megamaxi
Madmaxista
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bueno, lo cierto es que en Israel hay refugios practicamente en cada edificio y las alarmas sonaron con antelacion. Podría no haber victimas o no haber muchas
haaretz no habla de victimas y suele ser un medio fiable (aparte de que es frontalmente opuesto a Bibi Netanyahu)
Después de casi un año de combates, Israel se vio envuelta en una guerra regional a partir de la tarde del martes. Tras los acontecimientos de las últimas dos semanas entre Israel y Hezbolá, Irán se ha introducido en el corazón del conflicto lanzando un ataque masivo y sin precedentes con misiles sobre suelo israelí. Por consiguiente, se espera una feroz represalia israelí.
Sorprendentemente, el ataque iraní no causó víctimas graves, aunque muchas casas en el centro del país resultaron dañadas por la metralla, algunas de ellas causada por misiles interceptores. Después de poco más de una hora, el Comando del Frente Interior autorizó a los civiles a abandonar sus espacios protegidos.
La evaluación inicial es que Irán lanzó alrededor de 180 misiles balísticos contra Israel, la mayoría de los cuales fueron interceptados o cayeron en áreas abiertas. Eso es aproximadamente la mitad del número de proyectiles que Irán disparó en su ataque de abril, pero esta vez la proporción de misiles balísticos fue mayor y, como resultado, también lo fueron los daños causados.
Irán presumiblemente analizó los resultados del ataque anterior y aprendió lecciones de él. Sin embargo, no logró penetrar eficazmente las defensas aéreas regionales israelíes.
Los israelíes, especialmente los que viven en el centro del país, nunca han sufrido un ataque de esta magnitud. Sin embargo, los civiles demostraron un alto nivel de disciplina personal, mientras que la fuerza aérea y el sistema de defensa aérea repelieron con aplomo el ataque, con la ayuda de Estados Unidos. El ataque debía tener como objetivo varias instalaciones militares y de seguridad, incluidas bases de la fuerza aérea, pero también pretendía alcanzar zonas civiles y causar muertes y aterrorizar a la población.
La última escalada pone a todas las partes en el conflicto en una situación completamente diferente, en la que la guerra de Israel con Hamás e incluso con Hezbolá quedan relegadas a un segundo plano después del conflicto israelí-iraní.
....
Sobre este tema, vale la pena recordar la advertencia que el periodista Thomas Friedman hizo en su columna del New York Times hace aproximadamente un mes. Friedman dijo que la administración Biden teme que Netanyahu esté tratando de arrastrarlo a una guerra directa con Irán que incluiría ataques a sus instalaciones nucleares y, en el proceso, también afectaría el resultado de las elecciones de noviembre.
Netanyahu, no hace falta decirlo, no está exactamente rezando por una victoria de la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris. Estados Unidos ayudará a Israel ahora debido tanto a su compromiso de principio con Israel como a su reconocimiento de la importancia estratégica de Israel para los intereses estadounidenses. Pero Biden, Harris y sus asesores seguirán desconfiando.
El regreso de la "conmoción y el pavor"
Veinticuatro años después de abandonar el Líbano, aparentemente para siempre, y 18 años después de regresar para una breve y fallida aventura, las Fuerzas de Defensa de Israel están regresando al sur del Líbano. El lunes por la noche, las tropas entraron en lo que se describió esta vez como una operación enfocada y limitada en el tiempo, que en este momento se está dirigiendo a las afueras de las aldeas fiel a la religión del amoras chiítas y al terreno denso que está relativamente cerca de la frontera con Israel.
El Estado Mayor de las FDI y el liderazgo político israelí esperan que la intensa actividad militar allí, durante algunas semanas, encuentre una resistencia más débil de lo que generalmente se piensa, dados los graves golpes que Hezbolá sufrió en los ataques aéreos y de inteligencia durante las últimas dos semanas.
Los movimientos sobre el terreno tienen la intención de
haaretz no habla de victimas y suele ser un medio fiable (aparte de que es frontalmente opuesto a Bibi Netanyahu)
Después de casi un año de combates, Israel se vio envuelta en una guerra regional a partir de la tarde del martes. Tras los acontecimientos de las últimas dos semanas entre Israel y Hezbolá, Irán se ha introducido en el corazón del conflicto lanzando un ataque masivo y sin precedentes con misiles sobre suelo israelí. Por consiguiente, se espera una feroz represalia israelí.
Sorprendentemente, el ataque iraní no causó víctimas graves, aunque muchas casas en el centro del país resultaron dañadas por la metralla, algunas de ellas causada por misiles interceptores. Después de poco más de una hora, el Comando del Frente Interior autorizó a los civiles a abandonar sus espacios protegidos.
La evaluación inicial es que Irán lanzó alrededor de 180 misiles balísticos contra Israel, la mayoría de los cuales fueron interceptados o cayeron en áreas abiertas. Eso es aproximadamente la mitad del número de proyectiles que Irán disparó en su ataque de abril, pero esta vez la proporción de misiles balísticos fue mayor y, como resultado, también lo fueron los daños causados.
Irán presumiblemente analizó los resultados del ataque anterior y aprendió lecciones de él. Sin embargo, no logró penetrar eficazmente las defensas aéreas regionales israelíes.
Los israelíes, especialmente los que viven en el centro del país, nunca han sufrido un ataque de esta magnitud. Sin embargo, los civiles demostraron un alto nivel de disciplina personal, mientras que la fuerza aérea y el sistema de defensa aérea repelieron con aplomo el ataque, con la ayuda de Estados Unidos. El ataque debía tener como objetivo varias instalaciones militares y de seguridad, incluidas bases de la fuerza aérea, pero también pretendía alcanzar zonas civiles y causar muertes y aterrorizar a la población.
La última escalada pone a todas las partes en el conflicto en una situación completamente diferente, en la que la guerra de Israel con Hamás e incluso con Hezbolá quedan relegadas a un segundo plano después del conflicto israelí-iraní.
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Sobre este tema, vale la pena recordar la advertencia que el periodista Thomas Friedman hizo en su columna del New York Times hace aproximadamente un mes. Friedman dijo que la administración Biden teme que Netanyahu esté tratando de arrastrarlo a una guerra directa con Irán que incluiría ataques a sus instalaciones nucleares y, en el proceso, también afectaría el resultado de las elecciones de noviembre.
Netanyahu, no hace falta decirlo, no está exactamente rezando por una victoria de la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris. Estados Unidos ayudará a Israel ahora debido tanto a su compromiso de principio con Israel como a su reconocimiento de la importancia estratégica de Israel para los intereses estadounidenses. Pero Biden, Harris y sus asesores seguirán desconfiando.
El regreso de la "conmoción y el pavor"
Veinticuatro años después de abandonar el Líbano, aparentemente para siempre, y 18 años después de regresar para una breve y fallida aventura, las Fuerzas de Defensa de Israel están regresando al sur del Líbano. El lunes por la noche, las tropas entraron en lo que se describió esta vez como una operación enfocada y limitada en el tiempo, que en este momento se está dirigiendo a las afueras de las aldeas fiel a la religión del amoras chiítas y al terreno denso que está relativamente cerca de la frontera con Israel.
El Estado Mayor de las FDI y el liderazgo político israelí esperan que la intensa actividad militar allí, durante algunas semanas, encuentre una resistencia más débil de lo que generalmente se piensa, dados los graves golpes que Hezbolá sufrió en los ataques aéreos y de inteligencia durante las últimas dos semanas.
Los movimientos sobre el terreno tienen la intención de
