«Si quieres que te quite la denuncia por violencia de género me pagas 2.000 euros. Ya sé que es una denuncia falsa y que no me pegaste, pero a ti no te creerá nadie y te condenarán». La autora de estos mensajes fue condenada ayer por mentir ante la Guardia Civil cuando acusó a su expareja de haberla agredido en su domicilio de Fornalutx. El hombre fue detenido y se abrió un proceso judicial contra él por violencia machista, pero gracias a la conversación de WhatsApp en la que meses después la mujer admitía la falsedad de sus acusaciones y le reclama dinero salió absuelto. Ella se declaró autora de un delito de denuncia falsa, con una atenuante porque sufría un trastorno por el consumo de alcohol, y aceptó pagar una multa de 1.800 euros. Fue condenada en el acto.
Los hechos ocurrieron 16 de julio de 2022 en el domicilio de la acusada, en Fornalutx. La mujer llamó a la Guardia Civil y afirmó que su exnovio le había propinado un bofetón durante una discusión. Añadió que no era la primera agresión que sufría, pero que nunca había denunciado los malos tratos. Los agentes arrestaron al hombre, que pasó una noche en los calabozos y fue puesto a disposición judicial al día siguiente. La denuncia propició que un juzgado de violencia sobre la mujer abriera diligencias
contra su expareja.
Tres meses después, a finales de octubre, la denunciante contactó con el hombre a través de WhatsApp. En la conversación ella reconoció abiertamente que había mentido ante la Guardia Civil y que los hechos no eran ciertos. Al mismo tiempo, exigía a su exnovio que le pagara 2.000 euros para retirar la denuncia.
El hombre aportó estos mensajes en el proceso judicial por violencia machista. La prueba tuvo un doble efecto: acabó siendo exculpado de la agresión y propició que la Fiscalía actuara contra la mujer por sus mentiras.
Los hechos ocurrieron 16 de julio de 2022 en el domicilio de la acusada, en Fornalutx. La mujer llamó a la Guardia Civil y afirmó que su exnovio le había propinado un bofetón durante una discusión. Añadió que no era la primera agresión que sufría, pero que nunca había denunciado los malos tratos. Los agentes arrestaron al hombre, que pasó una noche en los calabozos y fue puesto a disposición judicial al día siguiente. La denuncia propició que un juzgado de violencia sobre la mujer abriera diligencias
contra su expareja.
Tres meses después, a finales de octubre, la denunciante contactó con el hombre a través de WhatsApp. En la conversación ella reconoció abiertamente que había mentido ante la Guardia Civil y que los hechos no eran ciertos. Al mismo tiempo, exigía a su exnovio que le pagara 2.000 euros para retirar la denuncia.
El hombre aportó estos mensajes en el proceso judicial por violencia machista. La prueba tuvo un doble efecto: acabó siendo exculpado de la agresión y propició que la Fiscalía actuara contra la mujer por sus mentiras.
Condenada por presentar una denuncia falsa contra su exnovio y exigirle 2.000 euros para retirarla
La acusada declaró a la Guardia Civil que el hombre le había dado un bofetón, pero admitió la falsedad cuando le reclamó el dinero
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