Diario de Pontevedra
Jorge Verstrynge comenzó su trayectoria política en la extrema derecha francesa. Fue delfín de Manuel Fraga en las primeras épocas del entonces joven partido Alianza Popular. Más tarde perteneció al PSOE, aunque sin ningún cargo político, y posteriormente fue asesor del comunista catalán Francisco Frutos. Más recientemente aconsejó al Ejército Bolivariano de Venezuela.
Después de su periplo por todo el espectro político, ¿cómo se define hoy en día?
Como muy rojo y muy cabreado.
Es normal ver a personas, hay ejemplos a docenas en la vida pública, que empiezan en la izquierda y poco a poco van dirigiéndose a la derecha política. Su caso es el inverso...
Allá ellos con su conciencia. Conforme uno se va dando cuenta de que los niveles de explotación que hay, y cómo esa explotación está siendo justificada de manera constante... He estado en la derecha. He estado en la izquierda. Los conozco por dentro. En estos momentos soy muy rojo, ¿pero hay otra alternativa con lo que está pasando? Al tiempo se verá que no hay otra opción.
Usted comenzó en la política prácticamente con Manuel Fraga, ¿dejó algún poso en su pensamiento político?
¡Hombre claro! Me dejó mucha experiencia y el conocer la derecha por dentro.
¿Y Hugo Chaves?
Es un señor al que yo asesoro, mejor dicho a las Fuerzas Armadas de su país, ya que durante un momento hubo un peligro cierto de que los norteamericanos podían intervenir en Venezuela. Y yo asesoraba sobre cómo podían repeler una agresión de ese tipo. Venezuela tiene sus soluciones, y los demás países tienen otras soluciones.
¿A qué se refiere?
Hay cosas interesantes en Venezuela.Por ejemplo el referéndum. Allí puedes elegir una persona, y si a mitad del mandato no convence, la puedes quitar del medio. Aquí no. Hay que esperar al final del mandato, o que se ‘confunda’ y convoque elecciones anticipadas. Hay cosas de Venezuela que se podrían aplicar aquí, pero no todas, naturalmente.
Después de un breve recorrido por la política nacional e internacional, ¿cómo ve los resultados de las elecciones gallegas?
He seguido el tema con cierta constancia. Era evidente que iban a perder. No hicieron nada y estaban en otra bola. Al que viene ahora no le va a ser muy difícil hacerlo mejor, porque los que estaban no hicieron gran cosa. Y esto le va a costar un disgusto grande a Zapatero. El PP tiene las velas hinchadas y probablemente gane las europeas.
Antes de finalizar, quisiera preguntarle por el tema que le trajo a Vigo: ¿Cree que es posible una nueva república?
Es necesaria una nueva tras*ición en España. La primera tuvo sus frutos, pero hubo una marcha atrás cuando se ilegalizaron partidos. Además, es un sistema absurdo que la Jefatura del Estado se herede, por lo que es necesario que al pueblo español se le reconozca el derecho a elegir.
Jorge Verstrynge comenzó su trayectoria política en la extrema derecha francesa. Fue delfín de Manuel Fraga en las primeras épocas del entonces joven partido Alianza Popular. Más tarde perteneció al PSOE, aunque sin ningún cargo político, y posteriormente fue asesor del comunista catalán Francisco Frutos. Más recientemente aconsejó al Ejército Bolivariano de Venezuela.
Después de su periplo por todo el espectro político, ¿cómo se define hoy en día?
Como muy rojo y muy cabreado.
Es normal ver a personas, hay ejemplos a docenas en la vida pública, que empiezan en la izquierda y poco a poco van dirigiéndose a la derecha política. Su caso es el inverso...
Allá ellos con su conciencia. Conforme uno se va dando cuenta de que los niveles de explotación que hay, y cómo esa explotación está siendo justificada de manera constante... He estado en la derecha. He estado en la izquierda. Los conozco por dentro. En estos momentos soy muy rojo, ¿pero hay otra alternativa con lo que está pasando? Al tiempo se verá que no hay otra opción.
Usted comenzó en la política prácticamente con Manuel Fraga, ¿dejó algún poso en su pensamiento político?
¡Hombre claro! Me dejó mucha experiencia y el conocer la derecha por dentro.
¿Y Hugo Chaves?
Es un señor al que yo asesoro, mejor dicho a las Fuerzas Armadas de su país, ya que durante un momento hubo un peligro cierto de que los norteamericanos podían intervenir en Venezuela. Y yo asesoraba sobre cómo podían repeler una agresión de ese tipo. Venezuela tiene sus soluciones, y los demás países tienen otras soluciones.
¿A qué se refiere?
Hay cosas interesantes en Venezuela.Por ejemplo el referéndum. Allí puedes elegir una persona, y si a mitad del mandato no convence, la puedes quitar del medio. Aquí no. Hay que esperar al final del mandato, o que se ‘confunda’ y convoque elecciones anticipadas. Hay cosas de Venezuela que se podrían aplicar aquí, pero no todas, naturalmente.
Después de un breve recorrido por la política nacional e internacional, ¿cómo ve los resultados de las elecciones gallegas?
He seguido el tema con cierta constancia. Era evidente que iban a perder. No hicieron nada y estaban en otra bola. Al que viene ahora no le va a ser muy difícil hacerlo mejor, porque los que estaban no hicieron gran cosa. Y esto le va a costar un disgusto grande a Zapatero. El PP tiene las velas hinchadas y probablemente gane las europeas.
Antes de finalizar, quisiera preguntarle por el tema que le trajo a Vigo: ¿Cree que es posible una nueva república?
Es necesaria una nueva tras*ición en España. La primera tuvo sus frutos, pero hubo una marcha atrás cuando se ilegalizaron partidos. Además, es un sistema absurdo que la Jefatura del Estado se herede, por lo que es necesario que al pueblo español se le reconozca el derecho a elegir.
