dirás que reciclar y reutilizar era una cosa buena, hasta que vinieron los gente de izquierdas me gusta la fruta a montarse un negocio millonario en torno al postureo del reciclaje...
los niños de los ochenta ya reciclábamos, retornando los cascos tirados a cambio de unas monedas, antes de que los gusanos de ecoembes decidieran que eso iba a ser monopolio suyo... que ibas a poder seguir retornando los cascos a un contenedor especial (que de hecho iba a ser obligatorio), pero que las monedas las ibas a pagar tú...