio, destruyendo la estructura de acero, quitando los refuerzos, y permitiendo que los fuegos de la oficina desgarraran el resto del edificio, ahuecándolo como un proyectil.
El World Trade Center 7 colapsó en su propia huella a las 5:20 p.m., siete horas después de la destrucción del WTC 1 y 2. El edificio conmocionó a los testigos al descender a la velocidad de caída libre, indicando que encontró cero resistencia en el descenso.
El Sr. Howard y sus colegas habían hecho su trabajo.
"Cuando el edificio se derrumbó, hubo mucha prisa. Todo salió exactamente como lo planeamos. Fue tan suave. Todos fueron evacuados. Nadie resultó herido en el WTC 7. Estábamos celebrando. Seguimos viendo las repeticiones de la demolición, tomamos el whisky y los cigarros y, de repente, ocurrió lo más extraño. Todos empezamos a preocuparnos de que se veía un poco demasiado suave. Vimos la cinta una y otra vez y otra y otra vez y empezamos a ponernos paranoicos. Parecía una demolición controlada. Pensamos cosa, la gente va a cuestionar esto. Y luego oímos que la gente de la calle estaba reportando que escucharon las explosiones durante la tarde. Cuando nos dijeron que la BBC arruinó su informe y anunció al mundo que el edificio se derrumbó 20 minutos antes de que lo hiciera... En ese momento realmente pensamos que el concierto estaba listo".
Según el informe oficial del gobierno sobre el 11 de septiembre, el WTC 7 se derrumbó debido a "incendios incontrolados" causados por escombros que volaron desde el WTC 1 y 2, que habían sido alcanzados por aviones de pasajeros. Si la narración oficial fuera cierta, el WTC 7 sería el primer edificio alto del mundo en derrumbarse debido a incendios incontrolados, y el único rascacielos de acero en el mundo que se ha derrumbado en sí mismo, debido a "incendios de oficinas".
El Sr. Howard y sus colegas temían que el público viera a través de la narrativa oficial y se levantara contra el gobierno, exigiendo que se les dijera la verdad.
"Había tantos cabos sueltos, tanta evidencia dejada atrás. Pensamos que el público estaría por todas partes. Pensamos que habría un levantamiento público que los medios de comunicación no podrían ignorar. Estarían financiando investigaciones y exigiendo saber por qué les estaban mintiendo. Pensamos que encontrarían compuestos químicos en el área que probaran que el Edificio 7 fue volado.
"Pensamos que habría una revolución. Llegaría hasta la cima, hasta el Presidente Bush. Sería arrastrado fuera de la Casa Blanca.
"Pero nada de eso pasó. Casi nadie cuestionó nada. Los medios derribaron a cualquiera que se atreviera a cuestionar cualquier cosa que se le dijera".
Siga el dinero
El Sr. Howard afirma que no tiene "ningún conocimiento directo" sobre la destrucción de las Torres Norte y Sur del World Trade Center, explicando que "las operaciones de la CIA son muy específicas" y que es común estar trabajando en un proyecto más grande mientras se entiende sólo una pequeña pieza del rompecabezas.
[9/11: Larry Silverstein diseñó el nuevo WTC-7 un año antes de los ataques]
Pero tiene consejos para los investigadores que buscan entender todo el rompecabezas y averiguar quién está detrás del ataque más devastador en suelo estadounidense de la historia.
"Sigue el dinero".
"Cuando quieres averiguar quién está detrás de algo, sólo tienes que seguir el dinero. Mira las operaciones realizadas justo antes del 11 de septiembre. Estos son los tipos que sabían lo que se avecinaba. Los hijos de agentes de la CIA, funcionarios del gobierno. Familiares cercanos de los hombres más poderosos de América. Cheney, Rumsfeld. Todos se hicieron ricos. No fueron sólo los contratos otorgados a sus amigos en el negocio de la construcción y las guerras y los sobornos".
"Era tráfico de información privilegiada."
Muchos países, entre ellos Gran Bretaña, Francia, Alemania, Italia, Japón y Mónaco, iniciaron investigaciones de uso de información privilegiada tras los atentados del 11 de septiembre, creyendo que si podían probar que los operativos de Al Qaeda se beneficiaban en el mercado de valores, podrían probar que la organización terrorista estaba detrás de los atentados.
Y todas las pruebas apuntaban a un fuerte tráfico de información privilegiada en torno al 11 de septiembre.
El ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Antonio Martino, dijo: "Creo que hay estados y organizaciones terroristas detrás de la especulación en los mercados internacionales." El presidente del banco central alemán, Ernst Welteke, dijo que sus investigadores habían encontrado "pruebas casi irrefutables de uso de información privilegiada".
Incluso CNN informó que los reguladores estaban viendo "señales cada vez más claras" de que alguien "manipuló los mercados financieros antes del ataque terrorista con la esperanza de beneficiarse de él".
El Sr. Howard dice que un estudio serio de quién se benefició en el mercado de valores desde el 11 de septiembre "arrancaría el corazón de la oligarquía en Estados Unidos".
"Sólo hay una organización que abarca todo el mundo, y déjenme decirles que no lo es y nunca lo fue al-Qaeda."
Es la CIA.
"Nunca podría haber una investigación real. Todo el gobierno en la sombra, como los llama ahora, está implicado".
El hombre de 79 años, que pasa sus últimas semanas en casa, dijo que no espera ser detenido después de su confesión porque "entonces tendrían que ir tras todos los demás". Sólo usarán los medios de comunicación para atacarme. Están todos en nómina para suprimir todo alrededor del 9/11."
CIA Agent Confesses On Deathbed: 'We Blew Up WTC 7 On 9/11'
Malcom Howard - Buscar con Google
Todos esos errores son intencionados, precisamente para que deduzcamos la verdad: que fue un autoatentado, una voladura controlada.
"Como podéis ver, aquí no hay ningún avión, pero nosotros, Donald y yo, decimos que sí. ¿A ver si tenéis valor para contar la verdad?"
https://cdn.history.com/sites/2/2014/01/president-bush-visit-pentagon-***owing-9-11-P.jpeg
Un vídeo crítico con la LGTB puede durar 10 minutos en Youtube, dependiendo de las quejas que haya; uno contando la tomadura de pelo más criminal jamás vista se mantiene años y años, los que haga falta. Eso delata la impunidad de quienes lo llevaron a cabo, lo cual aterroriza a todos los perioputas sin excepción.
Si quisieran ocultar la verdad demostrarían miedo, y eso envalentonaría a algunos periodistas; mostrando la verdad, ni Dios se mueve; es más, todavía peor, porque en lugar de callar divulgan la mentira mañana, tarde y noche, lo cual no es obligación.
Nada nuevo, ya digo: el mismo día de la demolición Donald Trump, experto en construir rascacielos, dijo lo mismo (han hecho desaparecer la grabación de voz, recuerdo que era una entrevista de radio, pero está la transcripción):
Si las familias del 11 de septiembre demandan a los saudíes, ¿se defenderán los saudíes señalando que los 15 patsies saudíes eran en realidad agentes de la CIA? ¿Y que todo el World Trade Center fue volado por explosivos, no destruido por los incendios de oficinas a propulsión de aviones?
Aunque personalmente no veo a Trump como un candidato a la verdad sobre el 11 de septiembre - no estaría a la altura de neoconservadores como Giuliani, Adelson y Woolsey si le importara la verdad - deberíamos mantenernos firmes en este asunto... y agradecerle su apoyo a JASTA.
Esperemos que Obama tenga razón y que millones de ciudadanos de docenas de países extranjeros demanden al gobierno de Estados Unidos por su terrorismo global, que ha cobrado la vida de más de 50 millones de personas inocentes desde la Segunda Guerra Mundial. Pásala a JASTA! Demandar a los saudíes... ¡y luego a los israelíes!
Aquí están algunas declaraciones del mismo día por Donald Trump en el Canal 9, el 9/11/2001.
TRANSCRIPCIÓN
Alan Marcus: Donald, probablemente eres el constructor más conocido, sobre todo de los grandes edificios de la ciudad. Hay una gran cantidad de preguntas acerca de si el daño y la destrucción final de los edificios fue causada por los aviones por defectos arquitectónicos o posiblemente por bombas o más después de los choques, ¿tienes alguna idea al respecto?
Donald Trump: No era un defecto arquitectónico. El World Trade Center siempre fue conocido como un edificio muy fuerte. No olvides que se llevó una gran bomba en el sótano (1993). Ahora, el sótano es el lugar más vulnerable porque es tu cimiento y resistió eso y llegué a ver esa área unos tres o cuatro días después porque uno de mis ingenieros estructurales me llevó de visita porque él hizo el edificio y yo dije "No puedo creerlo". El edificio estaba en pie y la mitad de las columnas fueron voladas. Este era un edificio increíblemente poderoso. Si no sabes nada de estructura fue uno de los primeros edificios que se construyó desde el exterior. El acero, la razón por la que el World Trade Center tenía ventanas tan estrechas es que entre todas las ventanas, tenías el acero en el exterior, el acero en el exterior del edificio.
Es por eso que cuando miré por primera vez - y tenías esas grandes y pesadas vigas en forma de "i". Cuando lo miré por primera vez, no podía creerlo, porque había un agujero en el acero y este es el acero que era, recuerdas el ancho de las ventanas de la gente del World Trade Center. Creo que sabes que si alguna vez estuviste allí arriba, eran bastante estrechos y en el medio estaba este acero pesado. Me pregunté cómo un avión, incluso un avión, incluso un 767 o 747 o lo que fuera, ¿cómo podría atravesar este acero? Yo creo que no sólo tenían un avión, sino que tenían bombas que explotaron casi simultáneamente, porque no puedo imaginarme nada que pudiera atravesar esa pared. La mayoría de los edificios se construyen con el acero en el interior alrededor del hueco del ascensor. Este fue construido desde el exterior que es la estructura más fuerte que se puede tener y era casi como una lata de sopa.
Rolland Smith: Sabes, Donald, estuvimos mirando fotos toda la mañana de ese avión entrando al edificio número dos y cuando ves que se acerca por el otro lado y de repente en cuestión de milisegundos la explosión sale por el otro lado.
Donald Trump: Cierto. Creo que había un avión con algo más que combustible. Creo que obviamente eran aviones muy grandes. Iban muy rápido, porque yo también estaba observando hacia dónde parecía que iba el avión, no sólo rápido, sino que también parecía estar entrando en el edificio. También lo es conseguir la velocidad al bajar la colina, por así decirlo. Me pareció que hacer ese tipo de destrucción es incluso más que un avión grande porque se habla de acero, el acero de calibre más pesado que se usó en el edificio. Estos edificios eran sólidos como una roca y sabes que es algo increíble. Este país es diferente hoy y va a ser diferente de lo que fue durante muchos años.
Rolland Smith: Una afirmación muy profunda y muy cierta.
Donald Trump: "Bombs were used on the World Trade Center!" - Veterans Today | News - Military Foreign Affairs Policy
Aunque personalmente no veo a Trump como un candidato a la verdad sobre el 11 de septiembre - no estaría a la altura de neoconservadores como Giuliani, Adelson y Woolsey si le importara la verdad - deberíamos mantenernos firmes en este asunto... y agradecerle su apoyo a JASTA.
Esperemos que Obama tenga razón y que millones de ciudadanos de docenas de países extranjeros demanden al gobierno de Estados Unidos por su terrorismo global, que ha cobrado la vida de más de 50 millones de personas inocentes desde la Segunda Guerra Mundial. Pásala a JASTA! Demandar a los saudíes... ¡y luego a los israelíes!
Aquí están algunas declaraciones del mismo día por Donald Trump en el Canal 9, el 9/11/2001.
TRANSCRIPCIÓN
Alan Marcus: Donald, probablemente eres el constructor más conocido, sobre todo de los grandes edificios de la ciudad. Hay una gran cantidad de preguntas acerca de si el daño y la destrucción final de los edificios fue causada por los aviones por defectos arquitectónicos o posiblemente por bombas o más después de los choques, ¿tienes alguna idea al respecto?
Donald Trump: No era un defecto arquitectónico. El World Trade Center siempre fue conocido como un edificio muy fuerte. No olvides que se llevó una gran bomba en el sótano (1993). Ahora, el sótano es el lugar más vulnerable porque es tu cimiento y resistió eso y llegué a ver esa área unos tres o cuatro días después porque uno de mis ingenieros estructurales me llevó de visita porque él hizo el edificio y yo dije "No puedo creerlo". El edificio estaba en pie y la mitad de las columnas fueron voladas. Este era un edificio increíblemente poderoso. Si no sabes nada de estructura fue uno de los primeros edificios que se construyó desde el exterior. El acero, la razón por la que el World Trade Center tenía ventanas tan estrechas es que entre todas las ventanas, tenías el acero en el exterior, el acero en el exterior del edificio.
Es por eso que cuando miré por primera vez - y tenías esas grandes y pesadas vigas en forma de "i". Cuando lo miré por primera vez, no podía creerlo, porque había un agujero en el acero y este es el acero que era, recuerdas el ancho de las ventanas de la gente del World Trade Center. Creo que sabes que si alguna vez estuviste allí arriba, eran bastante estrechos y en el medio estaba este acero pesado. Me pregunté cómo un avión, incluso un avión, incluso un 767 o 747 o lo que fuera, ¿cómo podría atravesar este acero? Yo creo que no sólo tenían un avión, sino que tenían bombas que explotaron casi simultáneamente, porque no puedo imaginarme nada que pudiera atravesar esa pared. La mayoría de los edificios se construyen con el acero en el interior alrededor del hueco del ascensor. Este fue construido desde el exterior que es la estructura más fuerte que se puede tener y era casi como una lata de sopa.
Rolland Smith: Sabes, Donald, estuvimos mirando fotos toda la mañana de ese avión entrando al edificio número dos y cuando ves que se acerca por el otro lado y de repente en cuestión de milisegundos la explosión sale por el otro lado.
Donald Trump: Cierto. Creo que había un avión con algo más que combustible. Creo que obviamente eran aviones muy grandes. Iban muy rápido, porque yo también estaba observando hacia dónde parecía que iba el avión, no sólo rápido, sino que también parecía estar entrando en el edificio. También lo es conseguir la velocidad al bajar la colina, por así decirlo. Me pareció que hacer ese tipo de destrucción es incluso más que un avión grande porque se habla de acero, el acero de calibre más pesado que se usó en el edificio. Estos edificios eran sólidos como una roca y sabes que es algo increíble. Este país es diferente hoy y va a ser diferente de lo que fue durante muchos años.
Rolland Smith: Una afirmación muy profunda y muy cierta.
Donald Trump: "Bombs were used on the World Trade Center!" - Veterans Today | News - Military Foreign Affairs Policy
11-S. ¿Que fue del avión de Pensilvania?
7-j. Oligarquía y crimen. TODO SOBRE EL ATENTADO DE LONDRES
Reciente. Calentito:
Rusia denuncia la diarquía en la ONU y en Estados Unidos
Del forero Pifiado:
Carta abierta al presidente Trump sobre las consecuencias del 11 de Septiembre
por Thierry Meyssan
Red Voltaire | Damasco (Siria) | 30 de agosto de 2018
Señor Presidente,
En su país nunca hubo juicios por los crímenes del 11 de Septiembre de 2001. Dirijo a usted esta carta como el ciudadano francés que primero denunció las incoherencias de la versión oficial y que abrió mundialmente el debate sobre la búsqueda de los culpables.
Cuando somos llamados a hacer el papel de jurado en un tribunal penal, estamos llamados a determinar si el sospechoso que nos presentan es culpable o no y, posiblemente, a decidir la pena que debe aplicársele. Ante los acontecimientos del 11 de Septiembre, la administración de George Bush hijo nos dijo que el culpable era al-Qaeda y que el castigo sería el derrocamiento de todos los que habían ayudado a al-Qaeda, o sea los talibanes afganos y, después, el régimen iraquí de Saddam Hussein.
Pero existen numerosos indicios que desmienten esa tesis de manera irrefutable. Si fuésemos jurados, tendríamos que declarar objetivamente a los talibanes y al régimen de Saddam Hussein inocentes, al menos de ese crimen. Por supuesto, no por ello sabríamos quién es el verdadero culpable y eso nos sumiría en un sentimiento de frustración. Pero no podemos aceptar que se condene a quienes no cometieron ese crimen, sólo porque nosotros no hemos sabido, o podido, encontrar a los verdaderos culpables.
Todos hemos entendido ya que altas personalidades estaban mintiendo cuando el secretario de Justicia y el director del FBI, Robert Muller, publicaron los nombres de los 19 supuestos participantes en los secuestros de los aviones implicados en los hechos del 11 de Septiembre. Y lo supimos porque ya teníamos las listas de todos los pasajeros de los aviones, divulgadas por las compañías aéreas, y ninguno de aquellos sospechosos aparecía en dichas listas.
Basándonos en esos elementos sospechamos del «Gobierno de Continuidad», instancia encargada de tomar el lugar de los responsables electos si estos muriesen en una confrontación nuclear. Emitimos entonces la hipótesis de que tras aquellos atentados se escondía un golpe de Estado, planificado según el método concebido por Edward Luttwak, consistente en mantener, en apariencia, el ejecutivo que ya estaba en el poder, pero obligándolo a aplicar una política diferente.
Inmediatamente después de los acontecimientos del 11 de Septiembre, la administración de Bush hijo adoptó, en cuestión de días, varias decisiones:
- Creó el Departamento de Seguridad de la Patria (Homeland Security) e hizo votar en el Congreso un voluminoso código antiterrorista –redactado mucho antes de los atentados–, la llamada Ley o Acta Patriótica (USA Patriot Act). Redactado para los casos que la administración pueda decidir calificar como «terrorismo», ese texto suspende la Carta de Derechos (Bill of Rights) en la que se sustentó la gloria de su país. La “Ley Patriótica” desequilibra las instituciones estadounidenses y garantiza, dos siglos más tarde, el triunfo de los grandes propietarios que redactaron la Constitución y la derrota de los héroes de la Guerra de Independencia que exigieron que se agregara a aquella Constitución la Carta de Derechos.
- El secretario de Defensa Donald Rumsfeld creó la «Oficina de Transformación de la Fuerza» (Office of Force Transformation), bajo la dirección del almirante Arthur Cebrowski, quien de inmediato presentó un plan –concebido desde mucho antes– para controlar el acceso a los recursos naturales de los países del sur. Ese plan exigía la destrucción de las estructuras mismas de los Estados y sociedades en los países de la mitad del mundo aún no globalizada. Simultáneamente, el director de la CIA inició la «Matriz del Ataque Mundial», un conjunto de operaciones secretas en 85 países cuyos Estados y sociedades Rumsfeld y Cebrowski querían destruir. Estimando que sólo se mantendrían estables los países cuyas economías estaban globalizadas, y que los otros serían destruidos, los verdaderos organizadores del 11 de Septiembre pusieron las fuerzas armadas de Estados Unidos al servicio de intereses financieros transnacionales. Traicionaron así a Estados Unidos y lo convirtieron en el brazo armados de los depredadores.
Hace 17 años que estamos viendo las consecuencias que ha tenido para los conciudadanos de usted, Presidente, el gobierno de los sucesores de aquellos que redactaron la Constitución y se opusieron en su época –sin éxito– a la «Carta de Derechos». Esas consecuencias son que los ricos se han convertido en súper ricos mientras que la clase media se ha reducido a la quinta parte de lo que fue y la pobreza se ha extendido.
Vemos también la aplicación de la estrategia Rumsfeld-Cebrowski: supuestas «guerras civiles» han destruido casi todo el Medio Oriente ampliado. Desde Afganistán hasta Libia, pasando por Arabia Saudita y Turquía –dos países que ni siquiera han estado en guerra–, ciudades enteras han sido borradas del mapa.
En 2001, sólo dos ciudadanos estadounidenses, dos promotores inmobiliarios, denunciaron las incoherencias de la versión de la administración Bush Jr. Fueron el demócrata Jimmy Walter, quien acabó viéndose obligado a exilarse, y usted mismo. Usted entró entonces al mundo de la política y acabó siendo electo presidente.
En 2011, vimos como el entonces comandante del AfriCom era separado de su cargo –en beneficio de la OTAN– por haberse negado a respaldar a al-Qaeda en su papel de fuerza terrestre que debía destruir la Yamahiriya Árabe Libia. Vimos después como el LandCom de la OTAN organizaba el apoyo de Occidente a los yihadistas en general y a al-Qaeda en particular en el intento de derrocamiento emprendido contra la República Árabe Siria.
O sea, los yihadistas, considerados «combatientes de la libertad» (Freedom fighters) cuando combatían a los soviéticos, considerados después «terroristas» en tiempos del 11 de Septiembre, se convertían nuevamente en los aliados del Estado Profundo que en realidad nunca dejaron de ser.
Vimos con inmensa esperanza los pasos que dio usted para suprimir uno a uno todos los apoyos que tenían los yihadistas. Con esa misma esperanza inmensa le vemos hoy a usted dialogar con su homólogo ruso para que vuelva la vida al devastado Medio Oriente. Y es con el mismo grado de inquietud que vemos a Robert Muller, hoy convertido en fiscal especial, proseguir la destrucción de su patria arremetiendo contra la función presidencial que usted ejerce.
Señor Presidente, no son usted y sus conciudadanos los únicos que sufren a causa de la diarquía que se ha instalado en Estados Unidos desde el golpe de Estado del 11 de Septiembre. El mundo entero es víctima.
Señor Presidente, el 11 de Septiembre no es historia antigua. El 11 de Septiembre fue el triunfo de intereses transnacionales cuyo peso se abate hoy no sólo sobre el pueblo estadounidense sino sobre toda la Humanidad que aspira a la libertad.
por Thierry Meyssan
Red Voltaire | Damasco (Siria) | 30 de agosto de 2018
Señor Presidente,
En su país nunca hubo juicios por los crímenes del 11 de Septiembre de 2001. Dirijo a usted esta carta como el ciudadano francés que primero denunció las incoherencias de la versión oficial y que abrió mundialmente el debate sobre la búsqueda de los culpables.
Cuando somos llamados a hacer el papel de jurado en un tribunal penal, estamos llamados a determinar si el sospechoso que nos presentan es culpable o no y, posiblemente, a decidir la pena que debe aplicársele. Ante los acontecimientos del 11 de Septiembre, la administración de George Bush hijo nos dijo que el culpable era al-Qaeda y que el castigo sería el derrocamiento de todos los que habían ayudado a al-Qaeda, o sea los talibanes afganos y, después, el régimen iraquí de Saddam Hussein.
Pero existen numerosos indicios que desmienten esa tesis de manera irrefutable. Si fuésemos jurados, tendríamos que declarar objetivamente a los talibanes y al régimen de Saddam Hussein inocentes, al menos de ese crimen. Por supuesto, no por ello sabríamos quién es el verdadero culpable y eso nos sumiría en un sentimiento de frustración. Pero no podemos aceptar que se condene a quienes no cometieron ese crimen, sólo porque nosotros no hemos sabido, o podido, encontrar a los verdaderos culpables.
Todos hemos entendido ya que altas personalidades estaban mintiendo cuando el secretario de Justicia y el director del FBI, Robert Muller, publicaron los nombres de los 19 supuestos participantes en los secuestros de los aviones implicados en los hechos del 11 de Septiembre. Y lo supimos porque ya teníamos las listas de todos los pasajeros de los aviones, divulgadas por las compañías aéreas, y ninguno de aquellos sospechosos aparecía en dichas listas.
Basándonos en esos elementos sospechamos del «Gobierno de Continuidad», instancia encargada de tomar el lugar de los responsables electos si estos muriesen en una confrontación nuclear. Emitimos entonces la hipótesis de que tras aquellos atentados se escondía un golpe de Estado, planificado según el método concebido por Edward Luttwak, consistente en mantener, en apariencia, el ejecutivo que ya estaba en el poder, pero obligándolo a aplicar una política diferente.
Inmediatamente después de los acontecimientos del 11 de Septiembre, la administración de Bush hijo adoptó, en cuestión de días, varias decisiones:
- Creó el Departamento de Seguridad de la Patria (Homeland Security) e hizo votar en el Congreso un voluminoso código antiterrorista –redactado mucho antes de los atentados–, la llamada Ley o Acta Patriótica (USA Patriot Act). Redactado para los casos que la administración pueda decidir calificar como «terrorismo», ese texto suspende la Carta de Derechos (Bill of Rights) en la que se sustentó la gloria de su país. La “Ley Patriótica” desequilibra las instituciones estadounidenses y garantiza, dos siglos más tarde, el triunfo de los grandes propietarios que redactaron la Constitución y la derrota de los héroes de la Guerra de Independencia que exigieron que se agregara a aquella Constitución la Carta de Derechos.
- El secretario de Defensa Donald Rumsfeld creó la «Oficina de Transformación de la Fuerza» (Office of Force Transformation), bajo la dirección del almirante Arthur Cebrowski, quien de inmediato presentó un plan –concebido desde mucho antes– para controlar el acceso a los recursos naturales de los países del sur. Ese plan exigía la destrucción de las estructuras mismas de los Estados y sociedades en los países de la mitad del mundo aún no globalizada. Simultáneamente, el director de la CIA inició la «Matriz del Ataque Mundial», un conjunto de operaciones secretas en 85 países cuyos Estados y sociedades Rumsfeld y Cebrowski querían destruir. Estimando que sólo se mantendrían estables los países cuyas economías estaban globalizadas, y que los otros serían destruidos, los verdaderos organizadores del 11 de Septiembre pusieron las fuerzas armadas de Estados Unidos al servicio de intereses financieros transnacionales. Traicionaron así a Estados Unidos y lo convirtieron en el brazo armados de los depredadores.
Hace 17 años que estamos viendo las consecuencias que ha tenido para los conciudadanos de usted, Presidente, el gobierno de los sucesores de aquellos que redactaron la Constitución y se opusieron en su época –sin éxito– a la «Carta de Derechos». Esas consecuencias son que los ricos se han convertido en súper ricos mientras que la clase media se ha reducido a la quinta parte de lo que fue y la pobreza se ha extendido.
Vemos también la aplicación de la estrategia Rumsfeld-Cebrowski: supuestas «guerras civiles» han destruido casi todo el Medio Oriente ampliado. Desde Afganistán hasta Libia, pasando por Arabia Saudita y Turquía –dos países que ni siquiera han estado en guerra–, ciudades enteras han sido borradas del mapa.
En 2001, sólo dos ciudadanos estadounidenses, dos promotores inmobiliarios, denunciaron las incoherencias de la versión de la administración Bush Jr. Fueron el demócrata Jimmy Walter, quien acabó viéndose obligado a exilarse, y usted mismo. Usted entró entonces al mundo de la política y acabó siendo electo presidente.
En 2011, vimos como el entonces comandante del AfriCom era separado de su cargo –en beneficio de la OTAN– por haberse negado a respaldar a al-Qaeda en su papel de fuerza terrestre que debía destruir la Yamahiriya Árabe Libia. Vimos después como el LandCom de la OTAN organizaba el apoyo de Occidente a los yihadistas en general y a al-Qaeda en particular en el intento de derrocamiento emprendido contra la República Árabe Siria.
O sea, los yihadistas, considerados «combatientes de la libertad» (Freedom fighters) cuando combatían a los soviéticos, considerados después «terroristas» en tiempos del 11 de Septiembre, se convertían nuevamente en los aliados del Estado Profundo que en realidad nunca dejaron de ser.
Vimos con inmensa esperanza los pasos que dio usted para suprimir uno a uno todos los apoyos que tenían los yihadistas. Con esa misma esperanza inmensa le vemos hoy a usted dialogar con su homólogo ruso para que vuelva la vida al devastado Medio Oriente. Y es con el mismo grado de inquietud que vemos a Robert Muller, hoy convertido en fiscal especial, proseguir la destrucción de su patria arremetiendo contra la función presidencial que usted ejerce.
Señor Presidente, no son usted y sus conciudadanos los únicos que sufren a causa de la diarquía que se ha instalado en Estados Unidos desde el golpe de Estado del 11 de Septiembre. El mundo entero es víctima.
Señor Presidente, el 11 de Septiembre no es historia antigua. El 11 de Septiembre fue el triunfo de intereses transnacionales cuyo peso se abate hoy no sólo sobre el pueblo estadounidense sino sobre toda la Humanidad que aspira a la libertad.
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