El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
En su cuarta acepción, la Real Academia de la Lengua lo define como «persona o cosa a la que se atribuyen cualidades o excelencias que no tiene». Terra Mítica fue, en su planteamiento inicial, eso mismo. Un parque que quiso atraer a tres millones de visitantes al año, ser el 'no va más' de Europa, desestacionalizar el turismo en Benidorm… Todo eso se ha ido desinflando a lo largo de dos décadas entre problemas financieros, despidos de trabajadores, deudas con la Generalitat, tres cambios de propiedad o la mala fama por el ya conocido caso judicial vinculado a los primeros tiempos del parque.
Por si fuera poco, se suma ahora una esa época en el 2020 de la que yo le hablo que hizo que en 2020, año de su vigésimo aniversario, el parque no abriera sus puertas. La crisis sanitaria golpea al recinto justo cuando al fin sacaba cabeza a nivel económico, tras un ejercicio, el de 2019, en el que el parque, hoy en manos del Grupo Santa María, logró ganar casi 700.000 euros, según su último balance de cuentas. En los anteriores hubo pérdidas de entre cuatro y cinco millones.
El 13 de marzo del año pasado Terra Mítica hizo pública su decisión de cerrar por «responsabilidad y compromiso con nuestros clientes y empleados». Y así reza el último comunicado oficial de junio de 2020: «Dada la situación actual, el parque no abrirá sus puertas en esta temporada. El complejo destinará los próximos meses a la mejora de sus instalaciones para garantizar la experiencia de la mejor diversión de cara a 2021».
Este año Terra Mítica aspira a resurgir «convertido en un macro resort destinado al ocio de lujo y la diversión de excelencia». Las novedades, anunciaban, «consolidarán al parque temático y a Grand Luxor Hotel como destinos de referencia para el turista nacional e internacional». Viajamos hasta el parque para comprobar la evolución in situ. Siete conos de señalización protegen la entrada al parque. Verja cerrada en la carretera de acceso. «Estamos mejorando nuestras instalaciones», reza un gran cartel. El Hotel Grand Luxor, de cuatro estrellas y anexo al parque, también anuncia su apertura «próximamente», pero sus puertas están también cerradas y el acceso principal, balizado. «No sabemos aún cuándo se abrirá de nuevo el parque», nos cuenta un vigilante de seguridad. Telefoneamos a Terra Mítica y no se nos permite el acceso. ¿Cuándo abren? «No hacemos ninguna comunicación hasta verano», nos aclara la interlocutora.
Nueva zona residencial
Cerca de allí un hormiguero de obreros se afanan en la construcción de las Villas Grand Luxor, un nuevo proyecto constructivo del resort residencial vinculado al parque que pretende arrancar en el estío «si la esa época en el 2020 de la que yo le hablo lo permite», aclara un trabajador. El nuevo residencial ya se publicita pese a estar en obras, pero no hay posibilidad de reservar hasta el 2 de julio. En el Hotel Grand Luxor la disponibilidad se abre al día siguente. Todo hace pensar que Terra Mítica y su entorno despertarán en verano, pero ningún responsable ofrece una fecha.
I. Arlandis
¿Qué sucede en el plano laboral? Según las cuentas anuales de la empresa, durante su último año de actividad, 2019, se emplearon a 88 personas fijas y 60 de manera temporal. Al término del ejercicio, Terra Mítica citaba una plantilla fija de 24 hombres y 7 mujeres. A mucha distancia de los 2.000 con los que el parque se inauguró en el verano del arranque del milenio.Silvia Íñiguez, de Comisiones Obreras, es la sindicalista de referencia en la Federación de Servicios a la Ciudadanía en Benidorm. «Actualmente los trabajadores y las trabajadoras están afectados por un ERTE de fuerza mayor en el que los sindicatos no participamos y disponemos de poca información sobre cómo se gestionó». Hasta el miércoles, ahonda la portavoz laboral, «no se había llevado a cabo el llamamiento anual para retomar la actividad en el parque». Superado el ambicioso plan inicial de abrir todo el año, la instalación lleva años con aperturas de temporada realistas con la demanda de ocio, entre marzo y noviembre.
En su balance de las dos décadas del parque, Íñigez recuerda «la destrucción de empleo de 142 trabajadores por un ERE en 2011». Según la sindicalista, antes del cambio del sector público al sector privado, existía un comité de empresa que funcionaba con normalidad. Después no llegó a renovarse nunca». Tras la adjudicación de la explotación del parque temático, «los derechos laborales se fueron diluyendo, resultando muy difícil, más bien imposible, realizar actividad sindical». A su entender, «se ha ido instalando el miedo en la plantilla y el personal no quiere tomar ninguna iniciativa en ese sentido».
Antonio Rodes es director de la Sociedad de Proyectos Temáticos de la Comunitat, dependiente del Consell. Así resume la relación, ya extinta, entre el parque y la Generalitat. El gobierno valenciano «fue accionistas entre 1998 y junio de 2012, cuando pasó a ser propiedad privada». En ese tiempo «su participación osciló entre el 14 y el 33% del capital». A lo largo de esos 14 años la Generalitat invirtió 255 millones de euros, además de préstamos por valor de 44 que fueron retornados después.
Pérdidas millonarias
¿Qué ha quedado de todo ese dinero? «Cuando se produjo la privatización del parque en 2012, se vendió la parcela de Terra Mítica por un euro», recuerda Rodes. La sociedad autonómica se quedó con unos activos consistentes en diez terrenos. «Algunos ya estaban ocupados con las edificaciones turísticas de Asia Garden, Villa Aitana y Terra Natura», describe el director general de Proyectos Temáticos. En 2017 fueron tasados nueve de los terrenos. El restante, de 750.000 metros cuadrados, sigue reservado por la Generalitat por si en un futuro es de utilidad. Las tasación arrojó un valor conjunto de 26 millones de euros. Las nueve se sacaron a subasta y, hasta la fecha, se han vendido siete, entre ellos los ya edificados. Eso ha permitido a la Comunitat recuperar 22 millones de euros. Resultado final: tras todas las operaciones, las arcas públicas han perdido 233 millones de los 255 invertidos inicialmente en el macroproyecto. Y a la Comunitat le quedan tres parcelas vacías.
Fechas destacadas
2000
El 27 de julio Terra Mítica inicia su andadura. Por aquel entonces había 2.000 empleados y buscaba atraer a tres millones de visitantes al año.2004 Ante las dificultades económicas y las deudas, se decide abrir el parque sólo de marzo a noviembre. Llega la suspensión de pagos.
2012
Tras un 2011 nefasto en el que un ERE destruye 142 empleos, el parque pasa a manos privadas y a su actual gestor, el grupo Santa María.
2019
El Supremo confirma cinco años de prisión para dos exdirectivos del parque vinculados a la trama de facturas falsas para defraudar a Hacienda.2020Tras años de pérdidas, el parque contabiliza al fin ganancias en 2019. Pero irrumpe la esa época en el 2020 de la que yo le hablo y no abre. Nuevo bache en la montaña rusa.
2021
La empresa anuncia el regreso del parque, pero aún sin fecha. Mientras, otros recinto temáticos españoles ya arrancan o lo harán en breve plazo.
¿Qué pinchó en Terra Mítica? Rodes, empresario y licenciado en Historia, lanza esta reflexión: «La inversión en el parque es un hito de un modelo económico del PP que se basaba en grandes eventos e inversiones temáticas con la esperanza de lograr un desarrollo económico sostenido». Se pretendía, destaca, «desestacionalizar el negocio turístico».
A partir de ahí, ahonda, «Terra Mítica es la historia de un fracaso. Hubo un problema de concepto. No se consiguieron visitantes más allá del verano, como era el propósito inicial». El parque, opina, ha sufrido «una mala gestión y muchos cambios de dueños: primero la Sociedad Terra Mítica junto con la Generalitat, luego Paramount y hoy el Grupo Santa María». Entre 1996 y 2004, lamenta Rodes, «no había contabilidad analítica», lo que derivó en «un agujero millonario».
I. ARLANDIS
Preguntado por el futuro del parque, el responsable autonómico desea «fervientemente» que prospere. «Está en manos de un empresario con gran experiencia en el sector que ha tenido que redimensionar a la baja el proyecto con reducción de gastos y un periodo de explotación de cuatro meses desde hace ya varios años». Si en algún momento Terra Mítica alcanza el éxito «desde luego no será con las expectativas iniciales». Antonio Pérez, alcalde popular de Benidorm, no comparte la misma visión. Terra Mítica «ha cumplido los objetivos con los que nació». Desde su punto de vista, hubo poca paciencia y estos grandes proyectos necesitan desarrollo». El parque «sufrió muchos avatares por el hecho de estar en Benidorm, e incomprensión de la clase política». En otros territorios «se ha apoyado más estos proyectos, y sin fisuras de gobiernos autonómicos o de políticos, pues hay que dejarlos crecer». Para Pérez, «no fue desmesurado y en su tiempo nació con mucha visión de futuro».Y mientras Terra Mítica sigue cerrada, otros grandes parques temáticos de España ya tienen fecha de reapertura. El parque Warner anunciaba para ayer mismo su regreso. Port Aventura retrasa su vuelta este año al 23 de abril y Isla Mágica, en Sevilla, marca el 29 de mayo como nuevo punto de arranque.
www.lasprovincias.es
Por si fuera poco, se suma ahora una esa época en el 2020 de la que yo le hablo que hizo que en 2020, año de su vigésimo aniversario, el parque no abriera sus puertas. La crisis sanitaria golpea al recinto justo cuando al fin sacaba cabeza a nivel económico, tras un ejercicio, el de 2019, en el que el parque, hoy en manos del Grupo Santa María, logró ganar casi 700.000 euros, según su último balance de cuentas. En los anteriores hubo pérdidas de entre cuatro y cinco millones.
El 13 de marzo del año pasado Terra Mítica hizo pública su decisión de cerrar por «responsabilidad y compromiso con nuestros clientes y empleados». Y así reza el último comunicado oficial de junio de 2020: «Dada la situación actual, el parque no abrirá sus puertas en esta temporada. El complejo destinará los próximos meses a la mejora de sus instalaciones para garantizar la experiencia de la mejor diversión de cara a 2021».
Este año Terra Mítica aspira a resurgir «convertido en un macro resort destinado al ocio de lujo y la diversión de excelencia». Las novedades, anunciaban, «consolidarán al parque temático y a Grand Luxor Hotel como destinos de referencia para el turista nacional e internacional». Viajamos hasta el parque para comprobar la evolución in situ. Siete conos de señalización protegen la entrada al parque. Verja cerrada en la carretera de acceso. «Estamos mejorando nuestras instalaciones», reza un gran cartel. El Hotel Grand Luxor, de cuatro estrellas y anexo al parque, también anuncia su apertura «próximamente», pero sus puertas están también cerradas y el acceso principal, balizado. «No sabemos aún cuándo se abrirá de nuevo el parque», nos cuenta un vigilante de seguridad. Telefoneamos a Terra Mítica y no se nos permite el acceso. ¿Cuándo abren? «No hacemos ninguna comunicación hasta verano», nos aclara la interlocutora.
Nueva zona residencial
Cerca de allí un hormiguero de obreros se afanan en la construcción de las Villas Grand Luxor, un nuevo proyecto constructivo del resort residencial vinculado al parque que pretende arrancar en el estío «si la esa época en el 2020 de la que yo le hablo lo permite», aclara un trabajador. El nuevo residencial ya se publicita pese a estar en obras, pero no hay posibilidad de reservar hasta el 2 de julio. En el Hotel Grand Luxor la disponibilidad se abre al día siguente. Todo hace pensar que Terra Mítica y su entorno despertarán en verano, pero ningún responsable ofrece una fecha.
I. Arlandis
¿Qué sucede en el plano laboral? Según las cuentas anuales de la empresa, durante su último año de actividad, 2019, se emplearon a 88 personas fijas y 60 de manera temporal. Al término del ejercicio, Terra Mítica citaba una plantilla fija de 24 hombres y 7 mujeres. A mucha distancia de los 2.000 con los que el parque se inauguró en el verano del arranque del milenio.Silvia Íñiguez, de Comisiones Obreras, es la sindicalista de referencia en la Federación de Servicios a la Ciudadanía en Benidorm. «Actualmente los trabajadores y las trabajadoras están afectados por un ERTE de fuerza mayor en el que los sindicatos no participamos y disponemos de poca información sobre cómo se gestionó». Hasta el miércoles, ahonda la portavoz laboral, «no se había llevado a cabo el llamamiento anual para retomar la actividad en el parque». Superado el ambicioso plan inicial de abrir todo el año, la instalación lleva años con aperturas de temporada realistas con la demanda de ocio, entre marzo y noviembre.
En su balance de las dos décadas del parque, Íñigez recuerda «la destrucción de empleo de 142 trabajadores por un ERE en 2011». Según la sindicalista, antes del cambio del sector público al sector privado, existía un comité de empresa que funcionaba con normalidad. Después no llegó a renovarse nunca». Tras la adjudicación de la explotación del parque temático, «los derechos laborales se fueron diluyendo, resultando muy difícil, más bien imposible, realizar actividad sindical». A su entender, «se ha ido instalando el miedo en la plantilla y el personal no quiere tomar ninguna iniciativa en ese sentido».
Antonio Rodes es director de la Sociedad de Proyectos Temáticos de la Comunitat, dependiente del Consell. Así resume la relación, ya extinta, entre el parque y la Generalitat. El gobierno valenciano «fue accionistas entre 1998 y junio de 2012, cuando pasó a ser propiedad privada». En ese tiempo «su participación osciló entre el 14 y el 33% del capital». A lo largo de esos 14 años la Generalitat invirtió 255 millones de euros, además de préstamos por valor de 44 que fueron retornados después.
Pérdidas millonarias
¿Qué ha quedado de todo ese dinero? «Cuando se produjo la privatización del parque en 2012, se vendió la parcela de Terra Mítica por un euro», recuerda Rodes. La sociedad autonómica se quedó con unos activos consistentes en diez terrenos. «Algunos ya estaban ocupados con las edificaciones turísticas de Asia Garden, Villa Aitana y Terra Natura», describe el director general de Proyectos Temáticos. En 2017 fueron tasados nueve de los terrenos. El restante, de 750.000 metros cuadrados, sigue reservado por la Generalitat por si en un futuro es de utilidad. Las tasación arrojó un valor conjunto de 26 millones de euros. Las nueve se sacaron a subasta y, hasta la fecha, se han vendido siete, entre ellos los ya edificados. Eso ha permitido a la Comunitat recuperar 22 millones de euros. Resultado final: tras todas las operaciones, las arcas públicas han perdido 233 millones de los 255 invertidos inicialmente en el macroproyecto. Y a la Comunitat le quedan tres parcelas vacías.
Fechas destacadas
2000
El 27 de julio Terra Mítica inicia su andadura. Por aquel entonces había 2.000 empleados y buscaba atraer a tres millones de visitantes al año.2004 Ante las dificultades económicas y las deudas, se decide abrir el parque sólo de marzo a noviembre. Llega la suspensión de pagos.
2012
Tras un 2011 nefasto en el que un ERE destruye 142 empleos, el parque pasa a manos privadas y a su actual gestor, el grupo Santa María.
2019
El Supremo confirma cinco años de prisión para dos exdirectivos del parque vinculados a la trama de facturas falsas para defraudar a Hacienda.2020Tras años de pérdidas, el parque contabiliza al fin ganancias en 2019. Pero irrumpe la esa época en el 2020 de la que yo le hablo y no abre. Nuevo bache en la montaña rusa.
2021
La empresa anuncia el regreso del parque, pero aún sin fecha. Mientras, otros recinto temáticos españoles ya arrancan o lo harán en breve plazo.
¿Qué pinchó en Terra Mítica? Rodes, empresario y licenciado en Historia, lanza esta reflexión: «La inversión en el parque es un hito de un modelo económico del PP que se basaba en grandes eventos e inversiones temáticas con la esperanza de lograr un desarrollo económico sostenido». Se pretendía, destaca, «desestacionalizar el negocio turístico».
A partir de ahí, ahonda, «Terra Mítica es la historia de un fracaso. Hubo un problema de concepto. No se consiguieron visitantes más allá del verano, como era el propósito inicial». El parque, opina, ha sufrido «una mala gestión y muchos cambios de dueños: primero la Sociedad Terra Mítica junto con la Generalitat, luego Paramount y hoy el Grupo Santa María». Entre 1996 y 2004, lamenta Rodes, «no había contabilidad analítica», lo que derivó en «un agujero millonario».
I. ARLANDIS
Preguntado por el futuro del parque, el responsable autonómico desea «fervientemente» que prospere. «Está en manos de un empresario con gran experiencia en el sector que ha tenido que redimensionar a la baja el proyecto con reducción de gastos y un periodo de explotación de cuatro meses desde hace ya varios años». Si en algún momento Terra Mítica alcanza el éxito «desde luego no será con las expectativas iniciales». Antonio Pérez, alcalde popular de Benidorm, no comparte la misma visión. Terra Mítica «ha cumplido los objetivos con los que nació». Desde su punto de vista, hubo poca paciencia y estos grandes proyectos necesitan desarrollo». El parque «sufrió muchos avatares por el hecho de estar en Benidorm, e incomprensión de la clase política». En otros territorios «se ha apoyado más estos proyectos, y sin fisuras de gobiernos autonómicos o de políticos, pues hay que dejarlos crecer». Para Pérez, «no fue desmesurado y en su tiempo nació con mucha visión de futuro».Y mientras Terra Mítica sigue cerrada, otros grandes parques temáticos de España ya tienen fecha de reapertura. El parque Warner anunciaba para ayer mismo su regreso. Port Aventura retrasa su vuelta este año al 23 de abril y Isla Mágica, en Sevilla, marca el 29 de mayo como nuevo punto de arranque.
Terra Mítica, 20 años en la montaña rusa
Incertidumbre. El parque temático lleva ya más de un año cerrado por la esa época en el 2020 de la que yo le hablo y con sus trabajadores en ERTE. En 2020 cumplió dos décadas en las que el sueño inicial
www.lasprovincias.es
