Vlad_Empalador
Será en Octubre
Sánchez radicaliza su discurso ante el 23-J: define a PP y Vox como "dos derechas extremas como Trump y Bolsonaro" y carga contra los medios
Se presenta como el líder que puede hacer de muro de contención: "Vale lo mismo el voto de un conductor de autobús que el del presidente de un canal de televisión"
Sánchez radicaliza su discurso ante el 23-J define a PP y Vox como "dos derechas extremas"EL MUNDO (Vídeo) // ALBERTO DI LOLLI (Foto)
La intervención de Sánchez lejos de profundizar en la autocrítica tras el rotundo varapalo sufrido en las urnas, ha sido un ataque frontal al PP, a quien ha tachado reiteradamente de "derecha extrema". Los parlamentarios, pendientes todos de formar o no parte de las listas electorales, han aplaudido sus palabras con fervor como si quien les hablara les hubiera conducido al triunfo.
Según Sánchez, el resultado del 28-M ha supuesto para el PSOE un "serio golpe institucional porque muchos presidentes y alcaldes socialistas se han visto desplazados". Y ha añadido: "Yo no podía seguir como si tal cosa. Por eso tomé la decisión de adelantar las elecciones con mi conciencia, pensando en mis compañeros y compañeras que se han desvivido porque ningún líder puede mirar hacia otro lado cuando los suyos sufren un castigo tan injusto".
"Me duele perder porque las consecuencias inmediatas recaen sobre personas a las que quiero, por eso tenía que dar un paso al frente y asumir los resultados del domingo, sin esconderme", ha asegurado.
"DESMANTELAR LO CONQUISTADO"
La segunda consecuencia de las urnas, en su opinión, será que "donde ayer había un socialista, mañana habrá un popular con uno de Vox, que lo único que pretenden es derogar el sanchismo y destruir y desmantelar todo lo conquistado, todos los avances sociales logrados".
Y ha citado: derogar la subida del SMI, la reforma laboral, suprimir el ingreso mínimo vital, o la ley de fin digna, o suprimir los impuestos a las energéticas y financieras para volver a sus amnistías fiscales, suprimir las becas, imponer de nuevo la segregación en la escuela, recortar el sistema sanitario, acabar con la ley de cambio climático y frenar la industrialización pasando a engrosar la lista de países negacionistas, o congelar de nuevo las pensiones.
Todo esto lo "intuye" Sánchez, que ha incidido en el "complemento" que a toda esta lista "añadirá Vox". Según él, ahora lo que toca es clarificar lo que quieren los españoles: si quieren "un tándem de derechas extremas que copia las proclamas que se han visto en Washington o en Brasil". Es por esto que él pide "un respaldo fuerte y rotundo porque España se juega mucho" para evitar que España "retroceda" y "convierta en un barrizal" la presidencia española de la UE.
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"Ahora toca aclarar las cosas y saber lo que quiere la sociedad". En definitiva, saber si los españoles quieren "a la derecha extrema y a la extrema derecha" o su socialismo, si quieren un presidente de España "al lado de Biden o al lado de Trump y Bolsonaro".
Pedro Sánchez ha advertido de que la próxima campaña estará plagada de suciedad e insultos e incluso ha deslizado comparaciones con la "turba que asaltó el Capitolio" para oponerse al triunfo de Biden sobre Trump. El presidente ha hablado de una "corriente reaccionaria" que recorre Europa y de la que España no es inmune. Y no ha dudado en presentarse como el líder del partido que puede hacer de muro de contención a esta ola "por muy poderosos que sean quienes están detrás porque", ha dicho, "vale lo mismo el voto de un conductor de autobús que el del presidente de un canal de televisión". Sobre los medios ha advertido de que "van a lanzar infundios y traficar con la mentira".
Elecciones 28-M
- MARISA CRUZ
@oruezabala2002
Madrid
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"Me duele perder porque las consecuencias inmediatas recaen sobre personas a las que quiero, por eso tenía que dar un paso al frente y asumir los resultados del domingo, sin esconderme", ha asegurado.
"DESMANTELAR LO CONQUISTADO"
La segunda consecuencia de las urnas, en su opinión, será que "donde ayer había un socialista, mañana habrá un popular con uno de Vox, que lo único que pretenden es derogar el sanchismo y destruir y desmantelar todo lo conquistado, todos los avances sociales logrados".
Y ha citado: derogar la subida del SMI, la reforma laboral, suprimir el ingreso mínimo vital, o la ley de fin digna, o suprimir los impuestos a las energéticas y financieras para volver a sus amnistías fiscales, suprimir las becas, imponer de nuevo la segregación en la escuela, recortar el sistema sanitario, acabar con la ley de cambio climático y frenar la industrialización pasando a engrosar la lista de países negacionistas, o congelar de nuevo las pensiones.
Todo esto lo "intuye" Sánchez, que ha incidido en el "complemento" que a toda esta lista "añadirá Vox". Según él, ahora lo que toca es clarificar lo que quieren los españoles: si quieren "un tándem de derechas extremas que copia las proclamas que se han visto en Washington o en Brasil". Es por esto que él pide "un respaldo fuerte y rotundo porque España se juega mucho" para evitar que España "retroceda" y "convierta en un barrizal" la presidencia española de la UE.
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