Brutal, robo directo de propiedad pública. Así, sin vaselina ni lubricante de ningún tipo y a una sociedad unipersonal, para cobrar directamente derechos.
El Software había sido desarrollado por tecnológicas españolas para la Complutense y Begoña sencillamente se apropió de él y lo registró a nombre de una sociedad suya.
Esto ya no es que sea robar, es que es apropiación directa de propiedad pública (el Rector de la Complutense, por supuesto dice que a él le da igual, pero es que el Rector no es la Complutense tampoco, y supongo que lo dice porque está acostumbrado a robar también).
Así que ya sabéis: pringados hinginieritos desarrolláis software en ratos libres gratis porque os lo pide la empresa para el bien de una institución pública, y la esposa del Presidente, que no tiene ni secundaria, se lo apropia al estilo venezolano.
El Software había sido desarrollado por tecnológicas españolas para la Complutense y Begoña sencillamente se apropió de él y lo registró a nombre de una sociedad suya.
Esto ya no es que sea robar, es que es apropiación directa de propiedad pública (el Rector de la Complutense, por supuesto dice que a él le da igual, pero es que el Rector no es la Complutense tampoco, y supongo que lo dice porque está acostumbrado a robar también).
Así que ya sabéis: pringados hinginieritos desarrolláis software en ratos libres gratis porque os lo pide la empresa para el bien de una institución pública, y la esposa del Presidente, que no tiene ni secundaria, se lo apropia al estilo venezolano.