Todo es mentira: no tenemos hijos

Resumen: En Occidente no se tienen hijos porque los gobernantes no quieren que se tengan.

Las políticas antinatalistas salvajes aplicadas en Occidente no tienen precedentes en la Historia: feminismo cerril, aborto libre y gratuito como método terminal (para indecisas), criminalización del hombre en las relaciones de pareja y estilo de vida individual-hedonista. Los gobernantes han diseñado la vida en Occidente en forma de círculo vicioso, el mismo esquema que las adicciones, incompatible con formar una familia. Ejemplos.

Crímenes pasionales. Existen desde la caverna. Es imposible eliminarlos, porque la «pasión» anula la «razón». El círculo vicioso se crea cambiándolo de nombre («violencia de género» o «machista»), amplificándolo mediante su difusión propagandística y convirtiéndolo en un negocio a base de ayudas y subvenciones.

Infantilización. La vida es una guerra perdida en la que lo único que importa es lo que dejas cuando ya no estás. El círculo vicioso consiste en decirle a la gente que su objetivo es conseguir una quimera: la felicidad. La «felicidad» se equipara con satisfacer tus deseos y caprichos a base de distracciones y fantasías. Así se llega a la vejez desde la juventud sin pasar por la edad adulta.

Estilo de vida. Desde el principio de los tiempos los humanos imitan lo que hacen otros. El círculo vicioso consiste en crear y difundir modelos de vida y comportamiento que no se agotan a sí mismos, como hacer turismo de «pollo sin cabeza», o conseguir una estética que te hace esclavo de tu cuerpo de por vida.

Desde que el humano abandonó la caza y la recolección, el pastor «hace» al rebaño.