cucerulo
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Azcón, el del PP, también quiere gobernar en solitario, sólo le ha ofrecido a Vox una vicepresidencia de la cámara y no los quiere en el Gobierno regional. Como en Extremadura, vamos.
El Partido Popular negocia contrarreloj y a varias bandas para poder gobernar Aragón en solitario. La constitución, este viernes, de las Cortes y la elección de los miembros de su Mesa es una pieza clave en la partida de ajedrez que desde el pasado 28-M disputan los populares para asegurar la investidura de Jorge Azcón y la formación de un Ejecutivo en el que no haya presencia de Vox.
La última oferta planteada por Azcón, ganador de las elecciones pero sin mayoría absoluta, pasa por ceder a Vox la vicepresidencia primera del Parlamento aragonés. A cambio, los de Santiago Abascal deberían garantizar al menos la abstención de sus siete diputados en la investidura para la que todavía no hay fecha y aceptar no formar parte del futuro gobierno.
La incógnita respecto a este ofrecimiento seguía abierta este jueves a última hora y todo indicaba que se mantendría el pulso hasta el último minuto, a expensas siempre de la decisión definitiva que imponga la cúpula de Vox en Madrid.
En paralelo, Azcón ha negociado con el PAR (un diputado) y con Teruel Existe (tres representantes). Los populares cuentan con el apoyo del primero y la más que probable abstención de los segundos pero para tener la investidura totalmente garantizada necesitan también al menos de la abstención de Vox.
Para ocupar la presidencia de las Cortes, a los 28 diputados del PP les basta con sumar el voto del PAR. Sólo con esto superarían ya al bloque de la izquierda susceptible de respaldar a un candidato socialista: PSOE, Podemos, Izquierda Unida y CHA suman 28 escaños, los mismos que el PP en solitario. De esta forma, aun cuando Vox optara por votar a un aspirante propio, el candidato popular a presidir la Cámara sería elegido por mayoría simple en segunda vuelta.
Nadie, de hecho, sopesa la hipótesis de que Vox pueda apoyar una candidatura de izquierdas para presidir las Cortes aragonesas. Las dudas sin embargo son muchas respecto a la posibilidad de que la oferta de Azcón al líder de Vox en Aragón, Alejandro Nolasco, de ocupar la vicepresidencia primera del Parlamento sea aceptada como moneda de cambio suficiente y sirva para asegurar la investidura y un gobierno en solitario del PP.
Dos vías para Azcón
Azcón tiene ante sí dos posibles vías para sacar adelante la investidura: pactar con Vox y superar con 35 escaños la mayoría absoluta, lo que le aseguraría ser investido en primera vuelta o bien conseguir el apoyo del PAR y la abstención de Teruel Existe y de Vox; por esta vía podría ser investido en segunda vuelta con 29 votos a favor, frente a 28 en contra del bloque de izquierdas, y diez abstenciones.
En ambos casos Vox se erige como protagonista ineludible. Tal y como anunció en campaña su líder, Santiago Abascal, el partido reclama presencia en los gobiernos que necesiten de sus votos para investir al candidato del PP.
En el caso de Aragón, el ejemplo de lo sucedido en Extremadura planea sobre las negociaciones de manera que nadie se atreve a descartar la hipótesis de que por orden de la dirección nacional los representantes aragoneses de Vox lleven al extremo su reivindicación de entrar en el futuro gobierno de la comunidad y ante una negativa del PP, fuercen la repetición de los comicios.
El PP concede a Vox la presidencia del Parlamento de Aragón y sigue negociando en busca de un gobierno en solitario
El Partido Popular y Vox han alcanzado un acuerdo para la elección este viernes de la Mesa de las Cortes para la XI legislatura. El acuerdo alcanzado se ciñe a la constitución...
www.elmundo.es
El Partido Popular negocia contrarreloj y a varias bandas para poder gobernar Aragón en solitario. La constitución, este viernes, de las Cortes y la elección de los miembros de su Mesa es una pieza clave en la partida de ajedrez que desde el pasado 28-M disputan los populares para asegurar la investidura de Jorge Azcón y la formación de un Ejecutivo en el que no haya presencia de Vox.
La última oferta planteada por Azcón, ganador de las elecciones pero sin mayoría absoluta, pasa por ceder a Vox la vicepresidencia primera del Parlamento aragonés. A cambio, los de Santiago Abascal deberían garantizar al menos la abstención de sus siete diputados en la investidura para la que todavía no hay fecha y aceptar no formar parte del futuro gobierno.
La incógnita respecto a este ofrecimiento seguía abierta este jueves a última hora y todo indicaba que se mantendría el pulso hasta el último minuto, a expensas siempre de la decisión definitiva que imponga la cúpula de Vox en Madrid.
En paralelo, Azcón ha negociado con el PAR (un diputado) y con Teruel Existe (tres representantes). Los populares cuentan con el apoyo del primero y la más que probable abstención de los segundos pero para tener la investidura totalmente garantizada necesitan también al menos de la abstención de Vox.
Para ocupar la presidencia de las Cortes, a los 28 diputados del PP les basta con sumar el voto del PAR. Sólo con esto superarían ya al bloque de la izquierda susceptible de respaldar a un candidato socialista: PSOE, Podemos, Izquierda Unida y CHA suman 28 escaños, los mismos que el PP en solitario. De esta forma, aun cuando Vox optara por votar a un aspirante propio, el candidato popular a presidir la Cámara sería elegido por mayoría simple en segunda vuelta.
Nadie, de hecho, sopesa la hipótesis de que Vox pueda apoyar una candidatura de izquierdas para presidir las Cortes aragonesas. Las dudas sin embargo son muchas respecto a la posibilidad de que la oferta de Azcón al líder de Vox en Aragón, Alejandro Nolasco, de ocupar la vicepresidencia primera del Parlamento sea aceptada como moneda de cambio suficiente y sirva para asegurar la investidura y un gobierno en solitario del PP.
Dos vías para Azcón
Azcón tiene ante sí dos posibles vías para sacar adelante la investidura: pactar con Vox y superar con 35 escaños la mayoría absoluta, lo que le aseguraría ser investido en primera vuelta o bien conseguir el apoyo del PAR y la abstención de Teruel Existe y de Vox; por esta vía podría ser investido en segunda vuelta con 29 votos a favor, frente a 28 en contra del bloque de izquierdas, y diez abstenciones.
En ambos casos Vox se erige como protagonista ineludible. Tal y como anunció en campaña su líder, Santiago Abascal, el partido reclama presencia en los gobiernos que necesiten de sus votos para investir al candidato del PP.
En el caso de Aragón, el ejemplo de lo sucedido en Extremadura planea sobre las negociaciones de manera que nadie se atreve a descartar la hipótesis de que por orden de la dirección nacional los representantes aragoneses de Vox lleven al extremo su reivindicación de entrar en el futuro gobierno de la comunidad y ante una negativa del PP, fuercen la repetición de los comicios.