Un vendedor de coches alucina cuando un cliente le paga con 13 garrafas llenas de monedas

Chapapote1

Madmaxista
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El hombre abonó 17.000 reales brasileños en monedas pequeñas que llevaron largas horas de recuento​

Un hombre ha pagado con monedas pequeñas parte del precio de un Honda City de segunda mano: ha entregado 17.000 reales brasileños en 13 garrafas
Un hombre ha pagado con monedas pequeñas parte del precio de un Honda City de segunda mano: ha entregado 17.000 reales brasileños en 13 garrafas

El pasado 19 de agosto, los vendedores de un concesionario de coches en la localidad brasilera de São José se quedaron estupefactos cuando un cliente compró uno de sus automóviles abonando parte de la factura en monedas pequeñas. Concretamente, les entregó 17.000 reales brasileños (equivalentes a unos 2.700 euros) en monedas de 5 céntimos y 1 real.

El hombre tras*portó toda esta calderilla dentro de garrafas de agua vacías, que acercó al establecimiento en el maletero de un vehículo. En total, entregó 13 bidones llenos de monedas, que llevaron largas horas recuento a los empleados del concesionario.

Este dinero en efectivo era solo una parte de los 65.000 reales brasileños que costaba el vehículo, un Honda City de segunda mano, matriculado en 2015. El resto del pago lo efectuó de forma electrónica, mediante el sistema Pix.



No es la primera vez que en este medio nos hacemos eco de un caso surrealista de este estilo. En su día, ya hablamos de un ciudadano estadounidense que pagó en centavos los 2.987,45 dólares del impuesto de tras*misión de dos automóviles.

Para llevar las casi 300.000 monedas hasta la oficina local del Departamento de Vehículos a Motor (DMV) necesitó cinco carretillas. El personal, que invirtió casi doce horas en hacer el recuento manual del montante entregado, no pudo negarse a aceptar este insólito pago en efectivo porque una ley de 1965 indica que las monedas de curso legal son “un modo de pago admisible para todas las deudas, gastos públicos e impuestos”.

En nuestro país, el abono que realizó el ciudadano brasileño no podría haberse realizado porque las compras en efectivo no pueden superar los 1.000 euros cuando una de las partes actúa en calidad de empresario o profesional (en este caso es un concesionario). Esta limitación tiene como objetivo prevenir y luchar contra el fraude tributario.


A eso lo llamo lonchafinismo puro y duro.
 
Me parece que en españistán lo máximo de monedas que te pueden aceptar legalmente son 30-40 monedas aprox, lo leí no se donde hace un porrón de años, igual me lo he soñado
 
Que no te puedes negar?
Claro que te puedes negar.... Menudo retraso el director de la concesionaria que no le dijo que se metiera sus monedas en el ojo ciego que se cancela la venta.
 
En España hay un límite para pagar en efectivo y un límite de monedas que se pueden utilizar, concretamente creo que son 50 monedas, si mal no recuerdo.
 
Que no te puedes negar?
Claro que te puedes negar.... Menudo retraso el director de la concesionaria que no le dijo que se metiera sus monedas en el ojo ciego que se cancela la venta.
Al director se la rezuma, que no las va a contar el.

Ah, y mas vale que el empleado pringado que las ha tenido que contar en media hora, que no va a estar ahí toda la mañana perdiendo el tiempo, lo haya hecho bien, que sino la diferencia la paga el mencionado empleado de su bolsillo.
 
Hicimos lo mismo a principios de los 90 en mi clase de instituto cuando nos tocó pagar el cristal roto de una ventana del aula. A modo de protesta por considerar injusto que se nos cargara a nosotros el muerto de un daño que no habíamos hecho.
1200 pesetas exactamente, 40 monedas que tocaba a cada uno de los 30 alumnos. Ahí iban hasta reales y monedas de otros países. Las llevamos a secretaría en un carro y todavía nos estamos riendo de la cara que pusieron.
 
Hicimos lo mismo a principios de los 90 en mi clase de instituto cuando nos tocó pagar el cristal roto de una ventana del aula. A modo de protesta por considerar injusto que se nos cargara a nosotros el muerto de un daño que no habíamos hecho.
1200 pesetas exactamente, 40 monedas que tocaba a cada uno de los 30 alumnos. Ahí iban hasta reales y monedas de otros países. Las llevamos a secretaría en un carro y todavía nos estamos riendo de la cara que pusieron.
¿Solo costó 1200 pesetas, con mano de obra para cambiarlo incluída?

Qué hijos dp, seguro que el cristal se lo repuso el seguro y el colegio se quedó con vuestro dinero.
 
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