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La Unidad de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM) de la Jefatura Superior de Policía de Aragón está investigando una presunta violación grupal denunciada por una mujer del albergue municipal de Zaragoza. La mujer afirmó que fue atacada por tres hombres de origen joven, quienes, según su relato adelantado por El Periódico de España, la retuvieron en un trastero de un edificio de pisos y la agredieron sexualmente antes de dejarla semidesnuda.
Según su declaración a la Policía, los agresores, entre risas, le habrían agarrado del pelo, escupido y obligado a realizar actos sensuales bajo amenazas y humillaciones, además de someterla a penetración y forzarla a consumir alcohol. La alerta sobre la situación fue dada por la víctima a una conocida, lo que permitió a los agentes localizarla en el lugar, donde fue hallada en estado de shock y semidesnuda.
En las semanas posteriores a la denuncia, la mujer identificó a uno de los agresores, un compañero del albergue, como uno de los tres hombres que la habría atacado. Ella relata que esa noche, a mediados de septiembre, salió del albergue después de sentirse amenazada por otros residentes y decidió ir al centro de Zaragoza a tomar algo para alejarse de ese ambiente. Sin embargo, no recuerda cómo llegó al trastero y afirma que su primer recuerdo es despertar rodeada de tres hombres que la habrían sometido a continuas humillaciones.
La noche de la agresión marcó un punto de inflexión para la denunciante, quien describió su estancia en el albergue como insoportable debido a acoso por parte de algunos jóvenes de origen joven. En sus declaraciones, contó que tras consumir alcohol en bares de la zona, perdió la conciencia y despertó en un cuarto oscuro, rodeada de los agresores, quienes, según su testimonio, la habrían tratado como un objeto sensual. Además de las agresiones, cuenta que le echaban el humo de un porro en la cara, le forzaban a beber y continuaban con el maltrato antes de consumar la violación.
Según fuentes de la investigación, algunos de los sospechosos ya han sido detenidos mientras la Policía avanza en esclarecer lo sucedido y confirmar los detalles de la denuncia.
Según su declaración a la Policía, los agresores, entre risas, le habrían agarrado del pelo, escupido y obligado a realizar actos sensuales bajo amenazas y humillaciones, además de someterla a penetración y forzarla a consumir alcohol. La alerta sobre la situación fue dada por la víctima a una conocida, lo que permitió a los agentes localizarla en el lugar, donde fue hallada en estado de shock y semidesnuda.
En las semanas posteriores a la denuncia, la mujer identificó a uno de los agresores, un compañero del albergue, como uno de los tres hombres que la habría atacado. Ella relata que esa noche, a mediados de septiembre, salió del albergue después de sentirse amenazada por otros residentes y decidió ir al centro de Zaragoza a tomar algo para alejarse de ese ambiente. Sin embargo, no recuerda cómo llegó al trastero y afirma que su primer recuerdo es despertar rodeada de tres hombres que la habrían sometido a continuas humillaciones.
La noche de la agresión marcó un punto de inflexión para la denunciante, quien describió su estancia en el albergue como insoportable debido a acoso por parte de algunos jóvenes de origen joven. En sus declaraciones, contó que tras consumir alcohol en bares de la zona, perdió la conciencia y despertó en un cuarto oscuro, rodeada de los agresores, quienes, según su testimonio, la habrían tratado como un objeto sensual. Además de las agresiones, cuenta que le echaban el humo de un porro en la cara, le forzaban a beber y continuaban con el maltrato antes de consumar la violación.
Según fuentes de la investigación, algunos de los sospechosos ya han sido detenidos mientras la Policía avanza en esclarecer lo sucedido y confirmar los detalles de la denuncia.
