Asurbanipal
Será en Octubre
Sánchez Gordillo, a por su décimo mandato
Algo tendrá el agua cuando la bendicen y algo tendrán los alcaldes cuando los eligen. O mejor dicho, cuando los reeligen. O mejor dicho aún: cuando los reeligen no una ni dos ni tres, sino hasta ¡diez veces seguidas!
Juan Manuel Sánchez Gordillo, líder nacional de la Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT) y alcalde de Marinaleda (Sevilla, 2.800 habitantes), es el único primer edil de Andalucía que en las elecciones municipales de este domingo, 24 de mayo, vuelve a aspirar a renovar el puesto por décima vez consecutiva, toda vez que ostenta el cargo desde 1979.
Este domingo probablemente volverá a ganar. ¿Por qué ha ganado Gordillo tantas veces? Por lo mismo que ganan todos los alcaldes de pueblo y muchos de las ciudades: porque lo hacen bien. Alguien podría decir que no es porque lo hagan bien, sino porque han logrado convencer a la gente de que lo hacen bien. De acuerdo: pero es que cuando alguien lleva cuarenta años convenciendo a sus vecinos de que lo hace bien o es un buen alcalde o es un genio.
UN HOMBRE CON UN CREDO
Ciertamente, las siglas bajo las que se presentan son las de la CUT, pero en realidad sus verdaderas siglas son JMSG (por Juan Manuel Sánchez Gordillo). No es solo una mera cuestión de personalismo, pues en el fondo no hay buen alcalde que no sea un poco o incluso bastante personalista. Sus siglas son su propio nombre porque Gordillo es en sí mismo lo más parecido que un hombre puede serlo a unas siglas: es una institución, una leyenda, un símbolo, un extraño monumento barbudo y visionario.
Gente como él acaban convertidos en estatuas de sí mismos, pero Juan Manuel ha logrado conservarse de carne y hueso: rebelde, picajoso, intransigente, comprometido… No es fácil lidiar con él. Su credo es político pero es también, y sobre todo, credo: es un credo en sentido estricto y los creyentes verdaderos nunca han sido fáciles de manejar.
Marinaleda no es para Sánchez Gordillo simplemente una alcaldía. Para él, Marinaleda es un destino. Las generaciones venideras no podrán separar un nombre del otro. Cada uno de ellos es quien es por el otro. Sin el otro, cada uno de ellos sería otro.
UN COMUNISTA POR LIBRE
Como socio político es un tipo endiabladamente incómodo, como saben bien sus antiguos socios de Izquierda Unida, para cuya dirección siempre fue una especie de Pepito Grillo que iba por libre y cuya libertad más de una vez y más de dos puso en apuros a la ortodoxia de la federación. Sánchez Gordillo es comunista, sí, pero es un comunista por libre, lo cual ya en sí una interesantísima paradoja.
En los comicios de este domingo, aspira a la Alcaldía encabezando una lista bajo las siglas CUT-IU que, de lograr el respaldo suficiente, le valdrá para acumular 40 años al frente del Gobierno local, puesto que seguiría al frente del Consistorio marinaleño hasta el 2019.
A pesar de que la formación que lidera Sánchez Gordillo abandonó la coalición de izquierdas, finalmente se ha alcanzado una lista de consenso entre ambas fuerzas políticas para esta cita local con las urnas. Llegó a coquetear con Podemos, pero aquello no cuajó.
De esta manera, el líder jornalero, si vuelve a validar el cargo en las urnas, será el único ‘superviviente’ de los alcaldes andaluces que accedieron al cargo en las primeras elecciones locales celebradas en abril de 1979.
LISTA CUT-IU
Sánchez Gordillo concurre a los comicios locales de 2015 en una lista bajo las siglas CUT-IU, cuando se da la circunstancia de que la formación que lidera el alcaldable abandonó oficialmente IULV-CA en el mes de febrero.
Las razones que esgrimió la CUT para abandonar la coalición de izquierdas respondió a su “oposición constante” a la “política de pactos” con el PSOE-A puesta en marcha por la “mayoría de IU representada por el PCE” de la que pusieron como ejemplo el pacto en el Gobierno andaluz.
Por otro lado, cabe recordar que Sánchez Gordillo renunció durante la pasada legislatura al escaño que ostentaba en el Parlamento andaluz con IULV-CA en cumplimiento de la Ley Electoral de Andalucía, avalada por el Tribunal Constitucional, que declaró incompatibles los cargos de parlamentario y regidor municipal, para poder así seguir al frente del gobierno local de Marinaleda.
Sánchez Gordillo, a por su décimo mandato
Algo tendrá el agua cuando la bendicen y algo tendrán los alcaldes cuando los eligen. O mejor dicho, cuando los reeligen. O mejor dicho aún: cuando los reeligen no una ni dos ni tres, sino hasta ¡diez veces seguidas!
Juan Manuel Sánchez Gordillo, líder nacional de la Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT) y alcalde de Marinaleda (Sevilla, 2.800 habitantes), es el único primer edil de Andalucía que en las elecciones municipales de este domingo, 24 de mayo, vuelve a aspirar a renovar el puesto por décima vez consecutiva, toda vez que ostenta el cargo desde 1979.
Este domingo probablemente volverá a ganar. ¿Por qué ha ganado Gordillo tantas veces? Por lo mismo que ganan todos los alcaldes de pueblo y muchos de las ciudades: porque lo hacen bien. Alguien podría decir que no es porque lo hagan bien, sino porque han logrado convencer a la gente de que lo hacen bien. De acuerdo: pero es que cuando alguien lleva cuarenta años convenciendo a sus vecinos de que lo hace bien o es un buen alcalde o es un genio.
UN HOMBRE CON UN CREDO
Ciertamente, las siglas bajo las que se presentan son las de la CUT, pero en realidad sus verdaderas siglas son JMSG (por Juan Manuel Sánchez Gordillo). No es solo una mera cuestión de personalismo, pues en el fondo no hay buen alcalde que no sea un poco o incluso bastante personalista. Sus siglas son su propio nombre porque Gordillo es en sí mismo lo más parecido que un hombre puede serlo a unas siglas: es una institución, una leyenda, un símbolo, un extraño monumento barbudo y visionario.
Gente como él acaban convertidos en estatuas de sí mismos, pero Juan Manuel ha logrado conservarse de carne y hueso: rebelde, picajoso, intransigente, comprometido… No es fácil lidiar con él. Su credo es político pero es también, y sobre todo, credo: es un credo en sentido estricto y los creyentes verdaderos nunca han sido fáciles de manejar.
Marinaleda no es para Sánchez Gordillo simplemente una alcaldía. Para él, Marinaleda es un destino. Las generaciones venideras no podrán separar un nombre del otro. Cada uno de ellos es quien es por el otro. Sin el otro, cada uno de ellos sería otro.
UN COMUNISTA POR LIBRE
Como socio político es un tipo endiabladamente incómodo, como saben bien sus antiguos socios de Izquierda Unida, para cuya dirección siempre fue una especie de Pepito Grillo que iba por libre y cuya libertad más de una vez y más de dos puso en apuros a la ortodoxia de la federación. Sánchez Gordillo es comunista, sí, pero es un comunista por libre, lo cual ya en sí una interesantísima paradoja.
En los comicios de este domingo, aspira a la Alcaldía encabezando una lista bajo las siglas CUT-IU que, de lograr el respaldo suficiente, le valdrá para acumular 40 años al frente del Gobierno local, puesto que seguiría al frente del Consistorio marinaleño hasta el 2019.
A pesar de que la formación que lidera Sánchez Gordillo abandonó la coalición de izquierdas, finalmente se ha alcanzado una lista de consenso entre ambas fuerzas políticas para esta cita local con las urnas. Llegó a coquetear con Podemos, pero aquello no cuajó.
De esta manera, el líder jornalero, si vuelve a validar el cargo en las urnas, será el único ‘superviviente’ de los alcaldes andaluces que accedieron al cargo en las primeras elecciones locales celebradas en abril de 1979.
LISTA CUT-IU
Sánchez Gordillo concurre a los comicios locales de 2015 en una lista bajo las siglas CUT-IU, cuando se da la circunstancia de que la formación que lidera el alcaldable abandonó oficialmente IULV-CA en el mes de febrero.
Las razones que esgrimió la CUT para abandonar la coalición de izquierdas respondió a su “oposición constante” a la “política de pactos” con el PSOE-A puesta en marcha por la “mayoría de IU representada por el PCE” de la que pusieron como ejemplo el pacto en el Gobierno andaluz.
Por otro lado, cabe recordar que Sánchez Gordillo renunció durante la pasada legislatura al escaño que ostentaba en el Parlamento andaluz con IULV-CA en cumplimiento de la Ley Electoral de Andalucía, avalada por el Tribunal Constitucional, que declaró incompatibles los cargos de parlamentario y regidor municipal, para poder así seguir al frente del gobierno local de Marinaleda.
Sánchez Gordillo, a por su décimo mandato