Segismunda
Reina de los Trolls
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La prensa española no está cubriendo este enfrentamiento de manera adecuada porque los periodistas carecen de formación en Tesorito Studies. Lo que ha provocado Felipe González, con su guerra abierta contra el sanchismo, es una lucha intergeneracional de papos ¿Y quién combate en la refriega?
Con lo que no cuenta Pedro Sánchez es que la fidelidad a "SU FELIPE" es tan fuerte en las viejas como la fidelidad a "SU PSOE". Hasta el punto en que ambas cosas se funden en una. No puede llegar un guapito de cara a cagarse en sus recuerdos, en su partido, en sus picnics en Rodiezmo y en su perturbador mito erótico (¿Cuántos maridos españoles habrán sido llamados 'Felipe' por error durante el coito?). González solo debe convencer a un escaso 5% de sus mayores groupies para sacar a Sánchez de la Moncloa. Y puede conseguir bastante más. Aunque su número es menor que el de pedristas (ley de vida), conforman un ejército disciplinado capaz de desbaratar la carrera de cualquiera.
España es una NACIÓN COÑERA, aquel que aspire a gobernarla no debe olvidar esto jamás. Enfrentar a los papos ha sido un error garrafal, si Sánchez no encuentra la manera de templar gaitas con Isidoro, deberá despedirse de su segunda legislatura.
[ACTUALIZADO 29/10/2023]
Tras el anuncio de la amnistía, Felipe contraataca. Si Sánchez tiene bien atada su investidura, podrá descansar durante cuatro años. Si, por el motivo que sea, se ve abocado a elecciones, su carrera puede acabar prematuramente.
PAPOS FELIPISTAS: la vieja guardia. Son señoras que recuerdan la España de los noventa como un disfrute continuo con programas de Emilio Aragón y canciones de Anabelén. Hasta que llegó el señor del bigote y les cortó el rollo.
PAPOS PEDRISTAS: de la generación de Elisa Beni y Elvira Lindo para abajo. Son señoras cuya OQUEDAD se comporta como las alcantarillas en la peli Volcano cada vez que Sánchez aparece en pantalla. Las citadas están en el límite generacional que separa este grupo del anterior, pues rondan los 60 años, mientras las felipistas están en torno a los 70 y en adelante.
¿Qué consecuencias tiene para el presidente en funciones esta guerra papicida? Pues podría llevarse por delante su posibilidad de renovar en el cargo. El PSOE tiene actualmente los votos justos para conseguir una investidura echándose en brazos de cuantos partidos regionales existen, no puede desperdiciar ni un escaño. Felipe González no conseguirá desactivar los 3-4 MILLONES DE PAPO-VOTOS que suponen las viejas felipistas, pero basta que enfade a un porcentaje mínimo para que el partido de gobierno pierda varios escaños (pues son un colectivo fiel con el que el soe cuenta).Con lo que no cuenta Pedro Sánchez es que la fidelidad a "SU FELIPE" es tan fuerte en las viejas como la fidelidad a "SU PSOE". Hasta el punto en que ambas cosas se funden en una. No puede llegar un guapito de cara a cagarse en sus recuerdos, en su partido, en sus picnics en Rodiezmo y en su perturbador mito erótico (¿Cuántos maridos españoles habrán sido llamados 'Felipe' por error durante el coito?). González solo debe convencer a un escaso 5% de sus mayores groupies para sacar a Sánchez de la Moncloa. Y puede conseguir bastante más. Aunque su número es menor que el de pedristas (ley de vida), conforman un ejército disciplinado capaz de desbaratar la carrera de cualquiera.
España es una NACIÓN COÑERA, aquel que aspire a gobernarla no debe olvidar esto jamás. Enfrentar a los papos ha sido un error garrafal, si Sánchez no encuentra la manera de templar gaitas con Isidoro, deberá despedirse de su segunda legislatura.
[ACTUALIZADO 29/10/2023]
Tras el anuncio de la amnistía, Felipe contraataca. Si Sánchez tiene bien atada su investidura, podrá descansar durante cuatro años. Si, por el motivo que sea, se ve abocado a elecciones, su carrera puede acabar prematuramente.
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