SpongeBob SquarePants
Madmaxista
Quizás sea un poco extremo el colega pero bueno, lonchafinista no podemos negar que lo sea...
¿Se puede vivir sin un solo euro? | Yorokobu
Daniel Suelo asegura que lleva doce años sin un solo céntimo en los bolsillos (a excepción de unos meses en 2001). No tiene deuda ni crédito. No paga impuestos. No cotiza, ni tiene un seguro médico. Su residencia más habitual son las cuevas en el desierto de Utah, Estados Unidos. Allí sobrevive comiendo raíces, rebuscando en los desechos de los contenedores o aceptando la caridad de amigos y extraños, que le ofrecen su ayuda en forma de especies.
En el año 2000, en el que sufría una profunda depresión, decidió dejar sus ahorros en una cabina telefónica, embarcarse en un viaje a Alaska para encontrarse a sí mismo y convertirse en una especie de asceta alérgico al dinero.
Suelo se enorgullece de permanecer ajeno al Estado y a cualquier institución, de las que dice no aceptar ninguna ayuda. De hecho, prácticamente se mantiene al margen de la sociedad. Solo hace esporádicas visitas a una biblioteca pública de Utah –con uso de ordenadores e internet gratuito- en donde actualiza su blog Living Without Money.
En él arremete contra el dinero, las tarjetas de crédito y el capitalismo en general: “No veo el dinero como algo malo o bueno, ¿cómo una ilusión puede ser mala o buena?”, escribe en su página principal, “pero tampoco veo la heroína como algo malo a bueno, ¿y qué es más adictivo y debilitante, el dinero o la heroína?”.
En tiempos de crisis, muchos han visto en el lema de Suelo “un mundo sin dinero-un mundo libre-un mundo sin precio”, la enseñanza de un gurú. Algunos como Mark Boyle, un escritor que vive en Bath, en el suroeste de Inglaterra, han seguido su ejemplo. Incluso en Alemania, una pareja de veinteañeros vive en las afueras de Berlín con su bebé cambiando trabajo por alojamiento y alimentándose de los desechos de supermercados y restaurantes. Otros, sin embargo, como una señora que comentó en su blog (de Suelo) que ella pagaba los impuestos para que él utilizara la biblioteca pública, creen que simplemente es un aprovechado.
Mientras vaga por el país o medita en su cueva, Suelo parece mantenerse indiferente a esa polémica. En su blog ha escrito que para él el dinero representaba lo pasado (deuda) y lo futuro (crédito) y que no encontraba nada real en lo que pudiera creer, por lo que tomó una decisión personal, en su opinión, honesta y libre. Pero de su actitud subyacen varias preguntas: ¿Podría Suelo sobrevivir en un mundo en el que todos tomaran su misma decisión? ¿Su estilo de vida no depende de que otras personas produzcan y gasten su dinero en el alimento que después le donan?
Él se defiende diciendo que las golondrinas en los áticos no necesitan dinero para vivir. Ni las palomas que anidan en los grandes rascacielos de los bancos. ¿Podemos tener el mismo estilo de vida que las aves? ¿Es Suelo un hombre revolucionario con una creencia firme o un vagabundo con la inteligencia suficiente para conceptualizar el vivir de los demás? ¿Se puede vivir realmente sin un euro en el bolsillo?
¿Se puede vivir sin un solo euro? | Yorokobu
Daniel Suelo asegura que lleva doce años sin un solo céntimo en los bolsillos (a excepción de unos meses en 2001). No tiene deuda ni crédito. No paga impuestos. No cotiza, ni tiene un seguro médico. Su residencia más habitual son las cuevas en el desierto de Utah, Estados Unidos. Allí sobrevive comiendo raíces, rebuscando en los desechos de los contenedores o aceptando la caridad de amigos y extraños, que le ofrecen su ayuda en forma de especies.
En el año 2000, en el que sufría una profunda depresión, decidió dejar sus ahorros en una cabina telefónica, embarcarse en un viaje a Alaska para encontrarse a sí mismo y convertirse en una especie de asceta alérgico al dinero.
Suelo se enorgullece de permanecer ajeno al Estado y a cualquier institución, de las que dice no aceptar ninguna ayuda. De hecho, prácticamente se mantiene al margen de la sociedad. Solo hace esporádicas visitas a una biblioteca pública de Utah –con uso de ordenadores e internet gratuito- en donde actualiza su blog Living Without Money.
En él arremete contra el dinero, las tarjetas de crédito y el capitalismo en general: “No veo el dinero como algo malo o bueno, ¿cómo una ilusión puede ser mala o buena?”, escribe en su página principal, “pero tampoco veo la heroína como algo malo a bueno, ¿y qué es más adictivo y debilitante, el dinero o la heroína?”.
En tiempos de crisis, muchos han visto en el lema de Suelo “un mundo sin dinero-un mundo libre-un mundo sin precio”, la enseñanza de un gurú. Algunos como Mark Boyle, un escritor que vive en Bath, en el suroeste de Inglaterra, han seguido su ejemplo. Incluso en Alemania, una pareja de veinteañeros vive en las afueras de Berlín con su bebé cambiando trabajo por alojamiento y alimentándose de los desechos de supermercados y restaurantes. Otros, sin embargo, como una señora que comentó en su blog (de Suelo) que ella pagaba los impuestos para que él utilizara la biblioteca pública, creen que simplemente es un aprovechado.
Mientras vaga por el país o medita en su cueva, Suelo parece mantenerse indiferente a esa polémica. En su blog ha escrito que para él el dinero representaba lo pasado (deuda) y lo futuro (crédito) y que no encontraba nada real en lo que pudiera creer, por lo que tomó una decisión personal, en su opinión, honesta y libre. Pero de su actitud subyacen varias preguntas: ¿Podría Suelo sobrevivir en un mundo en el que todos tomaran su misma decisión? ¿Su estilo de vida no depende de que otras personas produzcan y gasten su dinero en el alimento que después le donan?
Él se defiende diciendo que las golondrinas en los áticos no necesitan dinero para vivir. Ni las palomas que anidan en los grandes rascacielos de los bancos. ¿Podemos tener el mismo estilo de vida que las aves? ¿Es Suelo un hombre revolucionario con una creencia firme o un vagabundo con la inteligencia suficiente para conceptualizar el vivir de los demás? ¿Se puede vivir realmente sin un euro en el bolsillo?