El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
El parque temático Terra Mítica de Benidorm ha sido otra de las grandes víctimas de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo durante los dos últimos años. La empresa gestora del recinto de ocio perdió 6,05 millones de euros en 2021, en que abrió su parque de forma parcial. Unas pérdidas que se suman a los números gente de izquierdas de 6,14 millones de euros registrados en 2020 en que no tuvo actividad por el cobi19.
Durante el pasado ejercicio el parque temático, controlado por el empresario Georges-Pierre Santa María, propietario también de los parques acuáticos Mundomar y Aqualandia de Benidorm, pudo abrir sus puertas durante la campaña estival, aunque mucho más tarde que otros años, a partir de julio. Además lo hizo de forma parcial, al operar sólo tres de las cinco áreas en que se divide el recinto: las de Iberia, Roma y Las Islas.
Una situación que afectó a sus ingresos, al igual que el hecho del descenso de turistas en la Costa Blanca durante el año pasado respecto a 2019, pese a que el año anterior ni siquiera llegó a abrir sus puertas por la emergencia sanitaria.
La junta de accionistas de la sociedad aprobó sus resultados el pasado 30 de junio y también dio el visto bueno a reducir el capital de la sociedad en 16,71 millones de euros para compensar las pérdidas acumuladas de ejercicios pasados. Según la información publicada por la propia junta, antes de esa reducción el resultado negativo acumulado ascendía a 88,61 millones de euros.
La irrupción de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo ha cortado de forma traumática la mejoría económica del parque temático, que en 2019 había logrado cosechar por primera vez beneficios, con 0,69 millones de euros de resultado neto y una cifra de negocio de 11,5 millones de euros, aunque en parte por los extraordinarios logrados ese año por sus activos inmobiliarios.
Sobrecostes ruinosos
El parque temático de Benidorm, un proyecto personal del que fuera el presidente valenciano del PP Eduardo Zaplana, abrió sus puertas en el verano de 2000 con la propia Generalitat Valenciana y las cajas de ahorros valencianas como principales accionistas junto a varias empresas de la Comunidad Valenciana. Sin embargo, tras la elevada inversión y los sobrecostes, el recinto nunca llegó a ser rentable y en 2010 entró en concurso de acreedores.
De hecho, el proyecto que justificaba su localización en Benidorm por la posibilidad de abrir todo el año, tuvo que renunciar a ello para ahorrar costes ante su falta de rentabilidad.
En 2012 el dueño de Mundomar y Aqualandia adquirió el 71% del parque temático, un porcentaje que ha ido ampliando con las reducciones de capital para compensar pérdidas de los últimos años.
Durante el pasado ejercicio el parque temático, controlado por el empresario Georges-Pierre Santa María, propietario también de los parques acuáticos Mundomar y Aqualandia de Benidorm, pudo abrir sus puertas durante la campaña estival, aunque mucho más tarde que otros años, a partir de julio. Además lo hizo de forma parcial, al operar sólo tres de las cinco áreas en que se divide el recinto: las de Iberia, Roma y Las Islas.
Una situación que afectó a sus ingresos, al igual que el hecho del descenso de turistas en la Costa Blanca durante el año pasado respecto a 2019, pese a que el año anterior ni siquiera llegó a abrir sus puertas por la emergencia sanitaria.
La junta de accionistas de la sociedad aprobó sus resultados el pasado 30 de junio y también dio el visto bueno a reducir el capital de la sociedad en 16,71 millones de euros para compensar las pérdidas acumuladas de ejercicios pasados. Según la información publicada por la propia junta, antes de esa reducción el resultado negativo acumulado ascendía a 88,61 millones de euros.
La irrupción de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo ha cortado de forma traumática la mejoría económica del parque temático, que en 2019 había logrado cosechar por primera vez beneficios, con 0,69 millones de euros de resultado neto y una cifra de negocio de 11,5 millones de euros, aunque en parte por los extraordinarios logrados ese año por sus activos inmobiliarios.
Sobrecostes ruinosos
El parque temático de Benidorm, un proyecto personal del que fuera el presidente valenciano del PP Eduardo Zaplana, abrió sus puertas en el verano de 2000 con la propia Generalitat Valenciana y las cajas de ahorros valencianas como principales accionistas junto a varias empresas de la Comunidad Valenciana. Sin embargo, tras la elevada inversión y los sobrecostes, el recinto nunca llegó a ser rentable y en 2010 entró en concurso de acreedores.
De hecho, el proyecto que justificaba su localización en Benidorm por la posibilidad de abrir todo el año, tuvo que renunciar a ello para ahorrar costes ante su falta de rentabilidad.
En 2012 el dueño de Mundomar y Aqualandia adquirió el 71% del parque temático, un porcentaje que ha ido ampliando con las reducciones de capital para compensar pérdidas de los últimos años.
https://www.eleconomista.es/tras*po...s-un-2021-con-el-parque-abierto-a-medias.html