Un recluso tras* en Escocia ahora se identifica como un bebé: exige pañales, papillas y ser llevado de la mano por los funcionarios de prisiones

Un conocido malo ha manifestado su deseo de ser identificado como un bebé en la guandoca, con el uso de pañales y comida para bebés.
Solo un mes antes de su salida programada de una prisión escocesa, Daniel Eastwood asesinó a su compañero de celda mediante estrangulamiento con cordones de zapatos y posteriormente fue condenado a cadena perpetua en 2004.
En 2018, catorce años después, Daniel se identificó como mujer e insistió en que se refirieran a él como “Sophie Eastwood”. La petición de Daniel fue considerada y cumplida por el personal de la prisión.
Ahora, el malo de 36 años dice que es un bebé y quiere ser tratado como tal. También exigió que el personal de la prisión le hiciera puré la comida y que le dieran pañales.
El malo ha dicho ahora al director de la guandoca de Polmont que quiere identificarse como un bebé, llevar pañales y que le preparen la comida como una papilla.
Eastwood también ha exigido que los funcionarios de prisiones lo lleven de la mano cuando la escolten fuera de su celda.
Se entiende que los jefes de la prisión están tratando las demandas con seriedad y considerando qué protocolos podrían establecerse en el trato con el prisionero.
A Eastwood ya se le ha proporcionado un muñeco.
Una fuente dijo: “Este prisionero ha sido difícil y manipulador a lo largo de los años, por lo que sigue entre rejas después de 17 años”.
“Decidió que se haría un ‘tras*’ de hombre a mujer, lo que es cada vez más común en las cárceles en estos días”.
“Pero esto es obviamente algo totalmente distinto y el Servicio Penitenciario Escocés no tiene ningún protocolo para tratar con los presos que deciden ser bebés”.
La fuente añadió: “Eastwood es una persona compleja e inteligente, pero es bastante exigente con los recursos de la prisión y disfruta siendo el centro de atención”.
“Es difícil saber si realmente siente una inclinación natural a ser tratado como un bebé o si es solo una especie de búsqueda de atención”.
“Las prisiones modernas están muy compenetradas con los derechos humanos y las implicaciones legales que arrojan, así que se le está prestando la debida atención”.
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Que mundo disparatado nos ha tocado vivir, hace solo un siglo a esta "cosa" le habrían pegado 2 tiros en la parte de atrás y nadie habría derramado una lágrima, un problema menos, ahora como no le sigas el juego a su chorrada te aparecen 4 sojas y 4 pelo jovenlandesados a tocar los huevones.