Cirujano de hierro
Será en Octubre
¿Te has planteado alguna vez cuánto tiempo te pasas sentada al día? Lo más probable es que la respuesta sea mucho. De hecho, son tantos los momentos que nuestro cuerpo se encuentra en esta posición, que es imposible hacer un cálculo aproximado.
Sin embargo, existen culturas en las que la gente se sienta en el suelo. De hecho, en algunos países se ha convertido en una postura normal y muchas personas no utilizan la silla. ¿Te gustaría saber cuál es la postura correcta? ¿Hasta qué punto deberías sentarte más tiempo en el suelo?
¿Cuáles son los beneficios de sentarse más tiempo en el suelo?
El debate está abierto y hay algunos que están a favor de utilizar esta postura y otros no tanto. Lo cierto es que al principio puede resultar un poco molesta, sobre todo si estamos acostumbrarnos a sentarnos en sillas o similar.
Sin embargo, sentarse más tiempo en el suelo genera un impacto saludable en el cuerpo y estos son algunos de sus beneficios:
Precauciones a tener en cuenta
No todo es tan fácil. Sentarse en el suelo o en cuclillas puede conllevar múltiples problemas, por ejemplo, podemos sentir presión y dolor sobre las rodillas, en cuyo caso es preferible poner un pie en el suelo.
El equilibrio también puede jugar en nuestra contra. Esta postura ofrece menos estabilidad, aunque cabe la posibilidad de sujetarse en la pared o en algún sofá. En cuanto a sentarse más tiempo en el suelo con las piernas cruzadas, podemos dar lugar a una mala postura y dejar paso al dolor lumbar. Para impedirlo, evita encorvarte, lleva tu columna a una posición neutra y concentra el peso en las caderas, no en los pies.
Sin embargo, existen culturas en las que la gente se sienta en el suelo. De hecho, en algunos países se ha convertido en una postura normal y muchas personas no utilizan la silla. ¿Te gustaría saber cuál es la postura correcta? ¿Hasta qué punto deberías sentarte más tiempo en el suelo?
¿Cuáles son los beneficios de sentarse más tiempo en el suelo?
El debate está abierto y hay algunos que están a favor de utilizar esta postura y otros no tanto. Lo cierto es que al principio puede resultar un poco molesta, sobre todo si estamos acostumbrarnos a sentarnos en sillas o similar.
Sin embargo, sentarse más tiempo en el suelo genera un impacto saludable en el cuerpo y estos son algunos de sus beneficios:
- Mayor actividad. Escoger el suelo en vez de una silla, potencia la musculatura de nuestro cuerpo. Estar en cuclillas o simplemente en el suelo puede ayudar a prevenir dolores de espalda. No es algo milagroso, pero si mantenemos una postura adecuada, ayuda.
- El cuerpo se diseñó para ir al baño de esta forma. Según algunos especialistas, estar en cuclillas facilita la salida de las heces al permitir que el suelo pélvico y el esfínter se equilibren.
- Recomendable en el momento del parto. Ponerse en cuclillas facilita que el bebé salga al permitir una mayor apertura. De hecho, es una de las posturas empleadas por los animales, al abrir más fácilmente la pelvis. También la gravedad ejerce de ayuda y los esfuerzos al empujar son menores. Asimismo, supone de gran ayuda en las contracciones y los desgarros son menores, dando lugar a un parto más sencillo.
- Mejorar la postura. Las sentadillas restan presión al cuello y los tejidos conectivos se mantienen flexibles y elásticos al mantenernos sentados en el suelo, justo lo contrario que sucede al estar en una silla.
Precauciones a tener en cuenta
No todo es tan fácil. Sentarse en el suelo o en cuclillas puede conllevar múltiples problemas, por ejemplo, podemos sentir presión y dolor sobre las rodillas, en cuyo caso es preferible poner un pie en el suelo.
El equilibrio también puede jugar en nuestra contra. Esta postura ofrece menos estabilidad, aunque cabe la posibilidad de sujetarse en la pared o en algún sofá. En cuanto a sentarse más tiempo en el suelo con las piernas cruzadas, podemos dar lugar a una mala postura y dejar paso al dolor lumbar. Para impedirlo, evita encorvarte, lleva tu columna a una posición neutra y concentra el peso en las caderas, no en los pies.
