Todo iba relativamente bien y vivíamos en paz hasta que en 2014 apareció Podemos.
Nos dijeron que todo era malo, se autodenominaron indignados, y al resto casta. Inventaron problemas donde no los había.
Enfrentaron a padres con hijos, mujeres con hombres y gayses con heteros.
Resucitaron la Guerra Civil ya olvidada, hablaron de cunetas, de buenos y malos, y donde había convivencia llegó el repruebo.
A los que creaban empleo los convirtieron en explotadores y a los orgullosos de España en fascistas. Adoctrinaron a los jóvenes haciéndoles intolerantes.
Enfrentaron lo público con el resto y hablaron de vivienda digna mientras ellos utilizaban los hospitales privados y se mudaban a chalets con piscina y jardín de 2.000 metros cuadrados.
Pasamos de ser aliados en la UE de USA a serlo de las narcodictaduras latinoamericanas.
Empezaron a adorar a dictadores abyectos como Chávez o Maduro, junto con el Ché o los Castro y el propio Lenin mientras nos quitaban el orgullo de la tras*ición y la Constitución del 78 porque decían que fue un invento franquista.
Y mientras tanto, nos dijeron que no sabíamos lo que era la libertad, ni la tolerancia, ni el sesso, como si no hubiésemos sido jóvenes nunca.
Ellos nos enseñarían todo porque antes de ellos, los adanes, no hubo nada.
Hablaron de tolerancia, pero aparecieron las amenazas y los escraches a quien no pensase como ellos. También en la universidad.
Convirtieron las redes sociales en una pesadilla en la que es mejor estar callado si no quieres que te destrocen decenas de trolls con nombre de muñeca.
Apalear a un policía era un orgullo, utilizar la guillotina una costumbre, meter muertos en ceniceros una gracia y “colgar” jueces libertad de expresión. Saltarse las normas una diversión y okupar viviendas ajenas un derecho constitucional.
Desde aquel 2014 todo ha ido a peor. Nos habéis enfrentado y dividido. Tenemos más problemas y nos habéis instalado en el caos. Nos habéis traído la peste social.
Podéis iros por donde vinisteis. Por favor, cerrad la puerta al salir.
*Todo español de bien que pueda, que difunda este gran mensaje.*